Padre y Madre

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Volvemos a la Casa Staria después del escape de Asta

Snif... snif.. Asta - Sollozando decía una mujer peliceniza

Por favor mamá, deja de llorar por el inútil de mi hermano - pidió de mal modo la pequeña pelicenizo

Aiko no digas eso sobre tu hermano!! - alzó la voz la mujer

Pero tu siempre lo llamabas así, nunca tuvo magia, siempre lo golpeabas y le decías que era un inútil, que nunca podría ser Rey Mago!!- exclamó Aiko

Lo sé!! Lo sé!!! Lo sé !! - repetía la madre

Entonces porq..  - fue interrumpida por su madre

Porque no quería que muriera! No.. quería que corriera el mismo destino que tu padre. - dijo la peliceniza

Mamá, que pasó con papá? - preguntó la niña con rasgos diabólicos

Liena..  - dijo Aiko en voz baja

Su padre, murió protegiendo a mi cuñado - finalizó Lichita

Ya veo, papá era bueno.. snif...yo siempre... snif... pensé que nos había abandonado, porque pensaba que era malo - culminó Aiko observando a las restantes.

Claro que no hija, el... el era maravilloso, siempre tenía una sonrisa, nos mantuvimos ocultos debido a que el era de la realeza y yo una plebeya. - dijo Liichita sorprendiendo a sus hijas

El quiso estar con nosotros, pero lo perdí... lo perdimos.. siempre sentí rabia, me sentía sola, lo culpé por eso.. sin saber que ese odio me quitaría a Asta.. - dijo la joven madre

Mamá.. - dijeron unísono las niñas llamando la atención de su madre

Crees que... Asta nos perdone... snif.. crees que... snif.. quiera ser aun nuestro hermano? - preguntaron las niñas empezando a llorar.

Hijas... no lo sé, espero encontrarlo pronto y pedir disculpas... que pésima madre he sido.. - dijo la peliceniza.

Ese día en la casa Staria empezó una nueva búsqueda, no sólo de el niño llamado Asta, si no también de su perdón..

Ahora volvemos al presente con Asta, que se encontraba despertando en un cuarto bastante lujoso.

Yo.. donde es.. - fue interrumpido por la voz de la mujer que lo encontró

Veo que ya despertaste - dijo acercándose a la cama

Donde estamos? Quien es usted? - preguntó un poco asustado el niño

Estamos en mi casa, la residencia Silva y en cuanto a mi nombre es Acier Silva - dijo la peliplata con voz calmada.

Silva? - preguntó el niño con inocencia

Si, somos parte de la realeza del reino - dijo la mujer sorprendiendo al cenizo

Ya veo, muchas gracias por todo Acier-san - dijo el joven

Y dime que pasó antes de encontrarte en el bosque, como te llamas, por qué.. por que querías que te matara? - cuestionó la peliplata sorprendiendo a 4 jóvenes que estaban detrás de la puerta escuchando todo.

Yo...no - la voz del niño se empezaba a quebrar -

yo no poseo maná - dijo sorprendiendo a la mujer y a los jóvenes Silvas

Desde que naciste? - preguntó la matriarca Silva

Eso dice mi familia - respondió el niño

Y por que huiste?, por que te encontré en el bosque? - cuestionó la mujer

Mi familia, siempre me han marginado, mis hermanas mencionaban que era un inservible, madre también lo decía. - dijo el niño de manera triste haciendo que la mujer cambie a una expresión preocupada poniendo su mano en su corazón.

Tenía el sueño de ser Rey Mago,  demostrar que alguien como yo podría alcanzar lo más alto... pero ese sueño se acabó. - dijo de manera apagada

Asta - la mujer lo llamó debido a que notó su nombre en la camisa que andaba puesta el niño

Lo siento señorita Acier, no quería incomodarla, después de todo... sigo siendo un inút... - El joven fue interrumpido por un abrazo por parte de la peliplata

Asta tu... recuerdas lo que te dije antes de traerte? - cuestionó la mujer

Si... pero yo soy un... - fue interrumpido nuevamente por Acier

No lo eres, por favor Asta, déjame ser tu madre, déjame quererte como una, tal vez no seas mi sangre pero por favor, déjame darte una familia. - dijo Acier de manera calmada.

Esto último sorprendió a los 4 hermanos atrás de la puerta.

Pobre chico, debió ser duro - pensó el mayor llamado Nozel en sus adentros

Vamos a tener otro hermano - Pensaron  el resto de los hermanos

Con Asta y Acier

Yo... yo podría ser su hijo? - preguntó Asta aguantando las lágrimas

Claro que si cariño - dijo la matriarca aun manteniendo el abrazo maternal.

Muchas gracias - dijo el niño soltando su llanto

Gracias a ti por dejarme ser tu madre, Asta - dijo la peliplata.

Mañana te presentaré a tus hermanos y la residencia. - expresó la matriarca arrecostando a su ahora hijo en la cama.

Gracias.. - dijo el pelicenizo quedándose dormido.

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