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capítulo 5

Después de la cena, Hermione instaló sus habituales tres mesas en la sala común y sacó todos sus libros, pergamino, tinta y plumas. Estaba completamente preparada para dedicarse a su trabajo cuando escuchó una tos frente a ella. Ella miró hacia arriba y parpadeó, Ron estaba parado allí.

"¿Sí?" Ella dijo.

"Um ... ¿puedo? ¿Tú ...? ¿Puedes ayudarme con el ensayo de Snape?" Ron finalmente se atragantó.

Hermione se relajó y dejó escapar un suspiro que no sabía que estaba conteniendo, "Está bien".

Felizmente, Ron respiró hondo, se sentó frente a Hermione y sacó su libro de pociones. Abrió la boca para hacerle una pregunta cuando fue interrumpido por algo detrás de él que llamó su atención.

"¡Harry! Por aquí." Hermione gritó al otro lado de la sala común.

Ron se dio la vuelta para ver a Harry sonreír y caminar, genial ahora tendría que compartir este prometedor tiempo a solas. Harry se acercó a la mesa y notó la mirada de Ron, obviamente el otro chico no quería que se quedara, lo que realmente no era un problema para él ya que estaba ansioso por llegar a Barty.

"Oye, lo siento, Mione, iba a ir a la biblioteca a trabajar en mi ensayo. Quiero intentar hacer esto por mi cuenta si voy a mejorar en pociones". Harry mintió.

"Bien por ti Harry, si necesitas ayuda no dudes en volver, ¿de acuerdo?" Hermione le sonrió haciendo que Ron le enviara más miradas de muerte.

"Está bien, te veré mañana, supongo. O más tarde esta noche. Depende de qué tan pronto termine". Harry sonrió y salió del agujero del retrato.

Harry estaba tan feliz mientras caminaba hacia la habitación de Barty que casi comenzó a saltar, esta noche iba a ser incluso mejor que la noche anterior. Bueno, él esperaba tanto. Pronto llegó a la pesada puerta y llamó solo para estar seguro.

La puerta se abrió con un chirrido y Harry entró. La voz de Barty gritó desde el baño: "Pon tus cosas donde quieras. Saldré una vez que esté ... cómo lo dijiste ... decente. Aunque no creo eso se aplica de verdad, como dice mi padre, nunca he sido una persona decente ". Con ese comentario, Harry escuchó la risa como un ladrido de Barty y la sonrisa dejó su bolso en el baúl y comenzó a sacar su tarea.

Barty salió con un par de jeans y una camiseta negra, se sirvió con indiferencia una copa de vino y se reclinó con gracia en la gran silla de cuero negro, apoyando los pies en la otomana que conjuró el día anterior. "¿Que tengas un buen día en la escuela, Harry?" Dijo burlonamente.

"Oh genial." Harry se echó a reír tumbándose en el suelo y abriendo su libro de herbología.

"Mmm, estaba hablando con Hagrid hoy y pronto va a salir para ver algo muy interesante". Barty dijo tomando un sorbo de vino.

Eso llamó la atención de Harry, "¿Qué es?"

"¡Harry, estoy sorprendido de ti! Si te lo dijera, no sería una sorpresa. Tendrás que esperar." Barty reprendió dejando que sus ojos bailaran con una risa enmascarada.

"Muy bien." Harry suspiró y volvió al trabajo.

Mantuvieron una broma juguetona a través de la tarea más fácil de Harry hasta que el gran ensayo de Snape ya no pudo evitarse. Harry se concentró intensamente en los pasajes de su libro y logró escribir un metro y medio antes de pedirle ayuda a Barty.

"Barty, estoy atascado". Harry dijo masticando la punta de su pluma.

Barty se estiró como un gato y dejó su copa para inclinarse hacia adelante en su silla. "¿Cuál es el problema?"