No es casual

Capitulo 50

El mazda llegó a la entrada de la casa de Lupita y se estacionó, Juls se bajó y se despidió con un beso apasionado de la rubia - deséame suerte - suerte amor, acá te espero- gracias

- Hola ma - saludó Juliana a Lupita con un beso en la mejilla- hola July sigue, quieres algo de tomar? - no así estoy bien gracias - siéntate - pidió Lupita - sabes por qué te hice venir cierto? - pues... lo intuyo - Juliana Valdés por favor dime que lo que me dijo Javier no es verdad, que tu no te volviste gay - mamá yo... me enamoré de Valentina, nunca lo busqué pero pasó, ninguna de las dos lo buscamos - pero Juliana por favor, estuviste casada con un hombre cinco años, como de un día para otro dices que te enamoraste de una mujer, qué va a pensar la gente, tus clientes - ya no me importa lo que diga la gente, nunca antes había sentido esto por nadie y no voy a renunciar a Val por nada - Juliana estás enceguecida, no entiendo qué te hizo esa mujer - ella no me hizo nada, lo único que ha hecho es amarme - cállate, no digas esas cosas, Juliana reacciona, eso que dices sentir por ella no es natural, hija por favor abre tus ojos, vas a arruinar tu vida, tu reputación, esas cosas no las acepta la gente aunque digan que si, te van a discriminar- sabes que cuando empecé a sentir esto pensé lo mismo, en mi reputación, en la imagen del bufete, en lo que digan los demás, pero ya no más, esta es mi vida y no voy a abandonar este sentimiento, es lo más bonito que he sentido en mi vida - no Juliana- Lupita se levantó dando un puño en la mesa - te prohíbo que vuelvas a ver a Valentina- mamá ya estoy bastante grande para que me digas a quien ver y a quien no, perdóname pero ya no soy una niña - esto es insólito, jamás pensé que este tipo de... cosas llegaran a mi familia, si tu papá estuviera vivo se querría morir - mamá por favor mírame, estoy feliz como nunca lo he estado, eso no es suficiente para ti, para que me aceptes como soy, para que aceptes que Valentina es parte de mi vida - Jamás Juliana, jamás aceptaré a esa... mujer en mi familia, primero prefiero olvidarme que tengo una hija - mamá por favor!! - si Juliana, así que toma una decisión, o ella o yo, tú decides - no me hagas esto por favor - esto te lo estás haciendo tu misma, así que toma una decisión o ella o tu madre que ha estado contigo apoyándote toda tu vida - Juliana no pudo más, no podía creer lo que su mamá le estaba pidiendo, sus lágrimas corrían por sus mejillas rápidamente, la morena cerró los ojos - toma una decisión ahora mismo y aquí Juliana - no entiendo por qué reaccionas de esa manera - toma una decisión o ella o yo- me estás obligando a partir en dos mi corazón, pero si esa es tu posición, lo siento, pero con el dolor de mi alma la elijo a ella - ok, así son los hijos, por favor vete de mi casa - fue lo último que dijo Lupita antes de entrar a su recámara y cerrar la puerta- Juliana se sentó en la silla y siguió llorando desconsoladamente, tardó unos minutos cuando escuchó la voz de Lupita - Juliana por favor vete - la pelinegra se levantó y salió de la casa, al cerrar la puerta apoyó su espalda en la puerta y se dejó caer en el piso, no podía dejar de llorar, sentía un dolor muy profundo, tan pronto Valentina la vió se bajó corriendo del coche y se inclinó al lado de ella - Juls qué pasó, por qué estás así? - al sentir su voz sólo la abrazó fuertemente y continuó llorando - amor por favor trata de calmarte y dime qué pasó? - como pudo Valentina la levantó y la llevó hasta el carro - Juls dime qué pasó? - la pelinegra no podía hablar, el llanto no la dejaba, solo pudo pronunciar tres palabras - sácame de aquí- tan pronto Val la escuchó arrancó de inmediato, tomó la mano de Juliana y no la soltó, durante el camino no pronunciaron una sola palabra, Juliana continuaba llorando sin parar, al llegar al edificio dejaron el carro en el estacionamiento y subieron al departamento, al entrar Valentina abrazó muy fuertemente a Juliana, quedándose en esa posición unos largos minutos - no logro imaginar lo que pasó, verte así me parte el corazón, solo quiero que trates de calmarte y cuando estés lista hablamos - dijo la rubia - Juliana seguía con su cabeza metida en el cuello de Val, no la quería soltar, al paso de los minutos se iba calmando poco a poco, su respiración ya no estaba tan agitada, por un momento se separó de la rubia y la miró a los ojos - voy a ir un momento al baño y ya vuelvo - dijo Juliana aún en lágrimas - quieres que te prepare un te? - por favor gracias