Seis

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El pequeño a-Yu tenía solo nueve meses. Ahora, SiZhui y JingYi viven juntos y finalmente, JingYi y SiZhui saldrían a su primera casi oficial cita solos, sin bebé, porque tanto Wei Ying como WangJi lo cuidarían.

El timbre de la puerta sonó. El corazón de SiZhui comenzó a latir acelerado. Parecía un quinceañero en su primera cita.

—Ya voy —gritó. Dejando a JingYi que ponía a a-Yu en su cochecito.

—De acuerdo. Pongo a este hermoso bebé aquí y ya estamos listos.

SiZhui abrió la puerta y dejó pasar a sus padres, guiándolos hasta el salón, en donde estaba A-Yu, solo en su coche. Supuso que JingYi subió a cambiarse.

—Hola, bebé —lo saludó levantándolo Wei Ying.

—Dile hola al abuelo más libertino que conocerás nunca. —Dijo SiZhui, moviendo la manita de a-Yu

—Ahbaaaa. —Balbuceó el pequeño.

—Lan Zhan ¿No es un niño genial?

—Sin duda —contestó Lan Zhan , alargando los brazos para tomarlo—. Ven aquí.

—Bevooo —dijo a-Yu.

Conversaron durante media hora hasta SiZhui escuchó pasos desde el vestíbulo y se giró, quedándose atónito. JingYi vestía una camisa y unos pantalones muy ajustados que jamás le había visto. Tenía el cabello peinado y ondeado en las puntas con gel. En conjunto, todo resaltaba su figura esbelta. SiZhui deseó poder revolver aquel cabello y poner sus manos donde lo pantalones dejaban ver lo redondo de su trasero. Sin querer profirió un gemido.

—Te dije que era mejor cuidarlo en casa —escuchó a Wei Ying murmurarle a WangJi y se sonrojó—. Será mejor que se vayan porqupore mucho que quiero que se diviertan no quiero ver a mi hijo teniendo sexo en frente de mi y de a-Yu

—¡Papá! —SiZhui enrojeció y JingYi también.

—Wei Ying —Susurró lan zhan con las orejas rojas.

SiZhui amaba a JingYi, le gustaba le relación que tenían, pero también deseaba desesperadamente su cuerpo. Deseaba sus caricias excitantes y dulces, sus besos arrebatadores, pero un bebé a veces no dejaba tiempo para esa faceta de su relación.

—¿Qué? —se defendió Wei Ying.

—Bien. Tiene razón en que deberíamos irnos —interrumpió JingYi—. Estoy listo, asi que...—Parecía nervioso. SiZhui lo estaba también, y si bien lo empujó hacia la puerta, se detuvo para ver a sus padres y pasarles un papel que casi olvidaba llevaba con él.

—Acá está el teléfono del restaurante y aquí tienes una lista de las cosas que le gustan a a-Yu —añadió SiZhui antes de seguir su camino a la puerta pero donde se detuvo otra vez para agregar—: Hemos dejado un biberón preparado en la nevera.

JingYi puso los ojos en blanco.

—Esa debería ser mi línea. Vamos, vamos.

JingYi sí estaba nervioso. Y sí, también había detenido sus pasos para decir lo mismo que SiZhui. Iba a ser la primera noche en que su bebé tomara biberón. Era para comenzar a cambiar su alimentación y así poder salir a trabajar. De hecho, esa mañana, ambos habían peleado con la máquina que le sacaba leche del pecho. Pero también quería salir ya, porque de no hacerlo, sentía que jamás tendrían esa cita esperada por ambos. En realidad, quería besar ya mismo a SiZhui.

Veinte minutos más tarde estaban finalmente en el resto, el lugar tenía un piano que...

Mentira.

Jamás llegaron allí. Terminaron en un lugar apartado, perdidos en el camino, uniéndose por primera vez en cuerpo.

Diez minutos después sí estuvieron en el restaurante.

Fue la primera de muchas citas más aunque a veces iban con su pequeño. Un año después, JingYi y SiZhui lucían anillos. Se encontraron por accidente, y terminaron casados con un hijo. El viaje de SiZhui fue la mejor decisión que pudo tomar.

Fin


Nota: Perdón por este final, me quedó más corto de lo que realmente pretendía, pero no quedaba mucho por hacer *se tapa ka cara*

Finalmente estoy de vacaciones asi que veré que ideas me surgen. 

Amo el ZhuiYi pero sólo se me vienen ideas modernas jajaj

Gracias totales por leer. 

Love you

Encuentro accidentado [ZhuiYi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora