Capítulo 10

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Kim Namjoon

—Hijo, tenemos otra esposa para tí—ví a mi mamá sonriendo alegremente.

—No mamá, yo amo a Seori—dije asustado.

—Ya no importa, ella ya no nos sirve, así que te casarás otra vez, quieras o no—dijo mi papá—no me importa lo que sientas.

—No quiero, no quiero, no pueden obligarme—dije desesperado.

—Señor, despierte—dijo la señora Yoo—lamento, entrar así pero lo escuché gritando y pensé que estaba en peligro.

—Señora Yoo, debo salir del país—dije desesperado—siempre que hay esas cenas todo sale mal y todo es un desastre.

—Señor Kim, todo saldrá bien, no sé preocupe—dijo tratando de calmarme—iré a preparar el desayuno.

Me levanté y trate de no pensar que la cena de esta noche será una locura. Entré al baño, me duche, me vestí y me arregle.

—Hice sus panecillos favoritos, para que esté menos nervioso—dijo la señora Yoo.

—Gracias Yoo, es como mi segunda madre—dije con una sonrisa.

Comencé a comer mi desayuno con tranquilidad, hasta que ví que es tarde, así que salí de casa y me subí al auto para ir a la universidad a toda prisa.

Al llegar, me estacioné y fuí corriendo al salón de clases, cuando llegué vi que todos me están esperando.

—Buenos días alumnos, disculpen la demora.

Me saque la chaqueta y empecé a dictar clase, ahora le estoy explicando la función de las finanzas corporativas, sin embargo aunque trate de hacerlo sencillo ví que están confundidos.

—¿Puede volver a repetirlo?—preguntó Chaeryeong.

Volví a repetir todo desde el principio y por suerte lograron por fin entenderlo, al finalizar la clase, todos se fueron menos Seori, ella se acercó a mí.

—Namjoon, ¿podemos hablar?—preguntó.

—Pensé que tú y yo no teníamos nada de que hablar, me voy—dije serio.

—Por favor—dijo tomando mi brazo y cuando ví sus preciosos ojos no pude negarme.

—Vamos señorita Han—dije y la llevé a mi oficina.

—Estoy muy nerviosa por la cena de hoy, en todos estos años que no estuviste, ellos cada aniversario se iban de viaje, no entiendo porque ahora quieren vernos—dijo preocupada.

—Yo también estoy asustado y sé que algo traman, no quiero otra esposa—confesé.

—¿De que hablas?—preguntó.

—Tuve una pesadilla donde mis padres me conseguían otra esposa, pero yo ya no quiero casarme—expliqué.

—Deberías casarte, nunca está mal tener a alguien a tú lado, que te ame y te cuide, pero sobre todo que este contigo en los momentos difíciles—dijo y suspiro.

—Entonces cásate conmigo, eres la única mujer que quiero que me cuide y pase a mi lado en las buenas y las malas—dijo y ella me miró con algo de tristeza.

—Necesito pedirte un favor—cambio de tema—no les digas a nuestros padres que aún me amas.

—¿A qué te refieres?—pregunté.

—A que no les digas que me amas porque van a querer que volvamos a estar juntos y eso no va a suceder—explicó.

—Entiendo no quieres que arruine tú confesión, tranquila no haré nada, pero no puedo apoyarte si tus padres no  aceptan tú compromiso—dije serio.

—¿Por qué no puedes?—pregunté.

—Porque eso sería aceptar mi derrota y yo aún te amo, lo siento—dije y ella me miró decepcionada.

—No me ayudes, está bien—tomó el picaporte de la puerta para irse pero me miró antes.

—Mi amor, pase lo que pase estoy de tú de tú lado y no te dejaré sola, ¿de acuerdo?

—Gracias Nam—dijo y me abrazo, por primera vez ella se acercó a mí—pero no me vuelvas a decir mi amor.

—Lo siento, Seori—dije y envolví mis brazos alrededor de ella.

—Nam, ayer me puse a pensar y me dí cuenta que no te quiero fuera de mi vida—dijo y mi corazón se llenó de ilusión—por eso quiero seamos amigos.

—¿Amigos?—pregunté—después de lo que vivimos y todas esas noches que pasamos juntos.

—Si no quieres está bien, lo entenderé—dijo con decepción.

—Te amo tanto, que lo único que me importa es que no te vuelvas a alejar de mí, así que está bien seamos amigos—dije y ella dió un salto de emoción.

—Eres el mejor Nam, ahora tengo que ir a mi siguiente clase—dijo muy feliz.

—Que te vaya muy bien—dije y le dí un beso en la frente.

—Nos vemos en la noche—dijo y salió de mi oficina.

Ella me pidió que seamos amigos en la misma fecha de nuestro aniversario de bodas, que ironía.

Sin embargo Seori no se debe acordar que un día como hoy nos casamos, para ella fue uno de los momentos más tristes de su vida, por eso quería que nos casemos otra vez para que ella recuerde esa fecha con alegría.

Supongo que la vida es así, no podemos obtener todo lo que queremos, y ahora mi ex esposa es mi amiga, específicamente una amiga de la que estoy muy enamorado.

The way to get your love back ||Kim Namjoon||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora