Capítulo 2

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Buenas!!! Aquí estamos ya en el segundo capítulo. Dónde Loki se seguirá abriendo poco a poco y sobre todo reencontrándose con él mismo.

Tras su primer día el moreno creía que no se sentiría tan nervioso como la primera vez pero no era así. De hecho estaba aún más nervioso porque Charles y tenía hilos de dónde tirar... no quería hablar de sus padres más ni de aquel sentimiento... pero sabía que a medida que pasaba las semanas al final tocarían el tema.

-¿Cuánto tiempo piensas esperar detrás de la puerta hasta que te decidas a llamar?- Preguntó el castaño que lo miraba con una sonrisa cálida.

Loki soltó el aire que había estado reteniendo y forzó una sonrisa amable.

-No tienes que sonreír si no lo sientes así, aquí no venimos a fingir- Aquellas palabras le aliviaron un poco.

Ambos estaban otra vez, sentados como el día anterior. Loki se fijó en el exterior por la gran ventana. Estaba el día nublado a pesar de que ya estaban dejando el frío atrás y cada vez los días eran más largos y soleados.

-¿Cómo has pasado la semana?- preguntó

-Igual que la anterior- su voz sonó amarga- Me está costando dormir.

-Esperemos que eso se vaya solucionando. Loki- su rostro era sereno.- ¿Cómo es la relación con tus padres? Recuerda que le dije que hoy hablaríamos de eso...

Cerró sus ojos intentando encontrar las fuerzas- No muy bien- susurró.

-¿Ha vuelto a ver a su madre desde que se fue?

Loki frunció el ceño.- No lo endulce. No "Se fue", me abandonó- dijo cortantemente.- No, no he vuelto a saber de ella, ni siquiera sé si sigue viva- su rostro era serio como el de una estatua y sus ojos chispeaban por el rencor. Apoyó su codo en el reposabrazos del sillón y después su mentón en la mano.

-¿Y tu padre?- intentó mantener la compostura.

-Mi padre me odia- sus palabras sonaron vacías.- Para él era un estorbo así que me mandó a un internado durante mi infancia y después a otro durante mi adolescencia, pasaba la mayoría de las vacaciones allí, menos en verano. Aunque él nunca estaba en casa- dijo sin más.

Charles anotó algo y decidió hablar al ver que el moreno no continuaba- Retomaremos el tema de sus padres cuando se encuentre más dispuesto a hablar sobre ellos.- Revisó sus notas.- La semana pasada hablaste sobre que volviste con Tony ¿no?- Loki asintió

Retiré mi mano de la de Tony, con suavidad. Nos encontrábamos en una discreta cafetería a la que solíamos ir. Tienen buen café y una buena música. Me recorté en la silla y crucé mis brazos, dejando que el café que tenía delante de mí se enfriara. Me fijé en el castaño quien no había parado de parlotear animadamente desde que nos vimos.

Había cortado casi todo sus intentos de muestras de cariño, al fin y al cabo estaban en un sitio público y el millonario no era desconocido para nadie.

-¿Me estás pidiendo que enchufe a ese amigo tuyo en la empresa?- Preguntó el castaño, mirándome por encima de sus gafas de sol. Que a Loki le parecía absurdo que las llevase dentro del local.

-No, te estoy pidiendo que le hagáis una entrevista. Sin compromisos. Si nos os encaja pues anda- Me miré mis uñas, mostrando indiferencia.

Noté como su pierna empezó a rozar la mía, de manera provocativa.- Si lo hago... ¿Me perdonarás por lo del otro día? – Ahí estaba, el hombre de negocios.

Fruncí el labio y finalmente suspiré. Me acerqué un poco más a la mesa y dibujé en mi rostro una sonrisa coqueta- Podría planteármelo.- Coloqué mi mano cerca de la suya y tamborileé la mesa con mis finos dedos- Pero no me vuelvas a enviar rosas...las odios.

El amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora