▫️ 3 ▫️

38 7 0
                                    

—¿Estas son las ocasiones en las que te digo que lo tengo que pensar? Porque no quiero hacerlo, lo sobre pensaré y lo arruinaré pero no tengo la suficiente seguridad para darte un si, Amber—respondió T/n casi llorando.

—¿De que tienes miedo?—tome sus manos—

—De todo, de esto, de nuestros padres y de que nos odien—respiró profundamente.

—Yo nunca te odiaria—la abrace fuertemente.

Conozco a T/n desde la secundaria, a base de que ibamos creciendo logramos hacer que nuestra relación sea más fuerte.

Nunca habíamos tenido tanta cercanía hasta que pasé por un momento tan fuerte que me llevó de vuelta a tomar terapia, ya tomaba terapia con anterioridad, pero la muerte de mi hermana mayor y el anterior incendio en mi departamento me obligaron a que sea algo mucho más rutinario.

T/n me brindó ayuda, tuve que regresar a la casa de mis padres y había empezado a trabajar en la disquera de un amigo. T/n me llevaba la comida o el almuerzo, cada que podía, a la disquera dónde ya la conocían muy bien.

Cuando el compañero de apartamento de T/n se casó y por ende dejo libre su espacio, ella me llamó.

—Se que no es un departamento propio pero espero que te ayude un poco—me dijó emocionada.

—Es mucha ayuda, de verdad lo aprecio—le agradecí con un abrazo.

—No es nada, te ayudaré a mudarte—me dijó correspondiendo al abrazo.

La semana siguiente así fue. Me mudé al apartamento pero me quede unos días más con mis padres porque mi madre se había enfermado, nada grave solo una leve fiebre y antes de que el mes terminará ya estaba totalmente establecida en el apartamento.

Para año nuevo, fuimos a celebrar con mis padres y para ellos fue muy lindo volver a ver a T/n, fue una cena muy sentimental, solo habían pasado 3 meses de lo de Jackie y la situación aún estaba muy sensible.

Mis padres rezaron por Jackie y era la primera vez que dejé ver mis lágrimas ante T/n.

T/n estaba de vacaciones en Corea al momento en que pasaron todas estas situaciones, así que básicamente no pudo estar conmigo en esos momentos difíciles.

—Ten—me dió un pañuelo. Te daría una servilleta pero no se donde estan.

Tomé el pañuelo y reí por lo que dijo.

—De verdad no sé—ríendo y mirando en todos lados de la mesa—

—Estan en la alacena a lado de la estufa—le señalé el mueble con una pequeña sonrisa mientras limpiaba mis ojos húmedos.

—¿Quieres que vaya por una?—estaba a punto de levantarse.

—No, está bien—puse mi mano en su pierna en signo de que vuelva a sentarse. Solo quiero que estés aquí—bajé y pose mi frente sobre la mesa.

Ella solo pudo abrazarme sobre la espalda y esperó ahí hasta que me desahogará.

Nos despidieron de mis padres y regresamos al apartamento.
Dentro del carro, durante todo el viaje, había un silencio, no había ninguna conversación de promedio, T/n no sabía que decir.

—Me gusto ver a mis padres—dije en el copiloto.

—Son muy dulces, siempre lo han sido—respondió desde el volante.

—¿Podemos parar en una tienda?—le pedí.

Compramos cosas para la semana.
Me sentía aún muy triste y quería llegar a casa, sabía que no podía seguir así o lloraría en la tienda.
T/n no tenía ni idea de que hacer para animarme, subimos al carro y me ofrecí a conducir, T/n aceptó.

One shots (Amber Liu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora