Capitulo 19

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Si fuera tu iría a la salida en cuanto ese timbré suene ;)

No respondí y guarde mis cosas rápido y fui al baño rápido para revisar que todo estuviera en orden, Andrea no paraba de decir que estaba todo bien pero aún así, nada esta bien después de un día de escuela.

Al salir lo busque con la mirada pero no lo encontré, así que decidí esperar aunque no mucho después alguien tapó mis ojos e inmediatamente supe quién era, cuando me los soltó y me di la vuelta lo encontré sonriendo con un pequeño girasol fresco en la mano.

-¿Lista?. -Dijo mientras me la entregaba.

-¿Para mi?. -Pregunte sorprendida.

-Ah no, en realidad es para mi chica que está allá dentro. -Dijo señalando con su pulgar hacia el campus. -Si Mariand es para ti. ¿Para quién más? -Dijo sonriendo de lado.

-Oh, gracias. -Y de un impulso lo abrace, al darme cuenta de ello espere que no pensara mal y mi corazón palpito rápido cuando puso sus brazos al rededor de mi y apretó un poco. Su aroma era delicioso, y el era cálido y fuerte de algún modo me sentí segura dentro de sus brazos.

-De haber sabido que las flores te ponen así, te hubiera comprado una hace mucho tiempo. -Susurro cuando puso su barbilla en mi cabeza.

Al notar que la gente nos miraba, me separe de el y le pregunte. -¿Nos vamos?.

-Lo que usted pida. -Tomo mi mano y salimos de ahí, estuvimos caminando por lo que parecían unos 15 minutos.

-Pensé que esto era al final.

-Decidí cambiar unas cosas, créeme valdrá la pena.

Seguí el camino que me guiaba con su mano y su paso, y llegamos a un parque muy hermoso con mucha variedad de flores, había varias fuentes y una que otra familia con niños pequeños jugando. A lo lejos pude ver un gran árbol y en la parte inferior de este había una canastilla sobre una manta suficientemente grande como para los dos.

-Gracias. -Grito Travis alzando la mano una de las familias que estaba por ahí. -Tuve que pedirle que lo cuidaran mientras iba por ti.

-Trav.. esto es precioso, no debiste. -Dije sonrojandome y sonriendo como estúpida, no podía creerlo... Así que esto fue lo que salió a hacer.

-Claro que debí, es como nuestra primera cita. -Dijo guiñandome un ojo y ayudándome a sentar en la manta sobre el pasto.

De la canastilla saco sándwiches, uvas, unas manzanas y dos pequeñas botellas de jugo. El día parecía estar de nuestro lado, el sol estaba en su punto pero no era sofocante y el viento refrescaba lo que es sol calentaba, y debajo de la sombra del árbol, viendo a esas familias divertirse y viéndolo a el sacando todo de la canastilla, todo era perfecto.

Me pasó un sándwich y como si leyera mis pensamientos dijo: -Lindo día ¿No?.

-Estupendo, gracias.

-Espero te gusten, los hice yo mismo o algo así. -Dijo muriendo el suyo.

-¿Algo así?. -Fruncí un poco el ceño y reí.

-Bueno, mi mama ayudo un poco.

-Cuéntame sobre tu familia.

-Bueno, no hay mucho que contar, mi papa y mi mama llevan casados toda mi vida, papa tiene su propio hospital y casi nunca esta, y mi mama trabaja en casa, es diseñadora de interiores y organizadora de eventos, ella me ayudo a planear esto ¿sabes? -Río- me gusta su matrimonio y a pesar de que casi no veo a mi papa me llevo muy bien con los dos, ¿qué más? No tengo hermanos, pero tengo un perro que cuenta como uno. Y creo que eso es todo. ¿Qué hay sobre la tuya?.

-Emmm esta mi mama, que trabaja en una editorial, y luego esta mi papa que tiene una compañía publicitaria y pasa por mamá después del trabajo, tampoco tengo hermanos, y supongo que mis papas llevan enamorados toda una vida y casados otra más. A veces pasamos los fines de semana en casa de mi abuela con mi familia claro si es que no tiene que trabajar.

-Suena bien, ya sabes todo eso de los de los fines de semana en familia, nosotros no acostumbramos mucho eso. Sólo para cumpleaños y cosas así.

Me gustaba oírlo hablar, lo decía de una forma natural y sonreía, no se porque la primera vez que lo vi tenía una mirada triste. Decidí preguntárselo.

-¿Puedo hacerte una pregunta?.

-Las que quieras, si tu respondes las mías.

Sonreí -Trato justo.

Me calle por un momento pensando como decirlo sin sonar muy entrometida... ¿Recuerdas la primera vez que eh... Tu y yo... Nos vimos, o bueno chocamos en el pasillo?. -Por fin lo dije.

-Ah claro, aquella vez que saliste del salón continuo con aquel libro en la mano y te sonrojaste de una manera tan tierna. ¿Qué tiene?. -Respondió mordiendo su manzana.

Hijo de puta, pensé. Y me sonroje al saber que si había notado mi rubor aquel día. Me sentí nerviosa como aquel día pero aún así tome valor y pregunte.

-No te veías muy contentó, ¿porque?.

Sin pensarlo contesto. -Porque no lo estaba Mariand -suspiro- Eres lo mejor que me ha pasado desde que llegue aquí, la escuela es buena si, pero no me gustaba el ambiente, era igual a la escuela anterior, hasta que apareciste tu.

Me dejo sin aliento, entre todas las respuestas jamás esperaría esa. Hasta qué apareciste tu rondaba en mi mente, y yo que pensé que tenía problemas o algo así. Sin aliento y sin palabras, así estaba. Creo que lo noto porque cambió el tema y se lo agradezco tanto.

-¿Quieres uvas?. -Dijo pasándome el plato de estas.

Seguimos comiendo y platicando note que en realidad teníamos más en común de lo que pensé o pensábamos ya que a los dos nos sorprendió que nos gustara casi lo mismo, aunque nos recomendamos algunos grupos musicales e incluso libros.

Aprendí mucho de el esta tarde, como por ejemplo que le gusta la fotografía, que ama a su perro, que adora pasar tiempo con su sobrinita, que le gusta ver películas y estar sólo en ocasiones. Muchas cosas en las que pienso igual a el.
Me ayudo con una tarea y entre los dos hicimos la suya. Fue una tarde agradable, el sol bajaba y pude notar que sus ojos con esta nueva luz parecían grises.

Compartíamos un silencio que para mi sorpresa no era incómodo, y el lo rompió diciendo: -Estar así aquí contigo me hizo recordar cuando hablamos por primera vez, cuando llorabas por el libro y hablamos durante un tiempo.

Recordar el momento cuando ridículamente lloraba y el me hablo me hizo sonreír: -Es casi igual... Sólo que no estoy llorando y ahora si te conozco. -Reí.

-Es mejor cuando estas así, sonriendo. Y sabes que no quiero arruinarla pero, me has tenido con esta duda y creo que tu lo sabes muy bien, ¿Quién es Jona? Si, lo se... Fue tu novio, pero ¿que te hizo?.

La primera vez que te vi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora