気持ち Kimochi ➶ Muzan Kibutsuji

9➹➶

Mientras  Kame y su madre dormían decidí ir a explorar la casa, por suerte Muzan se había ido así que no pasaría nada. Primero fui a ver el jardín en el que antes me encontraba, era bastante amplio y muy bonito, en el porche habían algunos asientos, una barbacoa, un gran parasol y un pequeño columpio. 

Me senté en uno de los asientos mientras observaba la hermosa luz de la luna, no entendía porque, pero cuanto más me concentraba en la luna más pensaba en Muzan, por alguna razón la pálida luz de la luna me recordaba a la suave piel de Muzan. 

Cuando intentaba quitarme a Muzan de la cabeza recordé la vez que me cogió del cuello y tanto me gusto.

- ¡Masoquista! - Susurre - ¿Quieres dejar de pensar en eso? - Volví a susurrar mientras me daba un golpe en la cabeza. - Mejor iré a seguir viendo la casa. - Pensé.

Volví a entrar a la casa y empece a caminar por los pasillos viendo los hermosos cuadros que estaban colgados en la pared, uno de ellos era un retrato de Muzan y su esposa y al lado uno de Kame. Habían tres habitaciones, la de invitados, la de Kame y la de Muzan y su esposa; dos cuartos de baño, un salón bastante grande y una amplia cocina.

Después de haber visto toda la casa decidí ir a comer algo. Me fui lejos de la casa y por suerte para mí encontré a un señor paseando tranquilamente por la calle.

- Señor, ¿No sabe que no debería de estar afuera a estas horas? - Le dije antes de arrancarle el cuello y empezar a tomarme su sangre.

(Dia siguiente)

Estaba sentada en el sofá del salón mientras miraba las horas pasar, ya que no podía hacer mucho más, afuera hacia mucho sol y como me han "acogido" aquí, no puedo irme como si nada y menos aun con el sol que hace.

- Buenos días _______. - Escuche decir a Kame detrás de mí.

- Buenos dias Kame. - Le sonreí.

- Oye, ¿quieres salir a jugar conmigo? - pregunto muy ilusionada - Hoy hace muy buen día. -

- Mierda. - pensé y decidí inventarme una excusa - Es que no me encuentro bien, así que mejor me quedo aquí. - Mentí con una sonrisa para que la pequeña me crea.

- Venga solo un ratito - Insistió - No te pasara nada.-

- Venga ve a jugar un rato con ella. - Dijo Muzan apareciendo al lado mío, haciendo que me sobresaltara. - no te pasara nada ¿no? - Dijo con una sonrisa malvada.

- Te odio - Dije en voz baja. 

No quería salir, pero recordé que ayer cuando salí a ver el jardín vi que había un parasol muy grande, así que seguro que eso estaría tapando el solo y podría salir a fuera un rato. 

- Vale, salgamos un ratito pero no mucho. - le dije a la pequeña mientras Muzan me miraba con una ceja levantada.

- ¿Porque no vienes tú también? - Le dije a Muzan de espaldas.

- No puedo, tengo trabajo - Me respondió.

- Ya, claro. - Susurre.

Después de jugar un rato con Kame, cuando vi que el parasol dentro de poco no taparía el sol decidí entrar a dentro con Kame.

- Venga ya hemos jugado un rato vayamos a dentro, ¿vale? - Le pregunte amablemente.

- Vale. - Contesto. - A sido muy divertido jugar contigo. - Dijo muy sonriente.

- Lo mismo digo. - Le sonreí.

Cuando entramos a la casa Kame fue a comer algo y después se puso ha hacer sus deberes de la escuela, y otra vez volvía a estar sentada en el sofá viendo las horas pasar, aunque realmente fue muy poco tiempo el que estuve jugando con Kame, fue muy divertido para mí y espero que también para ella.

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Si gente, cambie el nombre y la portada de la historia, espero que no les moleste.

Y no olviden dar estrellita ni comentar, que no muerdo.

Me despido.

Bye.