Dividido

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" Amarse a uno mismo es el comienzo de un romance para toda la vida".

~ Oscar Wilde

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Phantom pasó la mano por la columna de Fenton, tratando de calmar los tensos músculos del humano. En cambio, su toque hizo que Fenton se tensara más en sus brazos. Un suave gemido vibró contra el hombro de Phantom, y si Fenton hubiera estado menos aturdido y más consciente, Phantom estaba seguro de que el niño humano se habría horrorizado por el sonido, así como por la posición en la que se encontraban.

Una sonrisa irónica levantó los labios del fantasma. Se movió ligeramente para que sus brazos se ajustaran más cómodamente a la cintura de Fenton, y el humano, todavía jadeando, todavía aturdido, se movió con él, ahora casi moldeado contra el cuerpo de Phantom. Era agradable abrazar a otra persona así. Sin duda, abrazar a Valerie sería incluso mejor, pero por ahora, Phantom estaba contento de permanecer como estaba.

No duraría, por supuesto. Phantom suspiró, la suave exhalación alborotó algunos pelos negros sobre la cabeza de Fenton. Una vez que los pensamientos de Fenton lo atraparon, el niño pasivo en sus brazos se transformaría en una bola furiosa de negación y vergüenza. El hecho de que a Fenton le tomara tanto tiempo recuperarse significaba que la actuación de Phantom en su último beso se ubicaba en algún lugar entre asombroso y abrumador. El pensamiento hizo reír a Phantom.

El fantasma apoyó la mejilla en la cabeza de Fenton, cerró los ojos y una suave sonrisa trazó sus labios. Había sido un buen día, al menos en su opinión. Fenton había hecho que Phantom luchara por cada beso que compartían, pero eso solo sirvió para intrigar aún más a Phantom. El desafío de atraer a Fenton a un beso y luego persuadir a Fenton de que se perdiera en ese beso se sintió como un juego, una competencia.

El humano no compartió su punto de vista, así que, por supuesto, Phantom tuvo que mezclar su enfoque. Fenton pareció preferirlo cuando ayudó al chico a besarlo, pero fue cuando Phantom lo sedujo cuando Fenton dio la mejor reacción. Definitivamente el favorito de Phantom ya que Fenton adoptó el ritmo de toma y daca más fácilmente. Durante sus descansos entre besos, o mejor conocido como ataques de ansiedad de Fenton, Phantom robaba uno o dos besos, lo que hacía que Fenton lanzara un ataque de siseo más grande de lo habitual, pero Phantom lo disfrutó demasiado como para detenerse.

Tarareando para sí mismo, Phantom pasó su mano por la espalda baja de Fenton de nuevo, y esta vez el humano se movió. Sacudió la cabeza del hombro de Phantom lo suficientemente rápido como para causar un latigazo. Un suave juramento pasó por sus labios, ganándose otra risa de Phantom.

"Idioma, Fenton", dijo. Con la facilidad nacida de la práctica prolongada, Phantom dejó caer los brazos alrededor de la cintura de Fenton mientras el chico se alejaba de él. El cuerpo demasiado caliente de Fenton había calentado a Phantom cuando se presionaron juntos, y ahora que se había ido, el núcleo de Phantom comenzó a enfriar el calor dejado atrás. Phantom cruzó los brazos sobre el pecho. Todavía tenía que decidir si prefería el toque ardiente de Fenton o el frío repentino que siguió en su ausencia.

"Está bien, en serio", dijo Fenton, con los brazos extendidos frente a él como si tratara de protegerse del fantasma inmóvil. "Necesitas, como, volver a aprender la regla de límites personales".

"Conozco bien la regla", dijo Phantom, sonriendo. "Pero como somos la misma persona, no hay fronteras entre nosotros. Tu argumento no es válido". Su sonrisa creció e inclinó la cabeza hacia un lado. "Además de eso, fuiste tú quien se echó encima de mí. Tal vez seas tú quien necesite volver a aprender los límites personales".

El suave y el torpe [TRADUCCIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora