Only You My Girl (Jinx x Oc Fem)

Costo.

Hoy era un día tranquilo, solo yo, los muñecos aterradores y Powder soldando alguna de sus bombas ignorandome completamente.

Estaba buscando la forma de separarla de la mesa de su taller, ayer en la noche me fui y hoy al volver la encontré exactamente en la misma posición.

Trate de no molestarla, pero esto ya empezaba a ser preocupante.

-Powd-.

-Silencio.- Me calló, hice una mueca de disgusto y me levanté hacia donde estaba ella

Una vez a su lado hice un acto suicida y le arrebaté el soldador de las manos.

-¡Devuelvemelo! ¡Perra!

-¡Woow! Cuida esa boca, ¿Esa es la forma de tratar a tus invitados?

-Te invitaste sola, si no te gusta vete.- Ella verdaderamente estaba molesta.

Ahhhhh ¿Que debo hacer? Ella es tan linda.

Al parecer tengo ansias por morir, porque la levanté de su silla por sobre mis hombros y luego la senté en el sillón.

-¡Oye! ¿Que pasa contigo? ¿Por qué eres tan molesta hoy?

-Estoy triste.- puse mi rostro en sus rodillas, yo estaba agachada a sus pies.- Me has estado ignorando desde ayer, me siento sola.

-Tu eres la que elige seguir viniendo.- Miró hacia otro lado ¿Sonrojada?

Oh no, esto era peligroso.

Una de mis manos fue subiendo por su pierna hasta detenerse en su cintura, me levanté un poco para que mi rostro quedara a su altura.

-¿Sabes? También estoy preocupada, has estado sentada en esa mesa desde anoche, necesitas dormir y comer algo.

Acerque mi rostro a propósito, una pequeña venganza por usarme de almohada humana sin consideración.

Todavía se negaba a ver mi rostro.

-Si no me interrumpieras podría terminar más rápido y ya podría comer y dormir.- Su vista volteo un poco.- ¡Y ya quítate, me estás asfixiando!

Me empujó hacia atrás mientras yo me reía.

Finalmente la dejé volver a trabajar pero antes le dejé en su mesa un sándwich con un jugo, me miró molesta pero al final se lo termino comiendo al cabo de diez minutos.

Estos momentos hacían que valiera la pena cada momento que pase buscándola.

..

-¡Terminé!~.- Sentí un peso encima mío y desperté bruscamente.

Al parecer Powder había terminado con sus bombas y salto directamente a mi regazo.

¿Cuántas horas pasaron? Podía sentir que dormí un siglo.

-¿Qué hora es?- le pregunté a Powder que estaba jugando con una de sus bombas recién terminadas.

-¿Las nueve de la mañana?

-Ah las nueve ¿¡Ya es el otro día!? ¡Powder! ¡Te volviste a quedar toda la noche!

-Ya ya relájate, suficiente tengo con Silco, ¿Ahora también vas a hacer el papel de mamá? Mami.

-¡Powder! Tenés que cuidar más tu salu... ¿Mami?

Ella empezó a reírse.

-Es broma, como si una madre pudiera verle el trasero a su hija, bueno, tendría que ser una muy mala madre, ¿No es cierto?

Me miró divertida, yo me enrojeci.

-Aww, pervertida, como si no me diera cuenta, verdaderamente tus ojos tienen una presencia importante, cada vez que me miran siento un escalofrío.- Todo lo dijo tambaleándose sobre mi de un lado otro.- Tienes que aprender a controlarte linda, aunque debe ser difícil puesto a qué soy un bombón.