Capítulo 1

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Nos había costado. Cuando recién llegamos a Corea, mi tío paterno nos ayudó a Yixing y a mí a instalarnos en un departamento con todo lo necesario para que vivieran dos personas. El alquiler y los gastos eran bastante razonables para dos chicos que aún dependían de sus familias. Con dieciocho años empezamos a aprender para trabajar con mi pariente en su empresa de entretenimiento, tardando tres años en estar listos. O estar listos para el gusto de mi tío al menos. Lay era estilista y coreógrafo, y yo fotógrafo, y a veces ayudaba a Lay con las coreografías, ya que el baile no se me daba mal. Con mi mejor amigo habíamos tomado clases desde muy chicos.

Tres años rondando por la compañía que producía a Kai y no había logrado verlo en persona. Parecía que lo tenían muy bien escondido, porque no es como si no me hubiera escapado para buscarlo, fingiendo estar perdido cuando me encontraban.

Muy pronto, con veintiún años, tendría mi primera sesión de fotos oficial. Y se negaban a decirme a qué famoso iba a tener que fotografiar. "Política de privacidad" decían cuando preguntaba. En mi opinión esas "políticas" eran estupideces. Necesitaba saber quién sería mi modelo para ir adelantando trabajo y planear de qué iba a ir la sesión de fotos. Pero allá ellos. Más trabajo significaba más dinero, y no venía mal un poco de ingresos extras para mantener el departamento que compartía con Yixing.



***



─ KyungSoo... KyungSoo, mira─ dijo Lay, espiando por la mirilla de la puerta de nuestro departamento ─El vecino que se acaba de mudar enfrente... está buenísimo─ agregó sin dejar de espiar levemente encorvado y con la cola en pompa.
─ ¿Cómo puedes darte cuenta de eso mirando por ahí?─ cuestioné con el ceño fruncido, analizando un libro con fotografías de personas. Buscaba ejemplos de hombres y mujeres para inspirarme y desempeñarme impecablemente en mi primer trabajo como fotógrafo.
─ Se nota... algo─ se dio vuelta para mirarme ─Tiene tremenda retaguardia─ alzó ambas cejas en un gesto sugestivo. Ambos estallamos en carcajadas gracias a su comentario ─¿A qué hora pasa a buscarte tu noviecito?─ cuestionó luego de calmarnos un poco.
─ A eso de las nueve─ respondí, secando unas pequeñas lágrimas de risa de mis ojos ─Dile por su nombre─ le pedí.
─ ¿Por qué? ¿No es tu novio?─ alzó una ceja, sentándose en el sillón frente al que yo me encontraba sentado.
─ Sí, pero...
─ Pero no lo amas─ negué con la cabeza.
─ Le tengo... algo de cariño, supongo. Él sabía que no lo amaba cuando finalmente, después de meses insistiendo en que lo aceptara, accedí a tener una cita con él y finalmente a ser su pareja.
─ ¿Por qué sigues con él? Podrías decirle que solo quieres ser su amigo─ sugirió agarrando un vaso de la mesita baja, que era el que yo estaba usando, y bebiendo un largo trago del contenido.
─ No quiero lastimarlo─ confesé. Y era cierto.
─ No me cae bien... siento que oculta algo─ dejó el vaso ─Sólo tú te buscas un novio coreano en China y un novio chino en Corea...─ rio cuando me encogí de hombros para quitarle importancia al asunto ─Me iré a bañar... alguien tiene que darle la bienvenida al vecino─ guiñó un ojo y se dirigió a su habitación meneando levemente las caderas.

Lo imité dirigiéndome a la mía para cambiarme, abriendo mi armario apenas entré. Pegado del lado interior de la puerta de este, se encontraba un pequeño poster de Kai cuando era adolescente. Cuando su música y él se veían más reales. No era que ya no me gustaba, sólo que con el paso del tiempo se había transformado del refrescante y tierno idol a una bestia que derramaba sensualidad con sólo respirar, y su música pasó de la guitarra, el bajo, el teclado y la batería, a una computadora emitiendo robóticos sonidos. Acaricié la sonrisa de la foto. Era lo que más extrañaba: su dulce sonrisa llena de esperanza y alegría que iluminaba todo. Ahora era una mueca, una sonrisa torcida al costado. Muy sensual, sí... pero no era la del Kai del que yo me había enamorado. No tenía ni un atisbo de felicidad y nunca le llegaba a los ojos.


Superficially famous [KaiSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora