Frío era lo que podía sentir.
Gimió pero sus palabras no salían de su boca, su vista nublada se empezaba a aclararse.
Un ligero dolor en su cabeza le hizo gruñir.¿Qué demonios había pasado?
Observó su entorno, estaba amarrado, era obvio. Dentro de un agujero de aproximadamente 3 metros. Algo le tiraba tierra. En su boca una mordaza lo tenía mal.
Recordó todo lo sucedido y una rabia le inundó. Intento con fuerza desatarse.
Nada.
No podía agotar sus energías.
Pero....
Era su fin.
Recordó aquellos momentos que disfruto con Sword.
Sus caricias, sus besos, le hacía que todos sus deseos se estabilizaran.
Había hecho un daño, lo sabía llevar más de 10 muertos a la tumba no es nada agradable. Bueno, no le importaba.
Un poco de tierra cayó en su cara. Observó cómo desde lo alto se asomaba su verdugo.
Sword...
Puto insensible.