Addictive Love | Tokyo Revengers x Lectora | Yandere! | *En pausa*

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- Llegamos - Dijo Izana deteniendo su paso -

- Oh, que... amplio - Dijiste sorprendida -

Estaban frente a una bolera bastante grande.

- ¿Alguna vez has jugado bolos? - Dijo Izana volteando a verte curioso -

- Uhm, ¿tal vez? - Dijiste dando una risa nerviosa -

- ¡¿Qué?!, ¡¿Nunca has jugado a los bolos?! - Dijo Izana sorprendido -

- ¡Shh!, ¿no quieres un micrófono para todo el mundo se entere? - Dijiste en un tono sarcástico -

- Jejeje, perdón. Me alteré - Dijo Izana pasando una de sus manos en su nuca -

- ¿Tan raro es que no sepa jugar bolos? - Dijiste apenada -

- Sí, definitivamente sí. ¡Es un juego clásico! Al menos para mí - Dijo Izana encogiéndose de hombros -

- Bueno, ¿hay que aprender, no? - Dijiste copiando la acción de Izana -

- Te voy a pedir perdón adelantado. Mis amigos suelen ser muy competitivos y burlones, puede que se burlen de ti - Dijo Izana avergonzado -

- Uh, tranquilo, yo no me dejo de nadie - Dijiste con determinación -

- Eso es bueno - Dijo Izana riendo -

- ¿Entramos?, creo que ya nos atrasamos mucho - Dijiste señalando la entrada del lugar -

- ¡Cierto! - Dijo Izana abriendo los ojos de par en par, recordando que sus amigos los están esperando desde hace 30 minutos -

- Vamos - Dijiste agarrando una de sus manos -

Izana se sorprendió bastante por tu repentina acción, sin embargo, no le molestó en absoluto, es más, apretó más el agarre de ambos. Cabe aclarar que él estaba ligeramente sonrojado y también emocionado.

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- ¡Izana! ¡Por aquí! - Dijo una voz masculina desde lejos -

Los dos voltearon la mirada para ver de quién se trataba la voz, hasta que dieron con un chico rapado, con un ojo color rojo y el otro blanco. Supusiste que era ciego un ojo, ya que también tenía una gran cicatriz en la misma dirección, la cual comienza en la parte posterior del cráneo, le pasa por el ojo izquierdo y termina en el comienzo de su oreja izquierda.

- Oh, ahí están - Dijo Izana mirando hacia la mesa donde se encontraba el chico que anteriormente les habia gritado para guiarlos -

No le respondiste nada y simplemente comenzaste a caminar de nuevo, ahora dirigiéndote a la mesa donde se encontraban los amigos de Izana.