╰─── Perú,un país considerado relativamente joven,de aspecto simple,entre otras cosas.Se veía un poco perjudicado al cambiar mucho de ánimo,simplemente de un día a otro perdió el sentido de todo,como si fuera arte de magia ya no veía las cosas como...
Hola~ te doy la bienvenida a esta historia nuevamente, pero en edición, por qué voy a reescribir todo, pero por ahora ten mientras tanto aquí el prólogo, el cual espero que disfrutes.
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Atte:Lemon_child🍋
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Un día como cualquier otro, en una mañana como cualquier otra, un joven pelirrojo se encontraba en una de las tan típicas reuniones de la Organización de Naciones Unidas, más conocida como la "ONU". El país sudamericano se encontraba sumamente aburrido, y aunque era una gran falta de modales no prestaba atención a lo que decían los demás, era algo cotidiano para el, ya que nunca se lo mencionaba en casi ningún tema, no pedían su opinión, y era como si ni siquiera supieran que se encontraba en el establecimiento, lo importante era estar para decir "presente" cuando pasaba lista siempre era lo mismo ver peleas, oír gritos en todos lados, insultos, indirectas bastantes directas, bromas, chistes malos, ver peleas familiares, entre otras cosas. Siempre era lo mismo, nunca había cambio en aquella rutina cansadora y estresante, ya era lo de todos los días, puesto que las reuniones se habían cambiado de semanales a diarias, por qué según ONU la "situación y economía" de los países bajaba mucho volviéndose mediocre y denigrante varios casos causaban el enojo de la organización.
Luego de terminar como costumbre todos se fueron, ni siquiera se quedaban a despedirse, no, cuando ONU decía "terminamos por hoy, se puede retirar" y se despedía todos salían corriendo para no tener que interactuar o socializar entre ellos ya sea por deudas o simplemente por llevarse mal, claramente no hubo excepción con el pelirrojo solo que no sintió desesperación por correr como los otros, ese no era como todos los días.
Fuera del establecimiento nuestro protagonista se encontraba caminando a paso lento buscando una actividad para hacer, no quería volver a casa seguiría con la rutina y no sería interesante, se había propuesto cortar un poco esa rutina ese mismo día, luego de pensar y pensar, decidió ir a un lugar al que ya no concurría tanto como antes, lo irónico es que ese era su típico lugar que todos tenían para descansar y relajarse, aunque no lo veía así, lo consideraba simplemente un lugar con una linda vista para apreciar los alrededores. Luego de una larga caminata se encontró con aquella orilla de acantilado que tanto apreciaba, si, ese era su "lugar de tranquilidad", parecía absurdo pero un poco lógico por qué era un camino no tan concurrido y tenía una excelente vista de los alrededores, simplemente perfecto para el. Cómo reacción automática procedió a sentarse en ese lugar con sus piernas colgando a nada de el vacío, jugaba con ellas y las movía de un lado a otro, luego simplemente se quedó ahí no hizo nada más que ver el lugar y apreciar cada mínimo detalle.
No supo en qué momento pero, empezó a llenar su mente de pensamientos que aparecían de la nada, empezó dudando de todo, luego simplemente se empezo a nublar su mente lo cual no le permitía pensar correctamente, luego trato de murmurar algo y a la vez expresar el cómo se sentía pero un nudo en su garganta apareció como un intruso, trato de levantar la cabeza pero sus ojos se inundaban en lágrimas y pequeños sollozos empezaron a aparecer, ni siquiera el sabía la causa de tal llanto, pensaba que seguro era por la cantidad de estrés que causaba el cuidar un país junto a su presidente, pero no podía estar más equivocado. Logro ver cómo empezaba a oscurecer de manera repentina, no tardaron en aparecer las estrellas, una por una, llenando el cielo, parecía que una lluvia de estás se aproximaba.
