Nirvana.

7.

Me encontraba en un café afueras de la ciudad, me sentía extrañamente vacío, el rostro de Zayn había invadido la mayor parte se mis pensamientos, el ver que lloraba por culpa mía simplemente me era la peor tortura del mundo.

El era claramente todo lo que quería en mi vida.

Es maravilloso, es una gran persona y yo estaba simplemente lastimandola, quitando le ese brillo a sus ojos del cual yo estaba completamente enamorado.

Suspiré fuerte.

Estaba enamorado y ahora había cagado todo, el viento cálido de abril acarició mi rostro y una idea fugaz pasó por mi mente.

"Contando todos mis errores, solo hay uno que destaca en la lista de las cosas que he hecho.

Todo el resto de mis crímenes no se le acerca a la mirada sobre tu rostro cuando te dejé ir..."

Parpadee ante el pequeño verso que había creado, una ola de inspiración invadió mi cuerpo y la ansiedad de escribir comenzó a picar en mis manos, me levante de la mesa haciendo que varias gotas de café salieran de la taza y me acerqué a grandes zancadas a una mesera.

-Disculpe.-Le llame, ella me miró alzando una ceja.-¿Tiene una pluma que me pueda prestar?

-Claro.-Dijo dudosa y tomo la pluma que estaba en su bolsillo del chaleco, la tomé junto un par de servilletas más y me deje caer en la silla donde antes estaba, tomé la servilleta y comencé a escribir, mañana tenía que presentarla y hoy el romperle el corazón a alguien que amo me había inspirado, curioso.

"Si me tomó algo de tiempo pero pude entender como reparar un corazón que decepcioné..."

Santa. Mierda.

(...)

Sostenía las hojas aferrando me a ellas haciendo que mis nudillos se pusieran blancos, estaba nervioso, no había dormido desde ayer, había pasado toda la madrugada armando la canción que ahora tenía en mis manos y cantaría al profesor, tenía miedo, mi corazón latía de una manera impresionante en mi pecho, me encontraba sorprendido que no saliera de el, es decir, el golpeteo que este hacía era irreal, dolía, sentía que movía cada fibra de mi ser, tal vez hasta alguien podría escucharlo.

-Liam, Liam Payne.-Dijo mi maestro de música llamándome para pasar y cantar, me sentía nauseabundo, la canción dejaría al descubierto lo que sentía, pero era muy tarde para echarme para atrás, tenía que hacerlo.

Me levante y sentí que mis pies pesaban toneladas, así que básicamente los arrastre hasta quedar frente a la clase, varios me veían atentamente, otros calentaban sus cuerdas, yo no había calentado, sentía que la iba a cagar, dios ayuda.-Bien Liam, puedes comenzar.

Respiré fuertemente y comencé.

"Contando todos mis errores, solo hay uno que destaca en la lista de las cosas que he hecho.

Todo el resto de mis crímenes no se le acerca a la mirada sobre tu rostro cuando te dejé ir...".

Así que construí una casa en un hogar roto, después te escribí una canción con las palabras que dijiste.

Si me tomó algo de tiempo pero pude entender como reparar un corazón que decepcioné.

Ahora busco en cada lugar solitario, en cada esquina grito tu nombre.

Trato de encontrarte pero no sé, ¿A donde van los corazones rotos?"

Hice una pequeña pausa, alguien llamó a la puerta para después escuchar que se abría, pero no preste mucha atención, seguí cantando con los ojos cerrados y entregando todo de mi.

"Obtener el sabor de tus labios en mi lengua es lo primero en la lista de las cosas que deseo.

Mi mente da vueltas alrededor nuestro, cualquiera que se interponga es el enemigo.

Sombras se acercan con el dolor del dolor que tú estás huyendo.

El amor es algo de lo que tu nunca escuchaste lo suficiente, Si me tomó algo de tiempo pero pude entender como reparar un corazón que decepcioné.

Ahora busco en cada lugar solitario, en cada esquina grito tu nombre.

Trato de encontrarte pero no sé, ¿A donde van los corazones rotos?

Cariño, ¿Acaso estás durmiendo solo? ¿O estas entregandote a alguien más?

Trato de encontrarte pero no sé, ¿A dónde van los corazones rotos?"

Termine y abrí los ojos, muchos aplausos llenaron el aula, miré al maestro y el me aplaudía de pie.

-Eso es hablar con el corazón.-Dijo y miré el suelo por instinto, estaba orgulloso de la canción pero aún me sentía apenado de dejar al descubierto todas mis emociones.-Ahora si, señor Malik, ¿Que ocupa?

Palidecí y miré a la puerta, ahí estaba el vago, Zayn me veía atentamente.

-Yo, yo solo.-Tartamudeo.-Venía porque el director me cambio de taller.

El profesor me miró y después a Zayn, sonrió de lado y se acercó al moreno.

-Bien chico, porque parece que has llegado en el momento y al lugar indicado.