Only You My Girl (Jinx x Oc Fem)

Gato blanco

Sentía que volaba en las nubes.

Ahora mismo era la mujer más feliz de Piltóver y Zaun juntos.

Luego de recuperarme de la amorosa patada de Powder, la espere en su taller.

Pero después de pasar horas ahí me di cuenta de que probablemente no volvería hasta el otro día, por lo que decidí volver a casa.

Entre dando saltitos por mi puerta.

-¡Lucifer! ¿Adivina qué? ¡Mami finalmente logró superar la abstinencia!- salté sobre mi gato que estaba durmiendo cómodamente en su cama y lo abracé apretujandolo.

El solo me miró como diciendo "para esto me despiertas, perra".

-¡No me mires así! Es un acontecimiento importante para mí.

Apartó mi rostro con sus patitas y me maullo para que lo volviera a dejar en su cama.

-¡Señorita! Por fin ha vuelto, la estuve esperando todo el día, ¿Dónde estaba?- Mi mayordomo apareció preocupado.

Podía entenderlo puesto a qué está mañana aparecí solo para robar comida y me escabulli mientras el me miraba extrañado.

- ¡André! ¡Hoy conseguí besarla! ¿Puedes creerlo? Voy a atesorar este momento hasta el día en que muera.- Tomé sus manos y empecé a girar con el.

-¡Señorita! Me alegro por usted de verdad, se lo mucho que ha esperado por esto. Sin embargo.-

Me detuve bruscamente.

-¿Sin embargo...? ¿Qué?

-Le recuerdo que usted aceptó un trabajo el día de hoy y si no se apresura no podrá tomar la aeronave y perderá el pedido.- Suspiró al final.

-¡Mierda! Ya mismo me preparo, dame cinco minutos.

Corri hacia mi arsenal, el cual se encontraba muy lejos de la sala principal ¿Quien mierda me mandaba a comprar una puta mansión?

Me puse rápidamente mi traje y luego por encima la ropa que usaría para infiltrarme con ese aristócrata. Por suerte esos vestidos incómodos tenían mucha tela que escondían todas mis armas.

Y entonces pensé por primera vez en mi vida.

Este trabajo lo había aceptado un mes atrás antes de encontrar a Powder y estaba todo programado para la duración de una semana.

¿Cómo haría con Powder? Bueno, con suerte podría matar a ese tipo este mismo día y volver al día siguiente, sí, eso iba a hacer.

..

Fui tan ilusa.

Al final el trabajo si se alargó una semana.

Las relaciones con aristócratas son difíciles de establecer y más si pretendes hacerte su mejor amiga para evitar que sepan que mataste a uno de ellos.

Solo esperaba que Powder no se haya enojado conmigo.

Que esperanza tan tonta.

¡Obvio que estaría enojada!

El mismo día antes de desaparecer por una semana sin aviso habíamos tenido un momento-romantico-caliente.

Si alguien me hiciera eso obvio que estaría molesta.

Ya estaba preparada para tener que comprarle golosinas caras una semana entera con ella haciéndome la ley del hielo.

Bajé de la aeronave y me sorprendió no ver a André por ningún lado, siempre que volvía de una misión en el exterior el venía a ayudarme con mi equipaje.

Me extrañó, pero supuse que era porque lo deje encargado de la florería cuando me fui.

Sin embargo al volver a mi casa me encontré con un pintoresco desastre.

Por fuera la casa se veía normal, las cortinas de la florería estaban cerradas, lo que impedía ver hacia adentro.

Al entrar encontré todas las flores de muestra tiradas por el piso, las paredes pintadas y detrás del mostrador estaba escrita en la pared la palabra mentirosa. Todo en letras mayúsculas.

Creo... Que estaba enojada.

Escuché un golpe detrás del mostrador, fui corriendo y ahí estaba el pobre André atado y amordazado, con la palabra idiota escrita en la frente.

Lo desate de inmediato y le saque la mordaza de la boca.

-¡Señorita! Esa... Chica extraña que le gusta apareció anoche enojada y gritando, trate de explicarle que usted volvería hoy pero no me escuchó e hizo todo este desastre.

-Lo siento André, sabía que ella es algo temperamental y no le avisé que me iba, te ayudaré a limpiar todo esto e iré a hablar con ella. Prometo que esto no se va a volver a repetir.- Me dirigí hacia la puerta que conectaba la tienda con el resto de la casa.

-¡Señorita espere no abra la puerta!- André gritó pero ya era demasiado tarde.

En cuanto abrí la puerta me callo un tarro lleno de pintura que accionó unas bombas que estaban por toda la mansión.

Por suerte solo tenían pintura y brillitos, pero el desastre y estruendo que hicieron no era poca cosa.

Mi gato apareció corriendo hacia mis brazos poco después.

Mi gato.

Mi hermoso gato blanco.

Me pequeño y hermoso gato blanco.

Ganador de innumerables premios de belleza los cuales tenían su propia habitación.

Mi gato conocido por tener el pelaje más blanco y pulcro que orgullosamente cepillaba a diario y lavaba semanalmente.

Era negro.

...

Ahora yo estaba enojada.

Se lo dejé en las manos a André y salí por la puerta de la tienda, ante las miradas expectantes de los vecinos, los cuales salieron a ver qué era todo ese estruendo y que ahora me miraban con curiosidad por saber porque estaba cubierta de pintura.

Unos vigilantes se acercaron a mi.

-Disculpe señorita ¿Se encuentra bien? ¿Que fue esa explosión?

-Hablen con mi mayordomo, con permiso.- los esquivé fui directo a Zaun.

Ahora iba a ver esa pequeña malcriada.

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Hola jeje.

Cómo están cómo andan? Yo la verdad que muy feliz, me divertí haciendo este capítulo, es un poco corto pero al menos pasarán un buen rato, o eso espero.

Más adelante veré si puedo mostrarles como se ve la protagonista y los planos de la mansión.

No soy de las personas a las que les gusta describir mucho, prefiero que se lo imaginen, sin embargo creo que para la casa si deberían tener alguna referencia.

Espero que el capítulo de hoy les haya gustado y nos vemos en el siguiente.
(｡•̀ᴗ-)✧