3 Shizun's [RanWan/WangXian/BingQiu]

Capítulo 2: Mi maestro Wei Ying, es ruidoso...

Wei Wuxian se despertó todavía con sueño, prefirió estar en el mundo de los sueños, miró lentamente hacia un lado, notó que el resplandor del sol invadía lentamente las cortinas de la ventana de su apartamento, se quitó la manta negra que le cubría las piernas y la arrojó a la esquina de la cama, resoplando por tener que despertar a esa hora, pero no menos emocionado, pues le encantaba enseñar a sus hijos, así pensaba en sus alumnos.

Se levantó tranquilo hasta que recordó que hoy sería su segundo día de clase, rápidamente vio la hora, eran como 40 minutos hasta las 7 am, y hoy su clase sería muy temprano. Se apresuró a prepararse lo más rápido que pudo, y pronto estuvo listo. Terminando de conseguir todo lo que necesitaba para la clase de hoy, tiró todo en su bolso de todos modos. Y sonrió, satisfecho de que casi había terminado.

Agradeció al cielo que sus próximas clases durante la semana no fueran tan temprano.

Porque odiaba levantarse temprano.

Cuando aún le quedaban unos minutos de tiempo, se fue a la cocina a comer algo de fruta, ya que llegaba tarde. Luego comería algo mejor para el resto del día, en sus planes pretendía ir a un restaurante en el centro de la ciudad, escuchó que acababan de abrir, y él como buena persona probaría las delicias que allí se vendían.

Apenas estaba esperando para disfrutar de un delicioso plato picante.

Cuando finalmente se preparó, dejó su cómodo apartamento y se dirigió a la escuela...
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Estaba casi enfrente de la escuela, acababa de llegar y por suerte no llegó tan tarde. Feliz, caminó con más calma hacia la puerta de entrada.

"¡Buenos días!", Al entrar, saludó al portero quien le correspondió.

Notó que varios estudiantes aún no estaban en el aula. Era su oportunidad de poner su pose de maestro serio y responsable, o intentarlo.

Rápidamente se fue al aula, si llegaba antes que los alumnos podía pasar una imagen de un maestro puntual, y no uno que, a principios de año, llega tarde, aunque sea poco.

"¡Dios mío! ¡Casi llego tarde!" Prácticamente gritó mirando la hora, y luego suspiró, aliviado de llegar a tiempo, y se ató el cabello en una cola de caballo, con algunos mechones sueltos en la parte delantera.

Dejó su bolso sobre la mesa, sin mirar dentro del lugar, notando el silencio, porque está tan agitado por llegar pronto, pensó que no había absolutamente nadie, no se dio cuenta que aún con el silencio había una persona que estaba observando a este maestro tan ruidoso con una mirada curiosa pero discreta.

Solo se notó el joven que estaba allí, cuando dejó caer sus papeles en medio de su carrera, algunos se fueron a parar justo al lado del estudiante silencioso que estaba en la primera silla, inclinándose a toda prisa y recogiendo todos esos que estaban cerca de él. Y en el momento en que se levantó y los colocó sobre la mesa, se volvió y vio una mano grande sosteniendo sus notas y entregándole los otros papeles.