Doble Dolor, Doble Placer

Tu eres mío-mía

"No puedo esperar hasta pasado mañana, Can, 

cuando pasaré la noche aquí otra vez "

"¿En serio?"

Él se sintió un poco decepcionado de que ella no 

se quedara esta noche,

pero el corazón de Can se agitó al escucharla decir

pasaría la noche pasado mañana.

Cuando ella pronunció sus siguientes palabras

el aleteo se detuvo abruptamente.

"Lo hago, será sin ti,

y como bonificación,

voy a dormir..................

con otro hombre en tu cama!"

No solo el aleteo en su corazón se detuvo abruptamente

también su caminar hacia la ducha se detuvo abruptamente.

Can no dijo nada, solo la miró,

mientras tanto, Civan se acercó a ellos y les acarició una vez

contra las piernas de Can antes de que el gato regresara a la casa.

Sanem miró a Can con una leve sonrisa traviesa en su rostro,

sin embargo, su aliento se quedó atrapado en su garganta

cuando miró a Can a los ojos.

En el momento en que la miró a los ojos, 

Can vio ese destello de burla.

Su lado celoso, su lado posesivo, su lado amoroso se activó

y ahora esa pequeña burlona iba a obtener lo que se merecía, a él

¡Todo de él!

Sanem estaba a punto de descubrir que ella no era la única

que podía hablar con sus ojos.

Porque los ojos de Can se llenaron de celos, posesividad, fuego

y él volvió a caminar hacia la ducha en completo silencio.

Sanem pensó que él se enojaría, comenzaría a gritar o interrogarla.

¡Nada de todo lo anterior!

La mirada que él mantuvo sobre ella junto 

con su fuerte agarre en su cuerpo,

hizo que a ella le hormigueara la piel.

Cuando estaban en la ducha, él bajó el cuerpo de ella lentamente,

poniéndola de pie con cuidado.

Él empezó a desvestirse, sin apartar la mirada de ella,

hipnotizándola con su mirada para que se quedase dónde estaba,

luego cuando estaba desnudo,

¡Uuufff, ese cuerpo suyo!