Hypnosis microphone es un proyecto musical en el cual se desarrolla una interesante historia; las mujeres dominan el mundo pomoviendo la ley "H", edarricando las armas de fuego reemplazandolas por microfonos con el poder de hipnotizar al oponente de...
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Todo estaba listo, no había vuelta atrás. Había echo muchísimos cálculos para confirmar mi teoría, y definitivamente yo estaba en lo correcto; los viajes en el tiempo eran posibles.
Me tomo muchos años terminar mis estudios en mecánica cuántica para poder lograr mis sueños, ser la primera persona en descubrir que este universo es un "universo autogenerado" el cual es la aceptación acerca de que la naturaleza del universo se autogenera, en este caso habrían varios, como si fueran ramas de un árbol que se estaría creando continuamente. Por esta teoría descubrí que los viajes en el tiempo son posibles, una cantidad de universos que son igual en su infinitud podrían llegar a interseptarse con un poco de ciencia, lo cual es lo que yo hice.
Mi hermano líder de la Yakuza me prometió que todo iba a salir bien, aunque éste tiene conocimiento nulo a cerca de este tipo de cosas. Él me ayudo a financiar mi proyecto, ya que ninguna compañía creía en mi teoría.
- Estarás bien, nada malo te podría ocurrir, eres la persona más inteligente que conozco, idiota.- el de cabellos plateados había percibido mis nervios, algo me decía que iba a salir mal así que este trato de animarme.- Te estaremos esperando, y si quieres vamos por unos tragos cuando vuelvas.-
- No gracias, ya sabes que no consumo ese tipo de bebidas...- mire el suelo, recordando todo el tiempo que dedique para esto, para verlo a él.
Me saque las gafas de laboratorio y fui hacia una de las maquinas que tenia la función de dejarme en la época deseada, para así poner la fecha, hora, longitud y latitud. Me posicione en la plataforma para poder viajar a través del oyó negro que separa las distintas realidades, cuidadosamente me coloque un collar, muñequeras y tobilleras especiales para que mi cuerpo pudiese viajar sin complicaciones.
- Listo, ya puedes bajar la palanca.- le dije al de ojos rojos.
- Tengo fé en ti, no me defraudes...- y eso fue lo último que escuché.
Mi mente vio colores inimaginables, sentí sensaciones que no podría expresar con palabras, mi cuerpo se deformaba, todo era muy extraño, pero por fin llegué a ese día de verano donde mi vida cambió.
El cielo se veía en tonos cálidos con un naranja dominante en la gama de colores, los árboles cobraban vida con sus tonos brillantes, los pájaros revoloteaban hacia el norte en busca de protección de la noche. Todo era tal cual lo recordaba. Y ahí estaba, jugando con la pelota junto a sus amigos, y ahí estaba yo, esperándolo con una bebida fría y una pequeña caja que contenía mis sentimientos más puros dentro. Teníamos 17 años, ese día fue la razón por la cual decidí viajar en el tiempo, lo iba a ver por última vez.
Yo me encontraba viendo la escena, mi cuerpo, a la percepción de los demás de esa época, era invisible, asi que podría ver todo sin ningún problema.
Eramos amigos desde pequeños, nos conocimos en la escuela. Desde siempre sentí algo por él, me era inevitable con su hermoso cabello negro y sus ojos, uno amarillo y otro verde, era realmente hermoso a mis ojos, siempre lo fue.
En ese instante, Jiro metió un gol, el cual festejo llendo hacia mi para abrazarme, lo cual acepte sin reproche.
- ¡Eso estuvo genial!- grite emocionada.
- ¡Lo se, soy genial! ¿No lo crees?- dijo con un leve sonrojo en sus mejillas.
- Claro que si...- dije, también con un sonrojo.
- ¡Jiro, terminamos por hoy!- grito uno de los chicos con los que estaba jugando.
- ¡Genial!- respondió haciendo una seña con la cabeza, para luego mirarme a los ojos.- ¿Quieres ir por algo de tomar? Estoy algo cansado.-
- De echo,- rápidamente saque la bebida que tenía y se la entrege.- la tenía especialmente para ti.-
- No, yo... pensaba en... ya sabes, ir a alguna cafetería y pasar el rato juntos...- dijo desviando la mirada con las mejillas rojas.
- ¡Claro, vamos!- respondí rápidamente para tomarlo de la mano y comenzar a caminar, el se sonrojo más de lo que estaba.
Ahora, después de casi 20 años, me doy cuenta que esta escena parece sacada de una película para adolescentes. Rápidamente nos segui camino a una cafetería la cual solía frecuentar con el, pedimos lo que siempre pedíamos y nos sentamos donde era costumbre. Estoy por llorar.
Luego de salir de dicho lugar, comenzó la pesadilla.
- Jiro... hay algo que quiero darte.- de mi mochila saque la caja con chocolates y una pequeña noticia que decía "me gustas" y se la entrege con algo de vergüenza.
- ¿Que... es esto?- pregunto confundido.
- Solo...- recuerdo haberme puesto tan nerviosa en ese instante que salí corriendo sin mirar hacia donde iba.
- ¡_____!- se escucho.
Había corrido hacia la calle, y sin darme cuenta que venía un auto, estaba a punto de que la muerte me llegara, de no haber sido por Jiro. El me empujo a último segundo y él terminó siendo atropellado.
Pequeñas lágrimas salían de mis ojos mientras veía a mi otro yo llorando desconsoladamente al lado del cuerpo del heterocromatico, mientras la gente que pasaba se hacercaba y armaba una muchedumbre alrededor nuestro.
Ese día murió el único chico que me gustó, luego de ese suceso traumatico, dedique mi vida al estudio.
Ya era tiempo de volver, respire ondo y programe las muñequeras para atravesar nuevamente el agujero negro.
Lo que no sabía mi hermano es que el cuerpo humano no soporta la presión de la fuerza de un agujero negro, fue una suerte que la primera vez haya funcionado, pero sé efectivamente que la segunda no iba a resultar como él lo esperaba.
Estaba muriendo, pero había valido la pena con tal de verlo otra vez.
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Primer dia de la Week!!
Espero que les haya gustado, en mi caso no me terminó de convencer, además siento que me quedo corto, pero con tal de que les haya gustado, yo estoy feliz.
