XI (Parte 2)

1 0 0
                                    

ERICK

—¿Con Luna? ¿Lo hiciste con Luna? — grito Erick a la mitad de la cafetería

—Erick no tienes que gritarlo— espetó Hércules

—Nadie quiere acostarse con Luna hermano; es como territorio prohibido— gritó Erick mientras daba vueltas alrededor donde estaban sentados Hércules y Pedro

—Erick ya cálmate— exclamó Pedro

—No me voy a calmar Pedro, mi mejor amigo hizo una estupidez—

—Hermano por favor, hazle caso a Pedro; lo hablaremos esta tarde antes del partido— dijo Hércules desesperado

—Es que yo no lo puedo creer, te lo juro que no lo puedo creer—

—Yo no puedo creer lo que paso anoche en casa de Pedro, pero yo no los juzgó ¿o sí? — exclamó Hércules molesto

—Te pasaste de la línea Hércules— interrumpió Pedro, mientras se levantaba y salía de la cafetería

—¡Pedro! No te vayas así, espera— gritó Erick mientras corría detrás de Pedro, seguido de Hércules

Pedro entró corriendo en el salón de clases, tomó su mochila y salió; chocó en la puerta con Erick que trató de no dejarlo salir por lo que Pedro susurró

—Déjame salir de aquí, tengo que ir a ensayar—

—Todavía faltan clases, no puedes irte ahora— susurró Erick justo cuando Hércules llegó detrás de él

—Tengo permiso de la directora para faltar porque tengo que terminar de ensayar toda la presentación de hoy por la tarde, así que sigue discutiendo estupideces con nuestro amigo— concluyo Pedro luego con el hombro empujo a Erick y se fue

—¿Qué le pasa a Pedro? — susurró Hércules

—No lo sé, creo que quiere terminar conmigo. Tal vez le gustó demasiado lo de anoche con Jacobo, tal vez solo son nervios por la presentación de hoy, o no sé— Erick susurró en respuesta

—¿Crees que Pedro te quiere dejar por Jacobo? — preguntó Dalila en susurros también

—No creo que ese chico termine contigo por un mesero Erick— añadió Ramón

—Eso sería casi imposible Erick, ese chico te quiere— terminó Sarai

Estaban los cinco frente a la puerta del salón viendo a Pedro alejarse por el pasillo hasta las escaleras.

—Nos pueden dar permiso, por favor, chicos— exclamó Maya

Los cinco voltearon a la vez, con cara de sorpresa y miedo al mismo tiempo.

—Tranquilos chicos, no escuchamos nada de lo que ustedes se estaban secreteando; así que dejen que salgamos de aquí por favor, porque si llegamos tarde a otro ensayo nos van a regañar— explicó Jaime

—Y por lo molestó que se veía Pedro cuando salió de aquí definitivamente nos van a regañar muy feo si no salimos de aquí ahora mismo— concluyó Maya mientras hacía un ademán con la mano para que los chicos se movieran, luego se fueron

—Esperen, ¿y si vamos al ensayo? Tal vez ahí podamos entender un poco más de lo que le pasa a Pedro— propuso Sarai

—Si hay que hacer eso, pero debemos entrar en silencio y sentarnos hasta el fondo; hay que observarlo en su hábitat natural— dijo Hércules

—Parece que el héroe griego por fin aprendió algo en la clase de biología— exclamó Ramón

—Ya te dije que no me digas así Ramón— respondió Hércules

Generación - El Asesinato (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora