Viraha

25

Narra Maya

En el segundo en que mis ojos chocan con los de mis compañeros, mi corazón casi salta de mi pecho. Mis dos hijos permanecen cerca de mí, asegurándose de que todos vean que no permitirán que nadie se acerque a mí.

"¡Mi amor! ¿A qué debemos el placer de verte aquí?", Me pregunta Marcus con una sonrisa suave y ojos interesados.

"Pasé la mayor parte del día con Corin y Pete en la cocina. Cuando Demetri regresó de su deber, no pudo encontrar a su compañera, fue en un frenesí para encontrarla. Cuando finalmente nos encontró sentados en la cocina, le di el resto del día libre. Él y su compañera realmente necesitaban estar el uno con el otro". Explico la situación. "Vine a informaros que permitáis que otro guardia se haga cargo de su servicio en la sala del trono por esta tarde". Termino después de respirar profundamente.

"Eso está bien, cariño. Le pediremos a Felix que cambie de turno con Demetri por hoy". Aro dice.

"Espero que sepas que lo sentimos mucho. Nos disculpamos con los guardias y les prometimos que no volvería a suceder". Caius dice en voz baja.

"Hablaremos cuando hayáis terminado las pruebas". Le respondo suavemente.

La puerta se cierra justo después de mi declaración y, por lo tanto, ya no pude ver ni escuchar a mis compañeros. Un profundo suspiro sale de mis labios antes de mirar a mis dos hijos que me miran intensamente, esperando un colapso mental.

"¿Qué tal si vamos al jardín? Un poco de aire fresco definitivamente me calmaría un poco". Digo con otro suspiro. De repente, soy recogida y rápidamente estamos parados en el jardín. "Vamos a dar un paseo", Les anuncio y lentamente empiezo a pasear por el jardín.

Paso un par de horas, hablando en voz baja con mis hijos, Pete sale y quiere saber qué debería prepararme para la cena. Después de decirle que por favor haga un plato de pasta simple, se escabulle con un pequeño rebote en su paso.

"Nunca lo vi tan feliz antes de que vinieras a Volterra. A Corin también le gustas mucho. Normalmente le tiene miedo a cada persona que conoce, pero te declaró su amiga de inmediato. No creo que te des cuenta de cuánta felicidad has traído a este aquelarre", dice Jane después de sentarse debajo de los enormes árboles.

"Si saben que pueden acudir a mí con sus problemas, espero que sepan que pueden confiar en mí. Quiero ser una reina justa y servicial." Aviso.

"Eres vista como una reina que gobierna con sabiduría y cuidado. Todo el mundo te describe como adorable y cariñosa. Alguien a quien puedes acudir en busca de ayuda y consejo en cualquier momento. En pocas palabras, todo el mundo te quiere." Pete responde a mi pregunta con una sonrisa sincera. Coloca un plato con espaguetis a la carbonara frente a mí, junto con una ensalada verde y un poco de agua con limón.

"Ya eres más de lo que todos nos atrevimos a soñar". Mis hijos dicen simultáneamente.

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Me siento en mi habitación, esperando que mis compañeros regresen de su trabajo. Al escuchar unos pasos, me incorporo un poco. Un golpe suave me hace sonreír un poco.

"Adelante", le digo en voz baja y sólo unos segundos después, mis tres compañeros se arrodillan frente a mí.

"¡Realmente lo sentimos mi amor! ¡Por favor, perdónanos!" Marcus suplica desesperado.

"Solo necesitáis comenzar a tratar mejor a los miembros de vuestro aquelarre. Un aquelarre es como una familia y la familia se mantiene unida. ¡Así que no más gruñidos!" Les digo con severidad.

"¡Haremos nuestro mejor esfuerzo!" Caius gime abrazándome con fuerza como si tuviera miedo de que me desvaneciera en el aire.

"¡Te amamos princesa! Más de lo que podríamos expresar con palabras." Caius dice suavemente acariciando mi cuello. Marcus en el otro lado, besa suavemente mis labios un par de veces más antes de comenzar a besar su mordida de apareamiento en mi cuello.