Ariadna
Lo que me faltaba, el idiota que pensé que no volvería a ver está justo frente a mi—comiendo como si nada.
«Idiota tu qué saliste con el y... te traicionaron»
Esté no es el momento para reprocharme nada conciencia, tenemos que estar alerta ante cualquier situación que pueda surgir.
-Ari, ¿quieres comer algo?—me pregunta el muy imbécil de, Angel.
-Si viene de ustedes, ¡no me apetece, ni una gota de agua!—escupo en el suelo asqueada por estar con ellos... por desgracia.
-¿¡Por dios Ariadna... dónde quedan tus modales!?, No deberías comportate así frente a tu prometido—dice Alessandro mientras frunce el ceño.
-¡Ex-prometido!—exclamo furiosa— ¿Mis modales?, ¿¡mis... modales!?—titubeo por un breve momento—¡se los llevaron mis padre el día que murieron por tu culpa idiota!—le digo mientras, lo veo... con la muerte asomada en mis ojos, viendo hacia afuera como si un fino cristal la tuviera atrapada, esperando que este mismo se rompa para poder salir.
Se levanta de la silla exaltado, por mi respuesta respuesta, el esperaba seguramente a una Ariadna sumisa y tranquila pero... la verdad, no la va a encontrar, ellos la mataron aquel 10 de marzo... justo después de ver los cadaveres de sus padres tirados en el suelo del baño... ah.
Tres años atrás...
Hoy es mi cumpleaños número 16, como todos los diez de marzo... mi madre me despierta con una hermosa cancion de cumpleaños que se canta en su país natal, pues mi madre no es de aquí sino que ella es Venezolana.
Sonrio de forma sincera mientras siento la paz y la alegria mas grande del mundo, al ver a mis padres justo frente a mi completamente felices por mi... sí, mis padres me hacen la persona más feliz del mundo.
-Mamá, voy a ir a casa de Leo, vengo más tarde—grito desde la puerta de mi casa.
-Esta bien hija, te amo...
- Tambien te amo mamá—respondo mientras cierro la puerta tras de mi...
Recorro aproximadamente unas dos cuadras y media, las mismas calles de siempre... jardines hermosos llenos de rosas; margaritas; giraoles; tulipanes; etc... frentes ornamentales de rejas blancas o negras; casas de ladrillos anaranjados, personas amables; niños y mascotas... cosas pequeñas que tinen significado para mi—luego de un paseo relajante hacia casa de Leo, llego finalmente despues de unos cincominutos a su casa. Una casa preciosa color amarillo claro, rejas negras,un amplio jardin frontal con un par de árboles frutales y un columpio con el que soliamos jugar a diario y que seguimos usando de vez en cuando, cierta cantidad de arbustos florales y un camino de adoquines en color terracota que me guia desde la reja hasta el porche de su casa adornada con un juego de muebles de jardin y una mesa de café que completa el estilo de la casa de dos plantas.
Entro como si nada y veo a Leo que ya me esta esperando en uno de los muebles del porche, inmerso en su teléfono, indemediatamente se percata de mi presencia y con una sonrisa me dice.
-¡Feliz cumpleaños, a la niña mas hermosa que existe!—dice mi mejor amigo desde el mueble de dos espacios, seguido de ello se levanta dándome un calido abrazo de oso el cual recibo con gusto.
-¡Gracias! pero no hagas un alboroto, los vecinos ya nos están viendo raro—le digo en un susurro, el solo responde con una carcajada.
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𝔏𝔞𝔷𝔬𝔰 𝔠𝔬𝔫 𝔩𝔞 𝔪𝔞𝔣𝔦𝔞
RandomCon un oscuro pasado que es mejor olvidar, intenta dar un giro a su vida con su primer año en la universidad. En el corto tiempo de paz que consiguió, con su grupo de amigos de la universidad y su mejor amigo de la infancia... Ariadna desea seguir a...