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Sonrío, y mientras la miro a los ojos, el dolor en mi corazón disminuye un poco cuando las veo de nuevo. Ella está sonriendo mientras nos paramos frente a una cafetería en algún lugar de Piltover. Todavía puedo recordarlo...
—¡Vi!— Me río cuando ella coloca su croissant justo encima de su boca como un bigote y hace mímica pavoneándose como Draven.
Ella sonríe y levanta una ceja. —¿Quién es Vi? ¡El nombre es Draaaaaaven!
No digo nada. En cambio, saco mi teléfono del bolsillo y tomo una foto mientras ella hace la pose más ridícula con el bigote de croissant todavía en su lugar.
—¡Cupcake!— Grita indignada, entrecerrando sus ojos celestes hacia mí. Me río de nuevo mientras intenta inútilmente agarrar mi teléfono.
—¡No puedes hacer esas ridículas poses sin esperar que te tome una foto!— Le regaño, tratando de mantener el teléfono fuera del alcance de la mujer. Ella se lanza a por ello, con una gran sonrisa en su rostro.
Les transeúntes nos miran con curiosidad, pero no podría importarme menos. Finalmente, se da por vencida y hace pucheros de una manera realmente adorable, tomando un bocado de su croissant. —Cierto, es así.
