Capítulo 2

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Hoy, finalmente, Taki pudo ver a su hyung en su asiento como era usual. Sus palabras...Ya tenía algo en mente que decirle. Pero, ahora, solo se dedicaría a admirarlo en su asiento a la distancia.

Ah, ¿Cómo se llegó a enamorar de él? Bueno, solían tener charlas constantemente durante los almuerzos, salían juntos a hacer cualquier cosa como simplemente caminar y hablar, fue la primera persona con la que realmente pudo sincerarse completamente.

También debió ser por su carisma. Koga tenía un aura tan atrapante que te hacía casi imposible odiarle y una vez que compartías palabras con él quedabas enganchado en la conversación inmediatamente. Era un chico humilde y un gran escucha para cualquiera. Su manera de ser era tan única e ideal para él...

Cada vez que pensaba más en él, más dolía su pecho. Debía ser producto del amor que sentía, este no era correspondido y solo le provocaría más dolor.

Llegada la hora del almuerzo, era su momento y hora de actuar.

Levantándose lo más rápido que pudo y tomando sus cosas, nuestro protagonista se apresuró a ir a buscarlo. Necesitaba intercambiar palabras nuevamente con K.

Finalmente llegando a la puerta de aquella aula, su corazón se estrujó, ¿O quizá era la presión en el pecho que sentía por la enfermedad que lo consumía, producto de su emoción al ver a quien amaba?

—¡Koga hyung! —Llamó una vez ingresó al aula, no tenía vuelta atrás.

El llamado se había girado hacia su dirección, aún sobre su asiento. Sin embargo, no fue el único que se giró a verlo. Una chica alta y bonita, de figura delgada y, de cabello largo y ondulado también lo había visto. Ella se mostraba notoriamente curiosa de saber el porqué del inesperado llamado que hizo.

Se acababa de bloquear por un instante y el dolor en su pecho no se hizo de esperar.

Sin detenerse, muchos otros estudiantes de aquel salón se giraron a verle, entusiastas por saber que iba a decir. Estaban ansiosos por el espectáculo que se acercaba.

—...Dime Taki —Fue directo. No se lo esperaba, normalmente K iniciaba diciendole "Hola pequeño" o "¡Taki-ah, me alegra verte!". Su cerebro procesó el saludo un momento percatándose que debía ser producto de la tensión de la declaración que le hizo días atrás.

Tragando saliva, buscó las palabras que debería usar ahora. No quería que esto fuera algo público, sobre todo porque sabía que podría ser producto de vergüenza o peso para su hyung. Así que, usó la primera idea que se le vino a la cabeza.

—¿Podemos hablar de algo importante un momento? Por favor, es un asunto serio —"Asunto serio", mierda, ¿No podrían relacionarlo con el Hanahaki Disease? ¡Mierda, mierda!

Taki miró con ojos suplicantes a Yudai.
Este hizo contacto visual con el de menor año por unos segundos y luego apartó la vista disimuladamente.

El enfermo podía sentir el peso de miles de ojos sobre él, sentía náuseas...Náuseas, miedo y una dolorosa presión en su pecho por miedo del rechazo.

—...C- Claro- ¿Por qué no? —Tartamudeó K, soltando una risa nerviosa al mismo tiempo que se levantaba de su asiento—. Pero, que sea rápido, ¿Si? Estaba...

—Yudai, no te preocupes por mi —Interrumpió la chica bonita de antes, que estaba sentada sobre la carpeta del nombrado—. Podemos seguir hablando luego de clases, anda y haz lo que tengas que hacer, ¿Si?

Taki pudo escuchar un suave "crack". No sabía si se trataba de su corazón por el vago intercambio de palabras entre esos dos...O de alguna raíz que haya roto uno de sus huesos dentro de su pecho. Pero lo que si sabía...Es que dolía con la misma intensidad con la cual amaba a K...Los números o palabras no bastaban para describir esa sensación de ardor y dolor.

365 días  [ K x Taki ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora