9

74 10 2
                                    

Segismundo acompañó a Rogelio asta que este quedó dormido, había vomitado, llorado, reído en todo ese rato mientras Segismundo estaba apunto de tirarle por una ventana y que alguien mas lo cuidara

Se había ido a bañar otra vez porque el mayor había vomitado su ropa

- Joder tío, me cago en el gillipollas de Rogelio - Mencionó el menor con una notable molestia pero esa molestia se esfumó cuando se le ocurrió visitar al mayor en el taller

- Bueno... No sería mala idea... Ya son las 3 debe estar cansado, le llevaré una exquisita comida.. - Definitivamente iría a ver a su mexicano

Le había preparado una comida que pensaba que le gustaría, tampoco conocía muy bien al mayor como para saber que le gustaba pero simplemente se le ocurrió cocinarle algo de su gusto mexicano

Enchiladas mexicanas, Segismundo era bastante bueno en la cocina así que no le costó mucho hacerlas, además tenía todo los ingredientes menos el chile y tuvo que ir a comprarlo y la verdad para saber cuál era el más picante compró varios y los llevo a casa para probarlos

Mordió un pequeño pedazo de cada uno asta que dió con el más picante eso obviamente muriendo del ardor en el suelo

- Ay... Joder, coño, tu madre gillipollas - Insultaba mientras bebía agua con hielos

Después de recuperarse termino de preparar las enchiladas con claramente un tutorial de YouTube y las envolvió para llevarlas al taller

- Vamos Segismundo tú puedes - No podía mentir estaba más que nervioso, sentía que si iba, el parecería una clase de entrometido que no debajo hacer su trabajo a Emilio pero con esos pensamientos cogió un taxi

Ya estaba llegando al lugar pero se detuvo, no podía entrar, estaba demasiado asustado como para hacerlo, sus manos sudaban y temblaban y ni hablar de su corazón

Se asomo y pudo visualizar a Emilio que estaba solo, obviamente iba a aprovechar para darle lo que tenía planeado y cuando se estaba acercando una chica paso por delante de él para entregarle una caja que parecía ser de chocolates

- Dice mi amiga que le gustas

Apunto a la chica que estaba al otro lado del taller que miraba con una gran sonrojó la escena pero al Emilio mirar a la chica miro de reojo a una persona que permanecía quieta en un solo lugar

- ¿Segismundo? - Miro a Segismundo para sonreír y devolverle la caja a la mujer, camino asta Segismundo el cual permanecía con sus ojos bastante abiertos

"Joder... Joder porque no pensé en algo más romántico, como unos chocolates"

Ahí fue donde sus nervios se apoderaron de él

- ¿Viniste a visitarme? - Emilio le sonrió con gran emoción

- Ehh si... - Escondió la comida tras el

- ¿Que escondes? - Emilio intento mirar pero Segismundo se aparto

- Nada.. nada.. compras - Trago fuerte

Emilio pudo quitarle las "compras" a Segismundo

- ¡¡¡Enchiladas!!! - Grito el mayor, menos mal no estaba su jefe - ¿¡Dónde las compraste!? - Preguntó el mayor

- Bueno pues... Eh joder... Las hice yo - Segismundo jugaba con sus manos - P-ensé en algo mexicano... ehhh - Sentía aún más nervios ya no podía más - Yo... Me voy, solo venía a eso - Cerro sus ojos y se dió la vuelta para irse a paso apresurado

- Hey, hey perate - Emilio agarro del brazo a Segismundo para detenerlo - Es mi descanso, que tal si te quedas un rato - Ofreció el mayor

- Ehh, no, no tienes invitadas - Señaló a las dos chicas que miraban la escena con la cajita de chocolates en mano

- No we, ni idea de quiénes son, quédate tú - Arrastró al menor asta una mesa y una silla

Las dos chica fueron corridas por Yun

- A vel coño, si no van a venil hacer nada aquí se lalgan zorras - Esas chicas venían colmando la paciencia del pobre Yun, no paraban de traer chocolates para el mexicano y Yun ya se estaba artando de comer chocolate, porque claramente siempre les decía a las chicas que le daría los chocolates a Emilio pero nunca lo hacía

Segismundo rio por lo bajo pero seguía igual de nervioso que antes

- ¿Porque tan calladito? - Preguntó Emilio mientras comía sus enchiladas

- No sé, enchiladas... Mejor te hubiera traído chocolates.. es mejor - Hablo por lo bajo el menor

- Mm... No sabes.. que para los mexicanos, que nos traiga takos o enchiladas,etc la persona que amamos es lo mejor - Sonrió el mayor acariciando la mejilla del menor

- Ehhh... - Eso definitivamente no lo sabía

- Sip, por eso estoy tan feliz.. además estás enchiladas están buenísimas - Literalmente parecía que había ido asta México a traerlas el menor - ¿Que chile usaste? - Preguntó el mayor porque si que estaban picosas

- Bueno... Creo que el señor me había dicho habanero - Todavía le ardían sus labios y los sentía medio calientes

- No mames con razón - Pues gracias a Dios no le había puesto tanto habanero el menor a las enchiladas porque si no le fallaría al menor, no conocía un mexicano que comiera tanto habanero

- Todavía me duelen los labios - Relamio sus labios sientiendo arder todavía

- ¿Por...que? - El mayor hablaba con la boca llena. No había notado que los labios de Segismundo estaban rojos y hinchados, muy apetecibles a los ojos del mayor

- Solamente mordí la puntita de ese chile y casi muero - Recordó el horrible ardor

Emilio se había quedado mirando los labios del menor, trago para intentar besar al menor pero este lo alejo

- No, no - Se separó de Emilio

- No we, porque - Renegó el mayor

- Tienes chile en la boca joder, me pesas y es que caigo muerto tío - Segismundo dijo todo con una voz dramática

- Si cierto, entonces un besito en la mejilla - Emilio volteó su cara para que Segis le diera el beso

Con pena le dió un besito en la mejilla

- Joder - Miro a otro lado con un gran sonrojó

Emilio río para Seguir comiendo

- Mexicano!!! Cierra ya coño, que ya son la cuatlo jodel - Parecía que Yun no tenía un buen día

- Este pinche chino - Renegó Emilio - Espérame afuera, si? - Hablo Emilio a lo que Segismundo asintió

Camino afuera y se quedó esperando en un poste mientras se mecía con sus pies tranquilamente

Amar? - SegilioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora