CAPITULO 7: VIERNES PARTE: II.

13 0 0
                                    

18:30

Evan y Logan me volvieron a dejar en el loft, no había recogido todo y tamo iba a vender ni alquilar la casa. Algún día necesitaría estar sola y podría volver allí. Eider llegaría en media hora. Aproveche para darle un aspecto de ángel a la casa, poniendo velas blancas en los muebles y telas blancas colgadas del techo.

19:00

-Vamos vamos Aura abre la puerta. -Eider gritaba desde detrás de la puerta. Corrí a abrirla y me tire sobre ella abrazándola.

-Oh Eider, bienvenida. -dije separándome de ella. Entro en la casa y nos sentamos en el sofá, estuvimos un rato hablando. Le  puse al corriente de mis trabajos lo de Evan, lo de las brujas blancas... Y ella me contó lo de los tenebrosos demonios de Zaragoza.

19:30

Eider hizo aparecer dos revistas de moda, nos pusimos a ojearlas, salían famosas en fiestas en el campo vestidas normal pero chic o en grandes eventos con ropa de gala.  En cuanto Eider vio un conjunto que le gustaba colocó un dedo sobre él, pronunció un par de palabras y el conjunto apareció sobre la mesa. Yo seguí ojeando la revista hasta que encontré uno que me gustó e hice lo mismo.

Ella fue al baño a cambiarse y yo me quede allí.

Había elegido un vestido blanco de encaje y tirantes, con unos botines de verano color crema. Airee la mano cerca de mi pelo y este quedo ondulado por las puntas. Eider salió al poco rato, llevaba un pantalón corto blanco, una blusa plateada de tirantes y unas sandalias del mismo color. Salimos a dar vueltas por Nueva York y paramos en Central Park a observar los patos en el lago.

23:50

Cogimos un taxi hacia la casa de la hermandad.

-Señoritas han escogido un mal día para ir en taxi. -dijo el taxista muy amable.

-¿Por qué? -pregunto Eider.

-Es un viernes clave, hay muchas fiestas y con ello grandes atascos y por ello la tasa subirá. -contestó.

-No hay problema. -dije.

00:40

Por fin llegamos a la casa. El taxista tenía razón, el viaje nos salió bastante caro.  Nos bajamos del coche y pudimos ver bien la casa, era bastante grande salían luces de colores por las ventanas y la música estaba bastante alta. 

Cuando entramos en la casa fue como si la música se bajará, todo el mundo nos miraba. Alguien me tapo los ojos por detrás.

-Hola hola Aura. ¿Quién soy?  -dijo cerca de mi oído.

-El único que sabe mi nombre y tiene suficiente confianza para hacer eso. -dije,  él me soltó y se puso frente a mí.  Me acerqué para que me escuchara. -Ella es Eider, Eider él es Evan.

-Encantado. -dijo Evan y le dio dos besos.  Luego se dirigió a mí. -Estas muy guapa con vestido. -dijo sonriendo.

-¿Estas ligando conmigo?  -pregunte riéndome. -Gracias Evan.  -concluí. Él se encogió de hombros y se rio.

'Qué bien te haces pasar por una humana. Más bien pareces uno de ellos.' Dijo Eider en mi cabeza, este era uno de los mejores poderes de ángel, la telepatía.

'No,  lo que pasa es que hago muy bien mi trabajo.' Contesté. Ella me miro arqueando una ceja.

-¿Queréis algo de beber?  Hay cerveza y... Lo otro no sé si es vodka o ginebra. -dijo Evan. Miro hacia un lado y se dio cuenta de que le estaban llamando. -Luego nos vemos y coger lo que queráis.

-Vale gracias. -conteste. Evan se fue y Eider aun me miraba.

'Lo que te digo, pareces uno de ellos y solo llevas aquí... ¿Cuánto? ¿Dos semanas?'  Dijo Eider.

'Menos, llevo menos de una semana.'

'Pues acuérdate de lo que puede pasarte. Por mucho que seas la niña favorita de Azrael, no te dejarán volver a casa.' Contesto Eider, era bastante dura. Yo levante la mano derecha en forma de promesa. Fuimos a dar una vuelta por la fiesta ponían buena música según los humanos, se lo estaban pasando en grande.

2:30

 Más de la mitad de los humanos que había en la fiesta iban borrachos o colocados, digo más de la mitad porque creo que las únicas que íbamos bien éramos Eider y yo. Según Eider el humo que olía era porro, en otras palabras droga y la gente que no había fumado se estaba colocando solo con el humo. Por suerte gracias a la capacidad de regeneración de los ángeles a nosotras esos actos colaterales no nos afectaban.

3:00

Eider me dejo sola un buen rato porque se fue a buscar el baño. Un chico comenzó a acercarse a mí.

-Hola, lo siento por lo del otro día. –dijo, era Brent.

-No pasa nada… no me ofendiste. –conteste.

-No nos han presentado oficialmente. Soy Brent. –dijo, tendió la mano para que se la estrechara y respondí a su acto.

-Yo Aura. –conteste y le solté la mano. En ese instante de contacto pude notar como la energía fluía entre nosotros, como si estuviéramos conectados por algo más fuerte.

-Te he visto hacer la audición para West Side Story. –comento.

-Sí, Evan me convenció para presentarme a María. –conteste. –Aunque no creo que me escojan.

-¿Por qué? Si lo hiciste genial. –dijo sonriendo.

-No tengo ninguna pinta de ser latina. –conteste.

-Bueno, podrías ser española ¿sabes? Allí no todos son morenos.

 -Ya… ¿Tú no bebes? –pregunte súper descarada.

-No, no me gusta. –contesto. -¿Y tú?

-Ídem. Bueno tengo que ir a buscar a mi amiga, ya nos veremos por la academia. –dije sonriendo, él asintió sonriendo y me fui. 

3:30

‘Por fin te encuentro chica.’ Le dije a Eider. ‘¿Dónde te habías metido?’

‘He encontrado a un ángel caído.’ Dijo con su voz de ángel inquisitivo.

‘¿Qué? Tengo que encontrar a Evan.’ Dije preocupada y me puse a empujar a la gente buscando a Evan. Si era verdad, si el ángel se había presentado en una fiesta como esta iba a hacer alguna de las suyas.

4:15

Tras tres cuartos de hora buscándolo, lo encontré sentado en el bordillo de fuera de la casa. Corrí hacia él y me agache a ver como estaba.

-Evan… eh Evan ¿estás bien? –le pregunte. El levanto la cabeza y pude ver su cara. Le habían pegado o algo, llevaba el labio y la ceja con una raja y muy hinchados.

-Creo que no. –dijo, estaba un poco borracho. Eider apareció por detrás en un punto donde Evan no le veía.

‘Me he despistado un momento y mira lo que le ha pasado, se supone que debo protegerle.’ Dije gritando.

‘No es tú culpa. Igual no ha sido el ángel caído, si va borracho pudo haber tenido una pelea con cualquiera. Tranquila.’ Contesto Eider. ‘Llévatelo a casa, a la tuya y cúralo un poco.’

‘¿Y tú?’ Pregunte.

‘Me quedo a ver si vuelvo a ver a ese mal nacido. No lo cures con magia puede dejar rastros y no cojas un taxi.’ Dijo Eider.

‘¿Y cómo nos vamos? Mi casa está muy lejos.’

 ‘Desaparece’ Aferre a Evan de la camiseta y cerré los ojos, al instante estábamos en el loft. 

FALLEN ANGELS (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora