En Nuestro Muelle De Loto ^Historias Cortas^

2. Visita a Yungmen

Aunque no te lo parezca mi tranquilidad es más endeble de lo que parece, y es que detrás de esta apariencia de muro impenetrable se esconde un corazón de cristal que teme enfrentarse al martillo de tu ausencia.

/Desconocido.

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Este joven y atractivo caballero observaba el hermoso paisaje que les ofrecía tanto a él como a su hermano mayor el viajar en canoa por el lago que los conducía al nuevo lugar que sería su hogar durante un largo tiempo: el Clan Yungmen Jiang en Muelle de Loto.

Al inicio, él mismo se mostró reacio a visitar tal lugar, pero las reglas de su casa eran precisas: No debes ser descortés; Valora las amistades; Valora el respeto; Siempre honra el lema de tu hogar... Él no se atrevería a faltar el respeto a sus mayores ni a los ancestros de su clan, mucho menos las sagradas reglas.

Por lo tanto, incluso si deseaba ajelarse de El le resultaría imposible, pues siendo uno de los discípulos principales, no tenía el lujo de despreciar la orden.

Wei Ying WuXian vive en Muelle de Loto, no es algún secreto para nadie... Pero a Lan Zhan, lo vuelve temeroso la idea de sentir esa sensación de abismo cuando mira al joven maestro, la sensación de inquietud, de que en cualquier momento puede hacer algo indebido, tener que soportar la idea de verle romper inumerables códigos de etiqueta es sumamente molesto... Y a pesar de no poder soportar tanto estrés, era la única cosa que había extrañado durante tantos meses, la única otra ausencia que le dolió en el alma como la partida de su madre. Todo ese "estrés" en realidad le hacía... ¿Feliz, alegre, pleno?

Al inicio de la historia, justo cuando conoció a ese muchacho que también vivió un tiempo en su hogar, le desconcertó que le resultaba tan familiar como nadie nunca, más aún cuando el Receso en las nubes era tan ajeno a la personalidad alegre de Wei.

Lan Zhan no estaba acostumbrado a nada de él, mucho menos a su ruido, lo cual solo le hacía más extraño. Su aparente falta de seriedad, de obediencia o cualquier otra etiqueta hizo que el suelo que pisaba no se sintiera tan seguro como antes. Él fue estrictamente educado, por lo cual siempre estuvo agradecido, siempre lo estaría. Y entonces un foráneo, de un clan remoto, entró a su hogar rompiendo tres reglas con cada respiro desde el segundo que llegó a Gusu.

Era molesto, ridículo, terrible. Aún así, cuando Descanso en la nube se sumió en silencio justo después de su partida, y ya nadie se atrevería a romper las reglas... Incluso él, un vacío se sintió desde el primer instante hasta este día de viajes prolongados.

Con la partida de Wei Ying, obtuvo escarmiento para su corazón, que al levantarse a las cinco de la mañana, sintió un ahínco... En la noche, no había a quien esperar en la entrada y regañar por el contrabando, ni risas que le dejaban embelesado mientras fingía que eran aburridas o ridículas; tampoco había más sonrisa del emperador para esconder bajo su cama por si algún día se terminaba, no mas vigilar que copias del libro de etiqueta sean escritas correctamente, ni mucho menos conejos entrando de incógnita a su alcoba... Desde su partida todo se había vuelto triste, la luz del mundo parecía haberse ido a un lugar inalcanzable.

Ridículo

Se llamó a si mismo al verse extrañando cada vez más al muchacho de sonrisa coqueta. Era absurdo que lo extrañe tanto, pues no era más que problemas por donde vaya. Indomable, incorregible, incoherente y a pesar de tener todo en su contra, incluyendo el odio de los mayores y Shufu, Lan Zhan no pudo evitar que su estúpido corazón traicionero eligiera a ese maestro como la persona que amaría... Se rehusó, lo negó, lo intentó y aún así, no pudo dejar de pensar en él hasta en los momentos más insólitos del día y la noche.