PRÓLOGO: 24 de diciembre, noche de Navidad

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Para: Amy
De: Adam

Querida Amy:

Ambos sabemos que nunca he sido el mejor en cuanto a expresar mis sentimientos, y me disculpo por eso. 

Verás. Me he dado cuenta, con el paso del tiempo, que no hay mejor manera de expresar lo que uno siente que por medio de la escritura; advertí en que, para las personas a las que nos cuesta expresar nuestros sentimientos verbalmente, un pedazo de papel junto con un lápiz son la mejor de las soluciones para expresar lo inexplicable, lo que no nos atrevemos a decir en persona, ¿comprendes?

Me arrepiento muchísimo. Mucho, mucho, mucho, no sabes cuanto, Amy!!!. Me arrepiento de muchas cosas: me arrepiento de nunca haberte dicho lo hermosa que te veías con ese delantal rojo mientras cocinabas cualquier cosa que te pidiéramos; me remuerde la conciencia de jamás haberme dicho que tu sonrisa me robaba innumerables veces el aliento, pensando lo afortunado que era de poder verla todos los días de mi vida, sin falta, y hacerte reír con cualquier broma tonta con tal de verla, para que luego así salieran a relucir los lunares preciosos de tu mejilla izquierda. Pero de lo que más me arrepiento, es de nunca haberte dicho que te amo, Amy; te amo muchísimo. Y te voy a extrañar tanto, pequeña. Dios, lo que daría por tenerte ahora, justo ahora, a mi lado, y de que hubiera un muérdago cerca de nosotros para poder demostrarte que nunca en la vida he hablado más en serio. Te amo, te amo, te amo; jamás me voy a cansar de repetirlo: Te amo, Amy, nunca, pero nunca, lo olvides.

Solo espero volverte a ver, aunque sea solo por una vez, para así poder decirte cuanto significas para mi, cara a cara, algo que debí haber hecho hace mucho, pero mucho tiempo.

No puedo creer lo estúpido que fui. Teniéndote todos los días a mi lado. Hubieron tantos momentos en que quise decírtelo, pero fui tan idiota que me dejé vencer por el miedo; el miedo a que una, una vez que te lo dijera, me respondieras que no sentías lo mismo por mi. Por favor, prométeme que, mientras yo no esté, buscaras a una persona que te haga sentir como la chica más hermosa del mundo, porque eso es lo que te mereces; no menos, sino más.

Madre está diciendo a gritos que ya nos tenemos que ir, pero, ¿a dónde, y por qué? Ni yo comprendo lo que está ocurriendo. Tengo miedo, Amy. ¿Cómo sé si los voy a volver a ver? ¿Te volveré a ver?

¿Yo...volveré?

Creo que solo el tiempo lo dirá...

Se despide, por un tiempo indeterminado, y siempre tuyo, 

Adam

Pd: Muy feliz navidad





¡Hola chic@s, aquí Anaita! Como verán, he estado todo un año planeando esta hermosa novela, y creo que ya era tiempo de atreverme a compartirla con ustedes. ¡Espero que les guste y la disfruten como yo he disfrutado escribirla!

Aún estoy viendo que días publicaré, pero lo más probable es que sea los días viernes.

Sin más que decir, tengan un hermoso día/tarde/noche, ¡y nos estaremos viendo!

Publicado: miércoles 29 de diciembre.









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