Matt Espinosa

3.5K 108 13
                                    

-Al fin podemos disfrutar de la playa!.- Dije alegremente a mis amigas.-

-Ya la estaba extrañando, necesitaba las vacaciones urgentemente.- Dijo kait mi mejor amiga.-

El curso ya habia terminado y por fin podiamos disfrutar de nuestro verano. Habiamos venido de vacaciones por dos semanas a Australia, queria playa, fiesta y chicos muchos chicos.
Estabamos tomando sol tranquilas hasta que Julie hablo.

-CHICAS MIREN.- Grito y todas levantamos la vista para ver lo que pasaba.-

Un grupo de chicos, uno mas bueno que el otro estaban a unos metros de nosotras jugando al voley.

-Madre mia , pero que bombones.- Dijo Kait.-

-Kait sonas como mi abuela.- Le dije riendo.- Pero si, son bastaaaante lindos.-

-Me dieron ganas de jugar al voley.- Dijo Ann.-

Ann se levanto y fue hacia los chicos, ella era asi: Segura y directa. Fue y se puso a hablar con un chico moreno alto y fornido. A los minutos volvio hacia nosotras con una notica.

-Vamos chicas, a jugar.-

Nos acercamos y nos dividimos en equipos mixtos. Los chicos eran muy divertidos y no me senti incomoda, pero habia un chico que me hacia poner nerviosa. Estaba en el equipo contrario, tenia el pelo de un tono castaño tan claro que parecia rubio, no era muy alto pero tampoco bajo. Sus ojos al sol parecian de un color avellana que me encantaban. Tenia algunos lunares en su cara y cuando vio que lo miraba tan fijamente sonrio dejandome ver una perfecta sonrisa.

Estuvimos jugando y mi equipo gano, estabamos pasandola muy bien y decidimos ir a comer con estos chicos. Llegamos a un restaurant de la playa y nos sentamos.

-Entonces de vacaciones?.- Pregunto un chico rubio creo que Jack.-

-Sip, queriamos disfrutar de nuestro verano y que mejor manera que en Australia.- Conteste alegre.-

-Viva Australia!.- Gritanos todos a la vez mientras chocabamos nuestros vasos.-

Seguimos riendo y hablando por unas horas hasta que decidimos volver a la playa. El chico de ojos lindos y yo no para amos de mirarnos y yo sentia que mi corazon iba a explotar, no sabia porque actuaba tan raro.
Los chicos se quedaron jugando y riendo en la playa pero yo decidi ir a caminar un rato.

-De todos los lugares en los que he estado, Australia es uno de los mas lindos.- Dijo alguien detras mio haciendo que me sobresaltara.- Oh perdon no quise asustarte.- Era el.-

-No, esta bien.- Dije dedicandole una sonrisa.- No pasa nada.-

-Soy Matthew, pero decime Matt.- Me tendio la mano.-

-Soy Martina, pero decime Marti.- Le tome la mano y una descarga atravesó mi cuerpo.-

Nos quedamos asi mirando nuestras manos que aun seguian juntas, ninguno parecia querer soltarlas. Pero decidi separarme y sentarme en la arena, le dedique una sonrisa indicando que se acercara.
Nos quedamos hablando y todo rastro de verguenza desaparecio entre nosotros. Matt era una persona muy divertida, no podia parar de reir y mi panza ya estaba doliendo, era genial.

-Matt en serio, no cuentes mas cosas de tu vida que mi panza ya duele de tanto reir.- Le conteste mientras agarraba mi panza.-

-Pero que aburrida resultaste ser Martina!.- Dijo bufando.-

-Ey bobo, no me digas Martina.- Le dije haciendome la ofendida mientras me levantaba.- Chau.-

-Marti! Marti, espera!.- Me grito mientras yo me alejaba, no me habia enojado pero queria hacerlo sufrir un poco.- Ey linda no te enojes.- Dijo tomandome la mano y dandome vuelta.- Parecia apenado y yo no aguante mas y estalle en risas.-

-Matt no puedo creer que te la creyeras.- Dije riendo mientras agarraba sus mejillas.- Iluso.-

-Ja ja, pero que graciosa sos.- Me contesto revolviendo mi pelo.-

-Eso ya lo se.- Sonrei y segui molestandolo.- Asi que te parezco linda.- Dije haciendole ojitos.-

-Yo no dije eso.- Dijo el ahora alejandose.-

-Mentiroso! Me llamaste linda.-

-Eso es lo que vos pensas, en realidad te dije fea.-

-Fea? Asi que te parezco fea.- Dije ahora si enojada.- Gracias.- Me di media vuelta alejandome pero Matt me abrazo por atras.-

-Marti sos una de las chicas mas lindas que conoci en mi vida. Tenes un cuerpo impresionante y no veo la hora de estar con vos.- Susurro en mi oido y yo me quede dura.- Ahora no vas a decir nada?.- me dio vuelta y pego su cuerpo al mio.-

-Entonces no pierdas el tiempo.-

Me levato y rodee su cintura con mis piernas, y ahi me beso. Un beso que prendio todo lo que llevaba apagado en mi hace tiempo, nadie me habia besado como el en mi vida.
Me recosto sobre la arena, el sobre mi sin poner todo su peso en mi. Sus manos viajaban por todo mi cuerpo y yo gemia de placer, tome su remera y la saque rapidamente, dejandolo solo en maya. Sus besos se repartian por mi cuerpo y se sentia en el cielo.

-No te pienso perder de vista estas dos semanas.- Me dijo con voz ronca.-

-No lo vas a hacer.- Conteste volviendo a unir nuestros labios.-

Shots ( Magcon )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora