Al despertar sentí el lado izquierdo de la cama vacío y al girarme solamente confirmé lo obvio: Kevin ya se había levantado. Mientras me sentaba al pie dr la cama tomé una de las sábanas y con ella cubrí mi cuerpo desnudo para después dirigirme hacia la habitación principal dónde Kevin había dejado mis maletas.
No puedo bajar con alguna camisa de él puesta verdad?. No. Claro que no, mi hermano armaria un escándalo mayor al de un reality show y se supone que este sería un viaje para completa relajación, después de todo los primeros exámenes son dentro de una semana.
A tropezones logré llegar a la puerta del fondo y con movimientos torpes coloqué la extraña llave en el cerrojo pero una incómoda sensación de ser observada me invadió haciéndome encoger de hombros.
-"Kay...buenos días"- saludé al darme la vuelta sin despegar las manos de mi cuerpo para no dejar caer la sábana
-"Hola Lex"- respondió tallandose los ojos mientras dejaba escapar un bostezo. -"Oh....vaya, creí que eso era un camisón"- soltó abriendo los ojos más de lo normal, al escuchar estas palabras sentí mi cara arder
-"Por favor, no le digas a Santiago"-
-"No! Claro que no, anda, entra a vestirte..
Yo te esperaré aquí afuera"-
Asentí y finalmente terminé de abrir la puerta, al instante divisé mi maleta al lado de un pequeño sillón corrí hacia ella y saqué una muda de ropa interior, mi pantalón de la pijama, una camiseta y la sudadera que Kevin me dio el día de la cafetería . Rápidamente me coloqué cada una de las prendas y salí de nuevo con la sábana hecha bola entre las manos para colocarla de nuevo en su lugar.
-"Kay...puedo preguntarte algo? "- dije nerviosa, ella giró a verme y asintió. -"Cómo fue que...mi hermano no supo de esto?...no le extrañó no vernos a Kevin y a mi?"- pero realmente esa no era la pregunta, no había manera de preguntar lo que realmente quería sin que hubieran posibilidades de que me enterara de algo que nos hiciera sentir incómodas a ambas.
-"Oh...bueno es que se le ocurrió llevarme a un paseo en bote por el lago y cuando regresamos a la orilla llegó tan cansado que se tiró en el sofá, de un momento a otro dijo que iría a buscarlos pero...lo convencí de ir yo y cuando subí noté la música suave..."- tragó saliva-"Supuse que necesitaban tiempo a solas y cuando bajé de nuevo el ya había quedado inconsciente sobre el sillón"-
(Puedes estar tranquila jajaja al menos sabes que no se tiró a tu hermano)
-"Gracias al cielo que no se animó a subir y gracias a ti también Kay"- asintió-"Ahora solo déjame poner esta sábana en su lugar y levantar un poco el "tiradero" de anoche"- solté una risa nerviosa y ella me dedicó un pícaro baile de cejas a lo que yo respondí sonrojandome de nuevo.
Cuando hube terminado de poner todo en su lugar bajé las escaleras junto con Kay para dirigirnos al comedor principal dónde extrañamente no encontramos a nadie pero la comida ya estaba caliente y previamente servida en los platos.
-"KEVIN!"-
-"SANTI!"-
Gritamos. Nadie contestó.
-"Vayamos a ver al lago...tal vez estén ahí"- dijo ella a punto de correr, pero la detuve
-"Habrían dejado una nota o algo parecido...algo no anda bien Kay"-
-"Que hacemos?...quieres que le marque a tu hermano?"-
-"Por favor"- dicho esto ella tomó su celular y entre sus contactos seleccionó el número de mi hermano.
Sonó una vez.
De nuevo...
Una vez más...
Y....nada, el no contestó.
