Una voz realmente molesta mientras sentía un sacudida despertó a Emilio
- Wey - Repitió por séptima vez el Mexicano.
- No mames Pablo - Gruñó el mayor de los dos hermanos. - Es bien temprano pendejo - Tapo su cabeza con la cobija de tigre.
- Necesito que me lleves a la pinche universidad wey - Removió otra vez y otra vez al mayor - Solo por hoy wey-.
El transporte de Pablito no pasaría hoy, ya que habían pasado unos cuántos problemas y el chófer que manejaba el bus de Pablo no trabajaría ese día y no tendrían transporte, sin eso no ser lo peor olvidó que tenía una exposición que hacer y no podía faltar a toda costa porque era la mitad de su nota; tampoco es que fuera muy bien de notas el menor
Después de unos cuántos minutos de súplicas el mayor de los dos acepto llevar al menor a su dichosa universidad pero solo si le cocinaba por una semana todo lo que el mayor quisiera y sin reproches
- Tas listo ya - Habló el mayor esperando al menor que cargaba con sigo unas dos cartulinas, unas cuantas fotocopias y anda saber que más.
Después de que el menor de los aceptará salieron de la casa el mayor burlándose de su dichoso hermanito por ir con resaca a la universidad y tras de eso tener que exponer, solo esperaba que mínimo se acordara de la fecha.
Después de dejar a su hermano en la escuela decidió pasear por la ciudad y comer en algún restaurante a ver como era la comida en los Santos. Encontró un restaurante que parecía estar bastante bien, nada caro y con buena pinta
- Esté se ve bien - Bajó del coche de su hermano para entrar al restaurante y lo primero que sus ojos miraron era a un chico gallego que anteriormente ya había conocido, el cual al trabajar en el lugar temporalmente se le acercó al mexicano para invitarlo a pasar
- Bienvenido, siéntese dónde guste - Sonrió con una libreta en la mano con la que apuntaba lo que le pedían
Después de que el mexicano solo dijera un gracias, se dirigió a una mesa cerca de la ventana.
- Aquí le dejo el menú señor - Le entrego un cartón con todo lo que había en ese restaurante
-"Señor? Pinche raro cara de viejo me ve"- pensó Emilio para tomar el cártel y volver a decir gracias.
El gallego se retiró y el juraba que se fue casi pegando saltitos
Segismundo
- Rogeliooo~ - Corrió hacía la cocina el menor con una gran sonrisa, captando la atención de su primo - ¡Lo ví de nuevo! - Hablo el menor con una sonrisa a su primo.
- Ostias - Recordó toda la historia vergonzosa que le contó su primo en la noche anterior
En el autobús conocí lo que parecía ser un mexicano, creo que su nombre era Emilio, era realmente guapo, apuesto y varonil. Lo malo de todo es que me dormí y salive como bebé y el se burlo de eso... Me di cuenta al bajarme del autobús
- ¡Está afuera! AAaAa... Cuando lo ví casi me desmayo, está más apuesto que la última vez -
Rogelio miro por la ventanilla para ver a un hombre con pelo largo y ceño fruncido mirar el menú
- Tío que feo es coño - Se burló el gallego
- Pero que dices - Se cruzó de brazos Segismundo con una mueca de disgusto por lo que dijo su primo.
- Que es broma anda - Río el mayor - Deberías ir ya, parece decidido.
Sin más el menor corrió a recibir la orden del mexicano
Emilio
Después de que el menor se fuera miro un poco el menú, definitivamente no habían tortillas... Pero pensó en como pedirle el número al menor
Sin más pediría café, con una empanadas de pollo que era lo que más veía cercano a su país, ya que no le había gustado el resto del menú
- Que le gustaría pedir - Dijo el menor apretando el cuaderno con emoción que intentaba ocultar
- Emmm empanadas, y un vaso de café - Dijo el mayor
El menor tomo la orden pero antes de irse intento decir algo
- Me pasarías tu núm- fue interrumpido por las palabras del mayor
- No tiene tortillas por si acaso - Dijo el mayor sin a ver escuchado las palabras del menor.
- No señor, solo lo que está en el menú - Suspiró el menor con una leve decepción y cuando estaba por retirarse.
- Eh por cierto, mmm - Pensó mayor y el menor volteó con una leve alegría, había pensado lo mejor - Su número viene en el menú chiquito - Sonrió el mayor y le guiño un ojo.
El menor de los dos casi se desmaya ante tal gesto
- Clar-o - Escribió su número para entregárselo al mayor en una hoja
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Amar? - Segilio
Historia CortaDónde Emilio viajando en autobús mira silenciosamente a un gallego de pelo medio despeinado con una mueca de enamorado Emilio 25 años Segismundo 18 años Pablito 19 años Gustabo 23 años Conway 29 años