Make a wish upon a star. Liam Payne (Pausada por el momento)

Capitulo 4

Una enorme sonrisa inundo mi rostro, era de las cosas más tiernas que podía hacer, realmente no creí que lo hiciera.

-Bueno... iba a pedir que nos conociera a ambas, pero encuentro más justo que te conozca a ti... además creo que si lo conocieras me lo presentarías, ¿no? ... Y... ¿qué pediste tu?.

-Que conozcamos a Liam .- Reí confidencialmente. Guardando mi otro deseo, que ella fuese feliz, como un secreto.- Bueno... Es tarde, creo que deberíamos volver.

-Está bien.

Ambas emprendimos el camino de viaje, casi podría decirse completamente renovadas, casi nuevas.   Llegamos a la casa y rápidamente hicimos algo de comida para cuando llegara Darell y Neil. Habíamos hecho un pequeño pacto, todo lo que pasara allá, allí se quedaba, no le diríamos a nadie más, necesitaba que ella no le dijera a nadie, ni siquiera a Darell. Me acosté en la cama luego de que Hayley se hubiera quedado dormida, estaba realmente cansada. Cerré los ojos y me dispuse a que el sueño me consumiera debido al cansancio. Hoy no habría sido un mal día, hoy no sufrimos daño, hoy pedimos deseos, y hoy le enseñe a Hayley un poco de esperanza... Quizás lo último fuese un gran problema... La esperanza... Aquel único mal que quedo guardado en la caja de Pandora, asechando a la humanidad, sabia que era algo malo, y que quizás era de las peores cosas que podía haberle enseñado, ella podría vivir refugiada en la esperanza, como un niño rezando de rodillas frente al altar, sin hacer nada y solo teniendo fe. Podría destruir su propio mundo si algo salía mal, podía destruir eso y mucho mas. Pero también podida darle magia a su vida y algo de felicidad. Dependiera de como ella lo tomara mientras crecía...

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - 

Aun no sabía si lo sufriría, pero ella se iba por un mes... Darell me  la arrebata por un mes, sabiendo que la quería pero no valorándolo ni tomándolo en cuenta. A veces pensaba que lo único que el quería era desquitarse con ella porque era casi lo único que le quedaba de sus padres que tanto lo quisieron, Hayley, y el mismo. Tenía miedo de lo que le pudiese pasar apenas estuviera fuero de mi alcancé, lejos de mi para no protegerla. Aquí mucho no podía hacer. Y fui totalmente egoísta al volver a aquella playa cada vez, cada día que ella no estaba conmigo, aun lo soy, peor aquel era el único lugar donde me podía sentir, tranquila, calmada, y esperanzada sin ella,  bien... Aunque fuera solo un poco o por un momento. Las lágrimas comenzaron a bajar por mis mejillas paulatinamente a pensar en ella. Ahora era prioridad saber cómo se encontraba donde, o por qué... pero no podía, escapaba a mis manos. ¿Que mas podía hacer? Solo esperarla, esperar a que estuviera a salvo.... Esperar a que Darell hubiera tenido algo de piedad tan solo por el hecho de que era una niña de cinco años. Ya ni siquiera pasaba una semana de la "excursión"  de Hayley y Darell. ¿Para que quería llevársela consigo?, ¿Aun la amaba aunque fuese en un oscuro y escondido lugar de su corazón, aunque fuera tan solo un pocito?... ¿En que estaba pensando, por que abría de quererla si toda su vida demostró lo contrario?. Deje mis pensamientos de Hayley en otro lado tratando de no seguir botando lágrimas trágicamente. Sin embargo me enfoque en otro lugar aun peor Darell. Yo lo conocí desde que era pequeña, el y mi hermano habían sido buenos amigos desde pequeños, muchas veces yo también jugaba con ellos, es más  me encantaba, como era la más pequeña tenia mas privilegios y siempre me trataban con cuidado, sobre todo Darell, el siempre me cuidaba y ayudaba... recuerdo haber estado enamorada de el... Darell siempre había sido, bueno, honesto y servicial conmigo, todo un caballero... ¿En que se había convertido?.

El tiempo pasaba volando al pensar mientras lloras y piensas las cosas que en el olvido van degradándose... La noche volvía a caer sobre mis hombros, tal como millones de  veces atrás. Salí de mi escondite y camine por la playa viendo el cielo que reposaba sobre las olas  del mar, serenas a altas horas de la noche. El arena se sentía a través de mis pies descalzos mientras caminaba a través d e la costa,  con los brazos cruzados, tratando inútilmente de cubrirme de la helada brisa. Veía el cielo, y las estrellas que estaban en este, esperando tener la oportunidad de pedir otro deseo. Aun tenia la frágil esperanza de que aquellos deseos fueran correspondidos por el destino y se hicieran realidad, inútilmente.

El pañuelo que reposaba en mi cuello, con el viento comenzó a levantarse, obstaculizando mi vista, estaba tratando de bajarlo mientras caminaba, en eso rápidamente llegue al suelo, sin saber por qué, rápidamente me quite el pañuelo, y busque alguna explicación lógica a aquella repentina caída. Levante mi mirada de las pisadas que dejaba en la arena húmeda, y vi en cuerpo estar frente a mi, seguramente habíamos chocado.