6. Declaración

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Adoro cuando me regalas una sonrisa, porque significa que, al menos por un instante, he conseguido invadir la intimidad de tus pensamientos impávidos.
Quiero compartir contigo todas las primaveras que me quedan, crecer como el musgo en las ruinas, para no irme nunca de tu vida.

/Desconocido.

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Lan WangJi estaba volviéndose loco en el momento que sintió los roces de Wei Ying sobre su pecho, por lo cual mantenía el ceño fruncido, evitando verlo mientras sus orejas se tornaban cada vez más y más rojas con las palabras y acciones ajenas.

Se limitaba a evitar la mirada del contrario, pues claramente nada de lo que hacía era serio, ¿Por qué lo había dejado entrar? A fin de cuentas, siempre coquetea y no tiene intenciones claras detrás de cada sonrisa cínica.

Poco a poco, el ceño del Lan se hizo más notable, hasta que sus orejas estaban al límite del rojo, giró a ver al joven Wei mientras susurraba con una voz muy molesta un Wei Ying de mala gana.

Pero poco pudo expresar su molestia pues prontamente sintió una deliciosa caricia sobre sus labios, que al inicio se sintió extraña... Húmeda, suave y totalmente inocente.

Cuando él se dió cuenta que Wei WuXian lo besaba, se congeló por completo, manteniendo sus ojos abiertos y apretando sus manos alrededor de las tunicas de su clan.

Luego, cuando estuvo dispuesto a disfrutar el beso, apenas cerrando los ojos, el contrario se separó, terminando la mejor sensación del mundo.

- Lan Zhan... Yo...

No pudo pensar, únicamente sostuvo al contrario por la cadera, empujando su cuerpo atrás, dejándole caer sobre la mesa mientras le miraba a los ojos con un brillo inexplicable y cuidadosamente peino los negros cabellos ajenos, dejando su rostro buen visible mientras Lan WangJi se acercaba a él.

Su corazón latía fuertemente, ese había Sido su primer beso con la primer persona que él había amado, peor no tuvo tiempo de procesar para disfrutar... Así que un beso más para dejarle un maravilloso sabor de boca no debía ser malo, ¿Cierto?

– Wei Ying...

En un abrazo cariñoso, lleno de afecto mientras se colocó sobre el cuerpo ajeno, solicita permiso para besar al contrario.

Normalmente no expresaría tanto pero incluso si Wei estaba jugando, ¿Por qué lo besaría? Por más cínico que puedas ser, no puedes ir por el mundo besando a las personas sin intenciones sinceras, así que debía descubrir cuáles son las intenciones verdaderas detrás de ese primer beso.

– Wei Ying, ¿Sientes lo mismo que yo?

Su mente y corazón por primera vez en un largo tiempo desean exactamente lo mismo, ser correspondidos por la persona que los mantenía ocupados día y noche

– Wei Ying... ¿Por qué?

Su voz no era aprehensiva ni tampoco era agresiva, sino dulce y afectuosa, como si estuviera susurrando para hacerle dormir, mientras sus rostros estaban tan cerca de un beso que sus respiraciones estaban entrecortadas.

– ¿Por qué?

Sin esperar la respuesta ajena, se mantuvo acercándose mientras veía con devoción los ojos ajenos, hasta que cerró los suyos para darle un beso tan dulce que los hizo sentir que eran capaces de flotar sobre las nubes, que el mundo a su alrededor se hizo rosa con burbujas rodeandoles para que nadie pudiera evitar que Lan WangJi mostrará sus intenciones.

Poco a poco lo besó con una suavidad impresionante, nunca lo hizo un beso pasional, tampoco un deseo carnal... Únicamente le dió un beso que deseaba transmitir los deseos más profundos de su corazón, que eran poder protegerlo, amarlo, desearlo y cuidarlo sobre todas las cosas. Quería mimarlo, mostrarle su amor poco a poco, con cada débil y delicado roce, sin separarse de su cuerpo mientras lo abrazaba fuertemente contra el propio.

Con sus brazos rodeando al contrario, sentía que por fin podía cumplir su deseo de cuidarlo, pues con sus brazos protegería a la persona amada de cualquiera que deseaba dañarlo y al mismo tiempo disfrutaba del calor que el cuerpo ajeno le brindaba.

Su respiración poco a poco se fue acabando, aún cuando tomaba bocanadas de aire para poder respirar y seguir el beso, llegó un momento doloroso dónde tuvo que dar por terminado ese increíble beso, que por primera vez entre muchos sueños, era verdadero.

Wei Ying... yo... deseo que vuelvas a Gusu conmigo.

En Nuestro Muelle De Loto ^Historias Cortas^Donde viven las historias. Descúbrelo ahora