𝖑𝖆 𝖇𝖊𝖑𝖑𝖆 𝓎 𝖑𝖆... 𝕭𝖊𝖑𝖑𝖆; ʜᴇʀᴍɪᴏɴᴇ ɢʀᴀɴɢᴇʀ

cap 3

El castillo estaba iluminado como si esperara la llegada de un invitado importante, pero en los patios y en el salón no había alma viva. Belle con notable sorpresa admiraba el encantador lugar.

Dejó a Tom en el jardín,
el caballo estaba interesado en comer un poco de hierba.

La castaña caminaba con cuidado por el interior del castillo, el sonido de sus pasos resuena contra el mármol translúcido.

"¡Mamá! ¡Hay una chica en el castillo!"

"Teddy, ¿cuántas veces te he dicho que no mientas?"

"¡Pero si hay una chica!"

"¡Abuela! ¡Abuela, hay una chica! ¡Tía! ¡Hay una chica en el castillo!"

"Teddy, si no paras, te meteré en el armario"

"¡Por las tetas de Morgana, Teddy tiene razón Dora!"

El reloj mira desde el segundo piso a la chica, la castaña miraba a su alrededor con confusión. Andy se vuelve hacia su hija y suena el despertador para la emoción. Dora miraba a su madre con diversión, agradeciendo al cielo este milagro. Quizás todo podría volver a ser como antes. El candelabro, o precisamente su tía Cissy, movía los lados de los brazos, accediendo a una vela involuntariamente.

"¿No te das cuenta, Andy? ¡La chica que romperá este hechizo y finalmente llegada! ¡Seremos libres, puta!"

"¿Quién está ahí arriba? ¡Papá Papá! ¿Eres tú? ¿Hay alguien?"

La dulce voz de la chica resonaba en la habitación, Cissy se mueve hacia las escaleras por la decepción de su hermana.

"¿Adónde vas?" Susurra  Andy, saltando hacia su hermana.

"Bajo las escaleras, ¿no lo ves?"

***

Mientras tanto Belle vislumbra una escalera de mármol de caracol y levantando los bordes del vestido, comienza a subir las escaleras.

"Papá?"

"Belle?"

La respuesta de su padre le hizo incrementar el paso, y al caminar los últimos metros vio la figura de su padre encerrado en una celda. Los ojos de la castaña se ensanchan para la sorpresa y corrió para ayudar a su padre.

"Papá, tus manos están congeladas, qué... ¿Qué demonios ha pasado?"

Hermione tomó las manos de su padre y las apretó con preocupación, los ojos de Severus miraban con miedo a su preciosa hija. Belle apoya el peso contra las barras de hierro, tratando de acercarse a su padre.

"¡Cariño, voy a estar bien, por favor corre! Ella es peligrosa y puede hacerte daño, por favor sálvate..."

El ruido de los pasos en la distancia, hizo congelar la sangre a Belle, la chica mira alrededor y agarra lo primero que vio: un palo.
No era mucho pero mejor que nada, ¿verdad? Se dirige hacia el ruido y apunta el arma hacia la persona que encerró a su padre.

"¿Quién está ahí?"

La voz de la chica temblaba un poco, preparándose para la pelea.

"¿Quién es usted?"

"Quién es usted?"

Responde con sarcasmo una voz femenina, dos tonos más áspero de lo normal.

"¡Vine por mi padre!"

"Su padre es un ladrón..."

Sigue bajando las escaleras, el tono de voz de la mujer era frío como el hielo. Belle traga con nerviosismo la saliva.