Confusión del primer beso.

Capítulo II

Las luces encendidas junto con la música crearon ese ambiente cálido, a pesar del frío propio de la época. La gran sala llena de vengadores que se mezclaban con los otros invitados, charlando y disfrutando de la comida o las bebidas que eran repartidas.

Pero a pesar de estar rodeados de esa armonía, los anfitriones no estaban juntos, el omega manteniéndose siempre en la esquina cuesta a su esposo.

—¿Qué le hiciste a Steve? —Cuestiono Pepper apartando a Tony, para que no escuchen su conversación.

—¿Por qué lo dices? —preguntó Stark, tratando de mostrarse nervioso levantando una copa del mesero que pasaba por ahí.

—Para empezar, parece que te ha estado evitando— Contestó la beta.

—Es porque lo está haciendo desde la mañana— Comentó Tony recordando cómo el rubio huía de él desde que escapó en el desayuno.

—¿Se puede saber por qué? —preguntó la rubia con los brazos cruzados.

—Por el beso de Navidad— admitió el alfa luego de soltar un suspiro.

—Pensé que ya habían hablado sobre ese asunto— Comentó la rubia con algo de duda en su voz.

—Lo hice— Contestó el castaño con seguridad para luego beber un sorbo de su copa— En mi mente.

—Tony— Regaño la beta a su amigo.

—Créeme que lo que vi no fue bonito— Confesó el castaño moviendo levemente su bebida.

—Y el que ahora te está ignorando es mejor— Dudo Pepper.

—Mientras no me pida el divorcio, supongo que está bien— Contestó Anthony, bebiendo algo de su copa.

—Pues opino que deberías hablarlo con él— dijo la beta quitándole la bebida a su amigo para luego señalar al rubio.

Tony soltó una pequeña queja cuando su amiga se alejó aun teniendo la copa en sus manos, pero luego vio cómo su esposo conversaba con Bucky, parecía que estaban en un tema serio pues el rubio no tenía señales de querer sonreír.

Luego ve como el rubio se apartaba de su amigo en camino al pasillo, Tony sabía que sería el momento correcto para que ambos conversarán calmadamente. Lo vio entrar a la habitación que ambos compartían, y tomando algo de aire entró poco después del omega.

—Es mala educación que el anfitrión se retire de su fiesta— Comentó al ver como el rubio revisaba uno de los cajones del mueble cercano a la cama.

Steve por el susto soltó rápidamente la pequeña caja decorada que tenía entre manos. Se quedó un par de segundos en esa posición esperando tragar el nudo en su garganta y poder hablar, tranquilamente.

—Tú tampoco estar en la sala— Contestó Steve fallando terriblemente en evitar que su voz suena ahogada.

—¿Estás bien? —preguntó Tony notablemente preocupado, sin embargo, no recibió ninguna respuesta.

El alfa se acerca con cuidado al rubio, puede sentir en el aire su aroma de omega asustado. Cuando está lo suficientemente cerca de su omega, Steve huye de su toque, aunque aún mantiene la mirada en el castaño enviándole un mensaje confuso. El lobo de Anthony pelea entre la sensación de querer rodear a su pareja en un fuerte abrazo, pero también siente que debe dejarlo en paz. Lo único que hace es quedarse en su sitio.

—Steve, si esto es por lo del beso...— Empezó a hablar el castaño en un susurro, pero fue interrumpido por un sonoro suspiro por parte de su pareja.

—No tienes que explicar nada, Anthony— contestó Steve aun manteniendo la distancia con el alfa— Si no recuerdas este tipo de cosas tal vez sea porque no sean importantes para ti, porque yo no soy importante.