Cap. II ~ Ringo Starkey

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Al día siguiente fui a la escuela.

-Hola, mucho gusto, me llamo Paul McCartney, Paul James McCartney... -

Giré mi cabeza hacia él, extendiendo mi mano con propósito de saludo. Estábamos sentados uno al lado del otro.

-¡Un gusto! Ringo Starr. -

El chico de ojos claros estrechó mi mano con la suya, llevaba muchos anillos, creo que entendí su nombre, me observó.
Ambos teníamos una sonrisa pintada en nuestra cara.

-Eres nuevo en el curso ¿No? Nunca te había visto. -

Miré de re ojo a aquel chico de patillas largas para después soltar nuestras manos y hubiera un pequeño intercambio de silencios incómodos.
Aproveché el silencio y acomodé mi mochila azul marino en el pequeño espacio debajo de mi mesa banco del lado de mis piernas y acomodé mi camisa del uniforme.
Él respondió.

-¡Si!, hice trámites para mí cambio de horario, pero me cambié de bachiller por qué en mi antiguo colegio no me hacían válido el intercambio de turno, además el cupo estaba lleno.-

Continuó después de una breve pausa

-Y también porque mi papá está en constantes cambios, pero este es el último, saliendo de Londres no tenía amigos por el mismo hecho que nos cambiábamos muy seguido de casa, y por lo tanto, yo de escuela también. -

-¡Oh! ¿Eres de Londres? Bueno, ahora ten por seguro que me tienes por amigo. -

Lo miré aún más asombrado y le regalé una sonrisa.

-No jajaja... -

Soltó una leve carcajada.

-Lo que pasa, es que soy de aquí, pero siempre me vi en la necesidad de mudarme muchas veces como ya te había dicho. -

Me regresó la mirada muy confiado y aliviado, se notaba muchísimo que era reservado, tal vez porque acabábamos de conocernos, no se notaba del todo, me había contado toda su vida pero por eso me le acerque, para que no estuviera solo.

-Genial, bueno, voy a hacer que te sientas bien aquí. -

Le sonreí.

-Gracias amigo, ¿Crees que así pueda llamarte de ahora en adelante?. -

-¿Bromeas? Claro... -

Nuestra conversación se vio interrumpida por una tercera voz.

-Ho...la..Pa...ul... -

Era George, mi mejor amigo, se acercó a los mesa bancos donde nos encontramos Ringo y yo, se le escuchaba y veía agitado, como siempre, era de esperarse, siempre sale corriendo por qué no suele alcanzarle el tiempo, se sentó y se calmó un poco y después dijo.

-Hola ¿Eres nuevo cierto?, ¿Cómo te llamas? Yo George, un placer. -

Le extendió su mano a Ringo con una sonrisa amigable, seguía agitado, pero ahora un poco menos.

-Hola George, un placer, me llamo Ringo Starr. -

-Veo que ya te acoplaste muy bien con el baboso de Paul, JAJAJA. -

Soltó una gran carcajada

-Oye idiota, duele JAJAJA. -

Le seguí la corriente, por qué realmente nos llevábamos así o más fuerte, pero bueno, a Ringo no se le veía que le molestara, y espero que no se haya incomodado.

-¿Escuchaste los álbumes que compraste ayer, a ver si no te habrían robado o pirateado?
-Si lo hice.
-Aaah vale, deberíamos invitar a Ringo un día de esos.
-Sii. -
Él solo sonrió.

Nos levantamos y recorrimos el patio principal del primer edificio, le mostramos muchas cosas a Ringo.

-Mira Ringo...-

Apunté con mi mano derecha a cierta parte del piso.

-Ahí están los baños.-
-Donde te puedes pajear con la maestra de inglés JAJAJA.-

Interrumpió George, en eso pasó el maestro de matemática, nos vio raro y siguió su camino, le metí un zape a George y dije.

-Que oportuno pedazo de baboso JAJAJA.-

Nos reímos los tres muy fuerte.

George fue a coquetearle a Pattie Boyd, la niña popular del salón, y creo que hasta de la escuela.
Yo también fui a hablarle a la niña que me gustaba, Linda.
Estaban por comenzar las clases, a primera hora tocaba Lengua, así que antes de eso, le platicamos unas cosas más a Ringo sobre la escuela, como el itinerario y eso, del como se manejaban los maestros, etcétera, lo que ocuparía un alumno para sobrevivir el año.
Incluso hasta chismecitos escolares, lo que se necesita saber.

✰✰

Nos platicó que toca la guitarra y estaba en espera de recibir una batería por paquetería, le gustaba muchísimo la música, igual que a George y a mí.

Le dijimos que estábamos decidiendo si haríamos una banda o no, no conseguíamos a nadie, pero tal vez no, éramos tres, tal vez faltaba alguien más, dejamos la idea así, vi que Ringo se emocionó, creo que le rompí la esperanza.

Después de un tiempo, entró la hora de clase de matemática así que nos acomodamos en los bancos de nuestras mesas, comenzaron a nombrar lista, en eso...

- ¿Richard Starkey? Oh por lo que veo eres nuevo ¿verdad? bienvenido joven, ojalá pueda acoplarse bien. -
Dijo el maestro Jackson.

A Ringo se le puso la cara muy roja, Richard era su nombre, y le daba pena, yo y George nos volteamos a ver con unos ojos de confundidos, pero lo entiendo.

Continuó el resto del día, como cualquier tipo de día normal, hasta la salida, sonó el timbre y nos paramos de nuestros lugares, planeaba invitar a Ringo a los ratos que pasábamos George y yo después de la escuela, ya fuera en mi casa o en cualquier otro lugar.

Obvio no sin antes preguntarle a George antes, me dió el visto bueno así que lo invitamos.

- Oye Ringo, nos preguntábamos si querrías venir con nosotros al café o a mi casa a pasar la tarde. -

-Si solo déjenme avisarle a mi mamá que no iré a casa hasta más tarde.-
-Está bien.-

Sacó su celular y se dispuso a llamar a su madre.

Lo esperamos un rato y después partimos al kiosco donde compramos golosinas, y fuimos a mi casa.
Pasamos por las mismas cuadras que recorríamos yo y George siempre.
Paramos en mi casa, una fachada muy bonita color beige oscuro en la esquina de la calle, con 3 pisos y un balcón precioso adornado de un barandal de herrería color negro adornado con las preciosas flores de mi madre, nos situamos en porche de mi casa, saqué mis llaves de mi mochila, tomé la perilla y me dispuse a abrir la puerta con ese puñito de llaves con varios llaveros de diferentes partes del mundo.
Entramos y nos encontramos con la señora Eleanor en la cocina.

-Buenas tardes Paul... George, y ¿cariño, y tú cómo te llamas?...-

Se dirigió a Ringo, la señora Eleanor tenía la peculiaridad de tratarnos muy lindo, yo le tenía mucho aprecio.

-Me llamo Richard Starkey, pero puede decirme Ringo.-
-¡Que lindo nombre!-
-Gracias señora...-
-Eleanor, Eleanor Rigby.-

-Subimos a la terraza, señora, gracias.-
-En un momento les subo un chuche o merienda en lo que está la comida.-
-No se preocupe, yo bajo.-
-Gracias cielo.-

Fue toda la conversación y subimos.

Amor de Vinilos [McLennon] ♫︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora