Todo Lo Que Hice Por Ti

Capitulo 3: Culpa

¿Cuánto tiempo podría contenerlo?

Chandler se hacía pedazos mientras más lo retenía, ese fin de semana solo quería tiempo para meditar su pensamientos, en la mesa de a lado se encontraban las dos pulseras de oro, la de Cassian y la de Mary. Las observo por un momento y después se alistó para salir, tomo las dos pulseras y fue directamente al cementerio.

Sabía que sus dos amigos ya estaban en un lugar mejor, se habían reunido después de todo, sabía que ahora ellos eran felices en aquel lugar de ensueño.

—Jamás podré perdonarme —Chandler se arrodilló junto a sus tumbas, en un pequeño hoyo puso las pulseras, una en cada lado.

—¿Por qué te torturas así? —Amanda había seguido a Chandler.

—No lo entenderías

—Debiste superarla cuando eligió a Cassian.

—No puedo seguir con esto Amanda

Amanda estaba confundida —¿De qué estás hablando?

—Por favor —Chandler se puso de pie y se detuvo frente a Amanda —Ya estoy harto de seguir fingiendo que nada paso, se suponía que en tú brillante plan nadie moría y ahora mis dos mejores amigos están muertos y todo ¿Por qué? Por qué tú tampoco pudiste superar a Cassian.

—Chandler será mejor que te calles, hicimos todo correcto, nunca contamos con la reacción que tendría en ellos.

—Por supuesto, pero solo ustedes estaban con Mary esa noche, al carajo todo, haré lo correcto, jodanse todos ustedes —Chandler se dispuso a ir con la policía y contar la verdadera historia.

—¡Chandler! Detente, no sabes lo que estás haciendo —Amanda corrió detrás de el —No seas un imbécil, vas a arruinar todo.

Pero Chandler no se detuvo, subió a su auto dispuesto a hacer lo correcto.

—¡Mierda! —Amanda también se fue a toda prisa, llamo a Darius y Lexi, se reunirían en una pequeña casa de Brooklyn.

—¿Qué demonios paso? —Darius necesitaba escuchar una explicación.

—¿Por qué no fuiste tras el? —Y a Lexi solo le importaba lo que Chandler hiciera.

—Creanme, hay cosas más importantes que detener a Chandler.

—¿Por qué? —Darius seguía desesperado, apretaba los puños y caminaba por todo el lugar.

—Solo es cuestión de tiempo, si lo detenía cuánto creen que seguiría soportando —Amanda se quitó su chamarra y abrió los cuartos dónde guardaban demasiados secretos.

—¿Entonces, qué haremos? —Lexi trataba de no morderse las uñas.

—Preparar nuestra mejor defensa.

Pasaron la noche diseñando lo que ellos llamaron una defensa.

—No creen que es demasiado —Lexi había pasado toda la noche defendiendo a Chandler.

—¿Por qué sería demasiado? —Y Amanda estaba a nada de perder la paciencia.

—Mary y Cassian eran nuestros amigos y Chandler también lo es.

—Pero los amigos no se traicionan —En cierta parte Darius tenía razón.

—Todo esto apesta —Lexi tomo su chamarra y salió de la casa.

Darius y Amanda no le dieron importancia —¿Tu que dices Darius?

—Bueno, los sentimientos están acabando con Lexi y Chandler, es la peor parte de los triángulos amorosos.

—Esto es más que eso.

Chandler se dirigía con el escuadrón de homicidios de la ciudad de New York.

Le llevo toda la noche dar su confesión, dos detectives tomaron su declaración y abrieron una investigación. En si, Chandler también tenía culpa, era cómplice de dos homicidios.

—¿Qué era Mary Daemon para usted?

—Ella lo era todo, ella era mi mundo

Inicio Flashback

Hace un par de años, cuando todos ingresaron a la universidad para estudiar diseño, era como todos esos días en los que vas por primera vez a una nueva escuela, Chandler se dirigía a su primera clase, en el camino observo a una chica que revisaba el horario y ubicación de los salones, el se acerco también y pudo ver más a detalle que la chica tenía los mismos libros que el

—¿También eres de primer año?

Aquella chica lo miro y sonrió aliviada —Por fortuna si, soy Mary Daemon.

El quedó encantado con ella, se veía en sus ojos —Chandler Grunwald.

Se miraron por unos segundos

—Debemos irnos o llegaremos tarde en nuestro primer día —Mary tenía razón debían irse si no querían llegar tarde a su clase de “Psicología en el diseño”.

Caminaron juntos desde el primer día, hasta que llegaron a ese salón que cobro vida a todo lo demás. Mary y Chandler se sentaron juntos y al otro lado del salón se encontraba nada más ni nada menos que Cassian Slater junto a Amanda Beasley.

Mary reía por la anécdota de Chandler de cuando estaba mudando sus cosas y esa risa fue suficiente para llamar la atención de Cassian, al verla, se perdió por completo.

—De verdad no puedo creer que te haya pasado algo así —Mary definitivamente estaba obteniendo una muy bonita amistad.

—Enserio, es algo nuevo pero estaba nervioso como otras veces.

Mary giro la cabeza accidentalmente y en ese pequeño accidente sus miradas se cruzaron, sus ojos cafés se juntaron, Cassian y Mary se sonrieron varias veces.

—¿Quién es el? —Mary se preguntaba si Chandler lo comocia.

—Ah si, es mi compañero de cuarto, se llama Cassian Slater. ¿Por qué?

—Simple curiosidad

Y desde ese día todas las bellas sonrisas de Mary eran para Cassian, cada vez que Chandler los miraba sabía que Mary sonreía para Cassian y el se aseguraba de darle toda su atención. Chandler podía ver en los ojos de Mary, podía ver qué estaba enamorada de Cassian, podía ver que ella era feliz con el y por eso el siempre la apoyo, se aseguro de que Mary fuera feliz.

Fin Flashback

—¿Y por qué no hizo nada para salvarla esa noche? ¿Por qué no les advirtió?

Esa era la pregunta más difícil de aceptar —Por que yo me deje llevar por la idea de Amanda, la idea de que podría estar con Mary.

—Con esto es suficiente, comenzaremos la investigación ya puede irse Grunwald, le llamaremos si tenemos más información o si necesitamos de su ayuda.

Chandler se limpiaba las lágrimas y salió de la sala de interrogatorio pero antes de irse un detective lo detuvo
—Chandler, cuídate de ellos, en especial de Amanda —El detective saco una tarjeta de presentación —Si sabes algo más o estás en problemas llama a este número.

—Por supuesto —Chandler guardo la tarjeta en la funda de su teléfono y volvió a los cuartos de la Universidad.

Y así es como el chico que eligió algo con que vivir se convirtió en el chico que sintió culpa.