Amor de Rivales.

Extraña conducta.

Los chicos del Nankatsu practicaban nuevos tiros, fortalecían su defensa con ayuda de Tsubasa, al final de cada partido todos quedaban agotados, menos el pequeño, este tenía una energía de admirar.

En ese momento, Wakabayashi apareció, quería ver al encantador chico, observar sus movimientos y jugadas. Tsubasa, por supuesto, se dió cuenta de la presencia del más alto, extendió su brazo en forma de saludo.

─ ¡Wakabayashi-san!

El contrario le devolvió el saludo guiñándole un ojo, el pequeño retrocedió unos pasos, estaba nervioso, era la primera vez que tenía ese sentimiento.

─ Veo que se esfuerzan mucho. ─ el chico caminó hasta Tsubasa.

─ Sí.. uhm. Ishizaki tiene nuevas técnicas, ¡yo le enseñé! Pero a veces deja que el balón vaya fuera del campo.

─ Siempre estás pegado a Ishizaki. ─ Wakabayashi bufó, no quería que su pequeño, le prestara atención a otros chicos, obviamente, negaba sentir celos.

─ ¿Sucede algo, senpai?

Ese seudónimo paralizó a Wakabayashi, ¿lo había llamado "senpai"? Tienen la misma edad, seguro era porque Tsubasa veía al contrario como alguien de mayor experiencia.

─ Así que, senpai, ¿no? ─ rió bajito palmeando el hombro del más pequeño.

─ ¡Tsubasa, iremos por botellas de agua, no tardamos!

─ ¡Bien, los esperaré, chicos!

Tsubasa apartó la mano de Wakabayashi de su hombro mientras negaba repetidas veces.

─ ¿Te molesta que te llame "senpai"? Si es así, yo..

No pudo terminar de hablar, el portero tomó el mentón de Tsubasa con su mano dejando ver una sonrisa en su rostro, el contrario se sonrojó hasta las orejas.

─ Eres libre de llamarme como quieras, pequeño. ─ dejó una leve caricia en los labios del pelinegro.

El contrario sintió un fuerte cosquilleo en su estómago.

─ ¡Tsubasa, ya volvímos!

El mencionado logró safarse del agarre y corrió hasta Ishizaki, él lo miró con el ceño fruncido y negando, ¿Qué estaría pasando entre esos dos? No quería meterse en problemas, pero desde hace días ambos tenían un comportamiento extraño, miradas, sonrisas, toques y sonrojos "raros."

Salió de sus pensamientos viendo a Tsubasa extenderle la mano, Ishizaki entregó una botella de agua para que pudiera hidratarse.

─ G-gracias, Ishizaki. ─ cuando terminó la bebida, le entregó la botella al contrario. ─ Debo irme a casa, es tarde, mamá puede preocuparse.

─ Yo que había venido a ver su entrenamiento, es una pena. ─ comentó el portero que apareció detrás del más bajo. ─ Bueno, los vea o no, de igual manera el Shutetsu volverá a ganarle al Nankatsu, eso no puede discutirse. ─ rió burlón.

─ ¡¡Wakabayashi!! ─ Ishizaki quería enterrarle un puñetazo al rostro del portero, pero Tsubasa lo detuvo.

En ese momento comenzaron a caer gotas de agua, significaba que pronto llovería y las calles estarían bloqueadas por el líquido.

...

Luego de unos minutos los chicos volvieron a sus respectivos hogares, pero Tsubasa se quedó entrenando, quería hacerse aún más fuerte, obviamente, Wakabayashi lo observaba de lejos, deleitandose con la imagen del pequeño.

─ Es hermoso, me gusta tanto. ─ dijo.

El contrario se acercó al portero.

─ Senpai, es mejor que vayamos a casita, la lluvia es fuerte.

─ Sigues llamándome de esa manera, se supone que somos rivales, Ozora.

Tsubasa rió, en el camino este ya no podía regresar a casa, tardaría mucho y quedaría empapado debido a la fuerte lluvia, además, no tenía más ropa para cambiarse. Wakabayashi le sugirió algo.

─ La lluvia es fuerte, a este paso nunca llegarás a casa. ─ el portero pensó mucho en lo que iba a decir, al final decidió hablar. ─ ¿Quieres quedarte en mi casa? Estaría mucho mejor.

El otro chico dudó unos segundos pero asintió.

20 minutos después.

Llegaron a la mansión en la que vivía Genzo, entraron y Tsubasa dejó sus zapatillas fuera, antes de entrar a la sala de estar, se agachó acomodando su calzado pero no se había dado cuenta de que Wakabayashi estaba detrás suyo, al levantarse este lo tomó por sorpresa, rodeando sus brazos en la cintura del chico y dejando el mentón propio sobre el hombro contrario.

─ ¿Wakabayashi, qué haces?

El mencionado soltó una risita.

─ ¿No puedo abrazarte?

─ S-sí puedes, pero..

─ ¿"Pero"?

─ Pero me abrazas de otra manera, se siente extraño.

─ Tranquilo, no haré nada malo.

En ese momento el celular de Tsubasa sonó, este lo revisó, ¡Dios, había olvidado por completo a su madre! Debía avisarle que se quedaría en casa de Wakabayashi. Contestó y le dijo a su mamá exactamente lo mismo que pensaba.

─ ¡Mamá! Me quedaré en casa de Wakabayashi.

Ella ya sabía a quien se refería, Tsubasa le había hablado de él bastantes veces, también de sus tiros, ataques y atajadas.

La señora Ozora solo le respondió con un "Está bien." Seguido de un "Cuídate mucho, hijo."

Al terminar la llamada, guardó su celular.

─ Era mamá. ─ se separó del contrario.

─ Lo sé. ¿Quieres algo de tomar o comer? Puedo ordenar que preparen una pizza si quieres, que tenga mucho queso y también..

─ No, no... estoy bien, gracias.

─ Bien, quiero preguntarte algo. ─ el portero cruzó los brazos.

─ Dime, Wakabayashi.

─ ¿Ishizaki y tú son pareja?

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    ....    Fin del segundo capítulo.    ....