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Pov.Narrador/ra

Habían pasado varios días desde el encuentro de los norteamericanos, días en los que el mexicano no hizo nada más que deprimirse y encerrarse en su habitación, sólo salía para alimentar a su mascota o para robar algunas golosinas del refrigerador.

Sus hermanos estaban preocupados por él, siempre intentaban sacarle a pasear o siquiera que les acompañarán a ver alguna película en la sala pero este siempre se negaba con la escusa de que "no estaba de humor" y simplemente volvía a su habitación.

"¿creen que Estados unidos le hizo algo a Méx?" Había preguntado el argentino un día después de que la reunión entre ambos norteamericanos se había hecho.

"Les dije que ese sujeto es raro" soltó el peruano con el seño fruncido "esconde cosas lo sé".

"Deja de gruñir Perú" el chileno no creía nada de lo que el peruano decía sobre el estadounidense aunque si creía que este pudo haberle dicho o hecho algo a su hermano para que lo haya dejado de tan mal humor.

Los latinos no dejaban de pensar y pensar en que era lo que había hecho la potencia para dejar al mayor de esa manera.

✨✨✨

—¡México!.— le saludó el canadiense al verlo, él sólo movió su mano a modo de saludo —¡¿como te fue en la reunión?! ¿que te pareció mi hermano? ¿verdad que no es como dicen los demás?.— pregunto risueño el de hoja de Maple.

El mexicano soltó un pesado suspiro, lo último que quería era que alguien le recordará al gringo, bajo sus orejas denotando así su desánimo mientras se rascaba la parte de atrás de su nuca.

—la reunión fue normal y tu hermano es... Bastante agradable.— dijo omitiendo lo que había pasado entre el americano y él —pero... Creo que ya no asistire a otras reuniones con él.

—¿queee? ¿por que no?.— pregunto confundido —pensé que te había caído bien.

—si lo hizo pero... Es algo personal.

El de cabello rojizo le miro un tanto confundido, no comprendía que demonios hacia su hermano para alejar así a la gente, decepcionado soltó un pesado suspiro tenía fe de que el mexicano se haría amigo USA y así intentar que su hermano interactuara con más gente, pero al parecer esto no pasaría.

—bien, será mejor que nos apresuremos, la reunión no tardará en comenzar.

Y tras las palabras del canadiense ambos fueron en dirección a la sala de reuniones, se sentaron en sus respectivos puestos para luego esperar a que ONU llegará y empezará con la odiosa junta que tenían todos los lunes.

✨✨✨

No pasó mucho tiempo para que la ONU entrará por la puerta, pero a diferencia de siempre que iba directo a su lugar, está vez se quedó parado a un lado de la puerta mientras que llamaba la atención de todos.

—buenas a todos.— saludo con una gran sonrisa la cual era rara de ver en el de la paz —hoy nos acompañará una personita especial, espero y lo traten bien.— abrió la puerta con su mano desocupada (ya que en la otra tenía algunos papeles) dejando así ver a un country algo alto con características de zorro.

Todos los presentes miraron al recién llegado, algunos le veían confundidos mientras que otros tenían una mirada sorprendida en su rostro. Estados unidos, el country al cual muy pocos habían siquiera visto o hablado con él, había asistido a una reunión.

—tu lugar es aya, junto a Canadá y México.— le informó ONU para finalmente caminar a su lugar.

USA soltó un pesado suspiro, se sentía algo incómodo por las miradas de los demás countrys, camino con pasó lento hacia el que se supone sería su lugar y se sentó a un lado de su hermano el cual no pudo evitar abrazarlo por la alegría de por fin verlo en una de las juntas de la ONU.

—no puedo creerlo.— chilló el canadiense en voz baja mientras apretaba el cuerpo del mayor entre sus brazos —por fin te animaste a venir.

—C-canadá sueltame, todos nos ven.— soltó avergonzado al sentir las miradas de todos encima de él.

—l-lo siento pero, es que me alegra tanto verte.— y es que en verdad estaba muy feliz, tanto que su cola no dejaba de moverse de un lado a otro.

El estadounidense sólo le regaló una sonrisa divertida, miro de reojo al mexicano el cual estaba a su lado, este le miraba confundido y a la vez asombrado, sus orejas estaban bien arriba y su cola se movia de un lado a otro, no tanto como la del canadiense pero si suficiente para notar la alegría que sentía al verle, el zorro sonrió al notar el comportamiento del latino.

—hello México.

Continuara...

''¿trece-...?'' (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora