Estaba él con, con Mike. Mi "amiga". Estaban charlando sentado en el pasto felices de vida. Decidí tratar de no pensar en eso. Yo me había enamorado perdidamente sin darme cuenta de que él solo jugaba con mis sentimientos.
"Suéltalo, suelta lo que te hace daño. No te puedo dar una clave para olvidar, pero si te puedo asegurar que una persona no te puede hacer felíz si se aferra a algo que sólo le ha traído desilusión o a alguien que hace tiempo le perdió el respeto. Nadie puede pretender congelar el pasado y vivir arropado bajo un bonito recuerdo, hay que entender que el tiempo pasa, que muchas veces las personas cambian y que ya no existe esa persona de la que te enamoraste. Si quieres ser felíz debes dejar ir todo lo que te trae tristeza, no hay otra salida, y eso te va a costar. Siempre hay una gota que rebalsa la copa, y llegará ese momento en el que dirás "no más" y decidirás alejarte. Dejar de mandarle mensajes será fácil, bloquearlo será fácil; ya que te ha hecho mucho daño y el orgullo se encargará de hacerlo fácil, olvidar el pasado costará mucho más, pero lo que realmente se hará difícil será olvidar el futuro que habías imaginado con esa persona. Difícil será olvidar las cosas que planeaste para los dos, difícil será tener que romper a pedacitos tus ilusiones. Lo más difícil vendrá después, cuando lo veas agarrando la mano de otra persona, cuando lo veas riendo, y tengas que fingir felicidad; ese es un sentimiento que olvidarás por un tiempo, y que al fingirlo te hará sentir más dolor". Había escrito yo una vez en mi cuaderno, ni siquiera sabía por qué, pero este día lo había entendido. Era útil, muy útil.
Sentía que tenía que dejar de planear el futuro, dejar de intentar definir como me siento, dejar de decidir exactamente que es lo que quiero y solo dejar que pase lo que tenga que pasar. No podía creer que hubo un momento en el que pensé que funcionaría, que estúpida.
Y no había mucho mas que decir sobre el resto de mi día, dado por echo que estaba DE BAS TA DA. Llegué a casa, no hablé con nadie, Subí a mi habitación, y me puse a llorar. No entendía nada en absoluto. Si Faustino sabía que yo era amiga de Mike, porque el otro día me habia dicho de presentármela. Esa y muchas dudas mal, me ponían de mal en peor. Finalmente dormí. "Dormir para no pensar"...
