Los soles oscuros

Capitulo 5: Aquel que posee el libro verde....

Lincoln estaba acostado sobre unas frazadas muy gruesas, puestas sobre el suelo y con únicamente una sabana blanca tapándolo. Tenia sus brazos apoyados sobre la sabana, completamente cubiertos con yeso.
Miro sus manos levantando con dificultad la cara y con los ojos humedecidos. No podía creer el estado en el que estaba y mucho menos creer lo que lo había llevado a ese estado. De solo pensarlo unas finas lagrimas salían de sus ojos.
<<Dios, no puedo creer que seas tan patético como para auto compadecerte >> dijo una voz muy gruesa en su cabeza.
_ Ya cállate _ le dijo tratando de que su voz sonara firme pero salió de sus labios apenas como un leve quejido.
Mientras las lagrimas salían de sus ojos, no pudo evitar que su cabeza se llenara de los recuerdos de lo que había pasado el día anterior con todo detalle y  sin quererlo se sumergió en ellos reviviendo todo lo que había ocurrido.

El día había empezado como de costumbre: Se había despertado apenas gracias a su abuelo y se había levantado a la fuerza para ir al colegio, dios que tonto había sido. Ahora que lo recordaba todo con detenimiento, desde el minuto uno todo había indicado que algo raro pasaba.
Su abuelo no había sido el mismo ni al despertarlo ni al desayunar. Al despertarlo se había limitado a agitarlo suavemente y no le había insistido en que se levantara rápido, le había dejado tomar su tiempo, y de desayuno había comprado lo que mas le gustaba. Aunque claramente no pensaba quejarse. 
_Buenos días _ lo saludo.
_ Buenos días 
Y eso fue una de las pocas cosas que dijo en toda la mañana, se había mantenido callado mientras Lincoln comía. Tal vez su abuelo ya presentía que algo pasaría solo que no sabia el que, si tal vez era eso, pero el no se daba por aludido por nada. Para Lincoln la mañana iba normal. Si tan solo hubiera prestado atención.
Una vez llegaron a la escuela, antes de poder bajarse su abuelo lo detuvo un segundo.
_ Lincoln, mucha suerte hoy y recuerda no dejes que te vuelvan a intimidar _ le recordó.
El bufo con fastidio, había pensado que el tema estaba olvidado.
_ Si abuelo _ le dijo, frustrado, y antes de que pudiera agregar algo, sonó el timbre de la escuela, alegrando a Lincoln por primera vez escucharla, al hacer que  pudiera salir de esa conversación _ Muy bien adiós, abuelo.
Se despidió, mientras bajaba del auto.
_ Adiós, Lincoln _ lo despidió y, mientras corría a la puerta, creyó oír: Te quiero, Lincoln.
Eso lo hizo mirar para atrás un momento, pero al ver el auto irse negó con la cabeza y siguió su camino. Su abuelo no era de decir esas cosas de la nada.
Su mañana siguió normal, se sentó en su lugar en clase y trato de seguirle el hilo de la explicación que su profesor estaba dando, lo cual le resultaba de los mas difícil, ya que este tenia literal una radio por garganta y su voz salía como si hiciera gárgaras, por lo que no se pudo concentrar. Incluso algunos de los mas listos parecían tener problemas al oírlo.
Sin que lo notara todo se estaba preparando para la tormenta.
Cerca de su casa, se encontraba la camioneta de Luke y sus compañeros. Todos vestidos con disfraces, con mascaras a sus costados y con una mirada muy seria
_ ¿Cuánto mas tenemos que estar aquí? _ pregunto la chica de pelo rubio plateado.
Luke suspiro.
_ Ya te dije, Kate, que llegara nuestro momento de actuar _ le recordó y dijo en general : recuerden también que su nieto vendrá con nosotros una vez ocurra el desastre, así que protéjanlo. ¿Bien?
Aunque lo hicieron con resignación, todos asintieron. Luke volvió a suspirar.
Desde el momento en que había avisado que el niño vendría con ellos, paso lo que sabia que pasaría, todos pusieron el grito en el cielo en contra de la idea, principalmente Kate. Era obvio que se negarían, no por que el chico fuera malo, sino por el simple hecho de que saltaba a la vista que no estaba capacitado para el tipo de viajes que ellos tomaban, y ellos claramente se dieron cuenta de solo verlo.
_ ¿Por qué debemos traerlo con nosotros? _ había dicho Kate tratando de contener su rabia, algo que agradecía.
_ No tiene ningún sentido, el chico no esta capacitado _ la secundo Jack, cruzándose de brazos.
_Y nosotros no podremos prepararlo tan rápido _ tercio Red, con un tono muy infantil y agitando mucho sus brazos.
_ No creo que sirva ni para traer cosas, jefe _ Agrego Marcus, con un tono algo burlesco, sosteniéndose su cabeza con una mano.
Levanto las manos en un gesto para que todos se calmaran.
_ Por favor denle una oportunidad _ les pidió.
Antes de que pudiera decir algo una chica de con el pelo blanco, hizo un elegante gesto como pidiendo la palabra y dijo:
_ Luke tu no eres de decidir estas cosas de la nada ¿por que quieres hacer esto tan de repente?
_ Ya les dije es un favor a mi amigo....
_ Si, ya lo dijiste _ lo interrumpió Kate _ Un favor a tu amigo Albert, entendimos eso, pero ¿por que tu? Sabe de nosotros. ¿Acaso? ¿Si lo sabe porque no eligió a otro? Debe tener mas amigos por ahí. ¿Y mas importante, que te dijo para poder convencerte?
Eso lo dejo mudo, mientras los demás asentían a lo dicho. En ese momento, el único que no había dicho nada y parecía ignorar la conversación, lo miro.
_ Usualmente no estoy de acuerdo con Kate _ dijo en un tono muy tranquilo _ pero esta vez tiene razón. _ tomo un respiro mientras los demás lo miraban, con algo de intriga, y agrego: ¿Qué le dijo Albert para convencerlo?  Es su amigo, claro esta, pero entre que la petición es muy rara y que usted es un hombre muy precavido como para llevar a alguien tan poco preparado, resulta extraño que haya aceptado sin una razón lógica.
Se quedo callado otra vez. Bajo la mirada a sus manos, pensando con cuidado lo que diría Sabia que estaba acorralado, su única opción era revelar una de las razones. Ya que tenia varias razones, solo que una le causaba mucho dolor como para usarla de excusa y dos había prometido guardarlas en secreto a no ser que la situación lo requiriera, así que solo quedaba una que serviría para al menos excusarse.
_ El tiene el libro verde _ les informo, dejándolos perplejos, algo que sabia que pasaría. 
_ ¿Habla en serio? _ hablo la peliblanca, con la voz entrecortada. El afirmo con la cabeza. _ Después de tanto tiempo buscando al menos uno de ellos.
_ Si, y me lo ofreció a cambio de ayudarlo con algo y el trabajo de cuidar a su nieto _ les dijo rápidamente, para no darles tiempo a pensarlo mucho.
Claramente eso los había dejado tan anonadados que no hicieron mas preguntas y aceptaron. Es verdad que no había contestado sus preguntas realmente pero como había dicho la chica, llevaban tanto tiempo buscándolo que no lo iban a rechazar ahora que lo tenían a mano solo por un pequeño inconveniente.
Y ahora ahí estaban, esperando que empezara el desastre. Un desastre del cual apenas si sabían algo, pero que se sentía en el aire que pronto ocurriría. 
Eso era algo que incluso el enmascarado compartía. Mirando todo desde su escondite, esperaba a que ocurra lo inevitable. Movió unas piedras sobre su palma haciendo que giraran en circulos. No se sentía nervioso, eso lo sabia, estaba seguro de si mismo.
El solo se sentía ansioso por lo que estaba por pasar. Este era un momento crucial para el.
Agito su cabeza y movió mas rápido las piedras en su mano para calmar su ansiedad.
Saco una botella de gaseosa de su abrigo, mientras veía a Albert llegar a la casa. Se llevo la bebida a la boca sabiendo que quedaba poco tiempo.

Mientras Albert entro a su casa con una calma que se sentía anormal en una persona y sin dudarlo se fue a su cocina. Calentó un termo de agua y preparo un mate. Quería pasar tranquilos esos minutos.
Sorbiendo unos buenos mates.

Al mismo tiempo una nave se empezó a ver en el cielo acercándose al lugar. En ella se encontraba el hombre peli naranja vestido completamente de blanco y sosteniendo una mascara sin expresión del mismo color. A sus espaldas se encontraban sentados por cabina otros tres sujetos también vestidos de blanco y con mascaras inexpresivas en sus manos.
_Cinco minutos para llegar al destino_ anuncio una voz robótica por un micrófono.
Una sonrisa se formo en la cara de aquel hombre y se puso su mascara.
_ Muy bien, prepárense _ ordeno a los demás que se levantaron, se colocaron las mascaras y se pusieron junto a el.
4 minutos.
Por tierra llegaba un automóvil, que mas que nada parecía una limusina, con tres personas adentro.
_ Maestro, casi llegamos _ dijo con voz neutra el joven de cabellera blanca.
El hombre solo sonrió levemente.
_ Bien, no permitan que escape bajo ninguna circunstancia _ les aviso con un tono serio, sin dejar de sonreír, y agrego : Si es necesario mátenlo y obtengan el libro.
Todos los presentes asintieron tranquilamente. 
3 minutos.
_ ¿Así que vamos a ir a donde usted nació, líder? _ pregunto un niño, entusiasmado.
El grupo se encontraba en un bar bastante común, preparándose para marcharse al haber acabado sus bebidas. 
El joven sonrió de lado con diversión ante la emoción del niño.
_ Pues no exactamente pero esta cerca _ le contesto, desilusionando al pequeño, así que agrego _ Aunque ahí pase mucho tiempo de mi niñez, ya que tenia unos amigos que vivían en ese lugar.
El niño pareció emocionarse mas y el brillo de sus ojos apenas si fue opacado por el brillo del portal que se empezó a abrir frente a ellos.
_ Recuerden que cerrare el portal en cuanto pasen _ les aviso _ si requieren que lo abra de nuevo, solo avísenme.
_ De acuerdo.
2 minutos.
Los siete iban corriendo rápido por encima de los edificio. Saltando de uno en uno. Cinco de ellos llevaban un uniforme similar pero de diferente color y los otros dos eran completamente diferentes, siendo que vestían un uniforme que parecía mas ligero y mascaras que apenas si les tapaban la cara.
 Mientras corrían, una chica activo su comunicador
_¿Que ocurre, Rose? _ pregunto el sujeto.
La chica pregunto, algo agitada: 
_ ¿Es que aun no entiendo cual es nuestra misión? y ..._ miro con extrañeza a dos  personas que tenían un uniforme completamente diferente al que tenia el resto y finalmente pregunto: ¿Por que tenían que venir eso dos? 
_ Los jefes recibieron un aviso de que unos villanos fuertes atacarían este lugar y nos mandaron para detenerlos en caso de que sea verdad, e incluso por la cantidad que dijeron decidieron que era mejor que lleváramos mas gente.
_ Lo entiendo pero esos... 
_ Yo los elegí _ la interrumpió, dejándola muda _ me debían un favor y sus poderes son los mas adaptables para este tipo de situaciones.
Además eran los únicos de los que conocían el verdadero propósito de la misión que eran  perfectos, al menos lo suficientemente buenos, para cumplir dicho propósito que le habían encargado los altos mandos.
La chica bufo.
_ Igual creo que con nosotros hubiera bastado _ se quejo.
El líder rio, alejando los pensamientos de la misión real.
_ Si, lo se.
1 minuto.
Lincoln salió al fin de su colegio y empezó a  correr a su casa. Las clases habían sido igual de desastrosas y aburridas que de costumbre. Bueno que mas daba, a menos lo malo había acabado por ese día y al llegar a casa ya podría descansar.
O eso pensaba.
0 minutos.
Al fin la nave se poso completamente sobre el lugar. 
El hombre peli naranja toco un botón y la compuerta trasera se abrió. Los tres, sin mediar palabra, saltaron sin dudar.