Corazón anónimo.

Primera cita

Ya habían pasado dos días des de la última vez que nos vimos y todo tenía una razón, y era que habíamos organizando nuestra primera cita, esa cita que recordaríamos toda la vida y que cuando nuestros hijos tuvieran la curiosidad de saber cómo había sido, la pudiéramos relatar como si hubiera sido ayer.

Quería que fuera inolvidable y no lo pensé compré dos boletos de avión a Italia. Su comida favorita era el spaghetti y la mía la pizza, digo porque no, al menos respecto a la comida todo sería perfecto. Probablemente aniquile todos mis ahorros pero que más da, de todas formas sentía que quería romper la barrera de lo conocido, el mundo era muy grande y no lo conocía. Solo había una cosa que me inquietaba y era que nuestros padres no tenían ni la más mínima idea de todo esto ¿como lo tomarían? No lo sé, pero tenían que saberlo antes del viernes, teníamos dos días para explicarles todo.
—Hola amor —Wow que palabra más profunda y me había salido del alma <<Amor>>pensé—. ¿Tienes alguna idea para decirle a nuestros padres?
—Justo estaba pensando en quedar en algún restaurante y después de comer, lanzarles la bomba ¿qué te parece amor?—dijo con una risita al final que me volvió loco.
—Está echó, así será.
—Pero de esto yo me encargo ¿okey? Dile a tu madre que nos veremos todos juntos hoy a las 7:00 en el restaurante frente a la Cineteca.
—Entendido, muchas gracias por esto, te prometo que nos la pasaremos bien, nunca olvidarás nuestra cita.
—Como voy a olvidarlo, como olvidare que iré con mi chico a Italia, ¿aunque estás seguro? Debió haber costado mucho.
—¿Que dices? Claro que estoy seguro, quiero hacerlo y no sólo, sino contigo.
Terminamos la llamada y me alisté, también mi madre empezó a arreglarse cuando le comenté. Subimos a la camioneta y nos pusimos en marcha.