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Se quedó congelado por lo que estaba viendo sus ojos , eso no podía ser cierto ¿ Verdad ?


Dos semana después de lo sucedido Obito estaba diferente así que fue a saber que era lo que le pasaba pero jamás quiso llegar a escuchar que solo fue una apuesta .


Deidara fue y le mostró el vídeo, no estaba dispuesto a que Uchiha llegará muy lejos aunque tal vez ya haya sido demasiado tarde pero el quería enseñarle las cosas tal como son y qué no viva una mentira.


Mas apartado del lugar estaban Sasori y Obito discutiendo sobre el asunto.



- ¿ Cuándo les dirás q solo fue una apuesta ? ¿ Hasta cuándo dejaras de fingir amor hacia él ? Sabes que no se lo merece, el te ama de verdad - le dijo con el semblante serio.


- Yo . . . - obvio no sabía que responder, se dio cuenta que también se estaba enamorando del doncel, pero era mejor terminar de una vez por todas la farsa y está vez hacerlo bien.


- Por mi parte no sabrá nada y espero que soluciones esto de una vez antes de se entere por otras personas - se fue dejando al azabache solo con un sabor amargo en la boca.




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Namikaze estaba tan destrozado después de enterarse, necesitaba sacarse de las dudas aunque el vídeo decía todo no quería creer; así que fue y lo encaró, lo encontró con todos sus amigos.


- Uchiha, necesitamos hablar - Obito se sorprendió, su doncel por primera vez lo llamó por su apellido y se notaba que estaba llorando, lo pudo ver por sus ojos hinchados.


- Claro, dime ¿ Qué pasó ? - le preguntó de lo más natural posible.


- ¿ Me amas ? ¿ Sentiste alguna amor hacia mi ? O ¿ Solo jugaste conmigo así como con todos ? - no aguantó más y se puso a sollozar, la falta de respuesta le hizo darse cuenta de lo tonto que había sido.


- No, tan solo fuiste un juego, un simple reto que cayó en mis encantos - suspiro por lo siguiente que le iba a decir - No te amé en el inicio, solo quería un acostón contigo pero eras tan difícil que tuve que estar contigo, conociéndote y sin medir en mis actos caí rendido a tus pies, me enamoré de ti, no sé cómo pero pasó - le agarro del brazo al ver que se iba a ir - No te vayas, tan solo dame una oportunidad puedo remediarlo.


Le dio una cachetada que resonó por todo el lugar, tanto como los alumnos y profesores escucharon pero no querían meterse era solo problema de ellos - ¡ No me toques ! ¡ Te di todo de mi y como me pagas ! Debí suponerlo eras el mismo patán de siempre, jamás debí conocerte, nunca debi hablarte y dejarte entrar en mi vida, tan solo eras un error - lágrimas tras lágrimas salían de sus ojos, no querían parar pero lo último que dijo lo negó, no era cierto; dolido sacaba cosas que no quería decir, se dio la vuelta dispuesto a irse del lugar pero antes dijo - Espero que te vaya bien, no te odio pero no quiero que te me acerques; a pesar de todo gracias por hacerme feliz aunque sea solo un reto para ti - sin más que decir se fue no voltio hacia atrás porque sabía que volvería a caer y no quería, el valía más que eso.

EL PRECIO DE MI ERRORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora