Anoche mi madre me pidió que me pusiera la alarma a las 04:30h para que no se quedara dormida ya que tenía que ir a trabajar. Así que desde entonces, no he dormido nada. He hecho un poco el vago en la cama viendo vídeos de tiktok, y creo que ya es hora de que me levante y me arregle y haga algo productivo antes de ir a buscar a mi madre al trabajo. No he hecho nada productivo. Un live en instagram mientras me arreglaba y en el cual mi madre estaba conectada. He ido a buscarla. Hemos comido viendo una película navideña y hemos ido a tomar café. Hemos terminado de comprar los adornos para el árbol y he vuelto sola a casa ya que mi madre había vuelto a quedar.
En este punto todo ha empezado a torcerse. He actualizado mis calendarios y mirado tiktoks para recrear aunque en los borradores tengo 66 vídeos que tengo por subir. No he hecho ningún tiktok. Me han venido muchos muchos pensamientos intrusivos y me he aguantado las ganas de llorar porque justamente ha entrado mi hermana por la puerta. Poco después ha venido mi madre. He intentado hacerme la dura mientras acabábamos de decorar el árbol de Navidad pero mi madre ha notado que algo no iba bien, que había vuelto a hundirme en las voces de mi cabeza y se temía que algo malo pasara. Me he desmaquillado mientras escuchábamos villancicos que mi madre ha querido poner y me he puesto a llorar en silencio. Mi cabeza iba a explotar.
(Parte dura de leer).
Me he duchado y mi cabeza solo pensaba en que metiera la cabeza debajo del agua hasta ahogarme completamente. No ha sido así, he hecho una lucha y he conseguido salir sin ningún rasguño. Haciendo tiempo para la hora de cenar hemos puesto otra película navideña, mi madre me ha visto mal y me ha hecho poner mi cabeza en su regazo. En este momento ya no he podido esconderme y me he puesto a llorar. Hemos pausado la película y hemos salido al balcón a fumar. Mi madre siempre intenta darme ánimos, pero no consigo sacar una sonrisa.
Preparando la cena mi cabeza me decía que estaba gorda y no me merecía comer nada (todo esto sabiendo que había bajado de peso y eso era malo porque ya estaba en bajo peso). A pesar de eso he hecho otra lucha. Durante la preparación de la cena ha habido una pequeña discusión entre mi madre y mi hermana en la cual ésta última me ha involucrado. He explotado y empezado a disculparme por estar en esta mala situación mental. Mi madre me decía que no era culpa mía que yo estuviera mal pero mi cabeza solo escuchaban esas voces que decían que me acercara a la baranda del balcón y saltara.
Después de cenar ya estaba hasta arriba de sentirme mal conmigo y cuando mi hermana y mi madre estaban en el baño limpiando el cenicero, me he quedado en la cocina y me he metido los dedos en la garganta. He empezado a echar todo lo cenado y me he acurrucado en un rincón temblando, llorando y pidiendo perdón por lo que había hecho. Me he puesto a limpiar desesperadamente el suelo. Me he sentido patética y ridícula, pero tenía que hacerlo, para calmar un mínimo las voces y estar un poco más tranquila por mi cuerpo.
Me he metido en la cama, pero lo que nadie sabía, es que ya tenía una venda, unas gasas y la cuchilla bajo la almohada. Me siento muy culpable por todo lo que causo y en cuanto se han dormido he preparado las cosas y mientras me he dicho miles de insultos, la cuchilla acariciaba mi piel. Gotas escarlatas se dirigen a la sábana pero las detengo con las gasas y me vendo la pierna rápidamente como me enseñaron. No me he dado cuenta hasta que lo he ido a guardar todo de que un gotita roja había llegado a tocar la sábana. Le doy poca importancia y me dispongo a descansar mientras lloro en silencio.
Tuya, Paw.
