Mi Señor.....Mi Amo [Chisaki Kai / Overhaul ]

《 16 》

"¿Vacaciones?"

-Cada pétalo de un flor tiene una esencia propia, solo nosotros debemos de encontrar cual es la nuestra-

Una joven mujer de cabellos negros ondulados estaba saliendo de su habitación dejando a su pequeño hijo dormido en su cuna, cerro con cuidado la puerta para disponerse a bajar las escaleras, Un hombre de cabellos castaños caminaba por la plata baja de la casa siendo seguido por uno de sus subordinados.

-《Ese no es... 》—la morena sonrió al ver a su esposo se acerco a este quedando de frente— Buen día Mi señor —le saludo haciendo una breve reverencia —

-Buen día —devolvió el saludo deteniendo su andar— ¿Dormiste bien? —pregunto, mientras quitaba su máscara de la peste, para inclinarse y darle un beso en la frente a su esposa—

-S-si, gracias por preguntar—respondió, llevando una de sus manos a su frente un sus mejillas sonrojadas con una torpe sonrisa en sus labios—

-¿El niño está durmiendo? —hizo la pregunto al ver que no está el pequeño con su esposa—

-Si, al fin cayo rendido de sueño —contesto esta—

Un hombre se acerco a estos aun quedando atrás de Kai, dicha persona cargaba en su hombro un saco del tamaño de una persona el cual salían gotas de gran de la tela.

-¿Jefe que hago con esto? —interrumpió la pequeña conversación que tenían los cónyuges —

Chisaki se volteo para verlo con una mirada frívola, y colocar en su lugar su marcara.

-Llévalo al sótano —ordeno, el hombre asintió con la cabeza e hizo una pequeña reverencia al pasar justo al lado de la morena la cual quedo helada al ver el líquido rojizo que salía del costal—

- Nugh.... —puso una mano sobre sus labios sintiéndose un poco mareada —

Kai volteo su rostro para ver el estado de su mujer, abrió sus ojos de par en par al ver que esta se estaba cubriendo la boca y sosteniéndose con la pared con una de sus manos un poco encorvada.

-T/N —la llamo, mientras la sujetaba, pasando el brazo de esta sobre sus hombros y tomarla de la cintura con su mano libre— Vamos te llevare a tu habitación 

Esta solo asintió con su cabeza, siguiendo el paso de su esposo, subieron lentamente las escaleras hasta llegar a la habitación, abriendo la puerta, entraron ambos, Kai recostó cuidadosamente a la morena en la cama.