¿Culpables? // Jacob Barber

19

~T/n~

5 días antes del juicio.

La tormenta se estaba intensificando, desperté por culpa de ella luego de unas horas de haberme dormido. Estaba tapada con una manta, supuse que fué Laurie al ver que nos quedamos dormidos en el sillón. Prendí el televisor para tener una idea de la hora, ya que con las nubes grises no podía aproximarle. Eran las nueve de la mañana, definitivamente no dormí las horas necesarias para estar de buen humor.
Aunque con todo lo que está pasando quien podría estarlo.
Me levanté silenciosamente, sin despertar a Jacob ni a Kira, quienes estaban en un sueño profundo. Subí a la habitación en la que estaba mi madre para fijarme si estaba despierta, y afortunadamente lo estaba, leyendo uno de mis libros.

-¿Que haces despierta tan temprano?- Pregunta sacándose los lentes que usa para ver de cerca

-La lluvia me despertó- Dije acostándome junto a ella en la cama- ¿Tu pudiste dormir?

-Si, un poco- Supe que estaba mintiendo cuando ví que leyó 129 páginas del libro

-¿Dormiste en el sillón?

-Si, me quedé dormida mirando Shrek

-¿Jacob también durmió ahí abajo?

-Si.. junto a Kira- Suspiró cansada

-¿Por qué no tratas de dormir un poco?

-No tengo sueño

-Pero debes dormir un poco mas

-Si pudiera lo haría

-Cierra los ojos y verás que podrás dormir-Rodeé los ojos y luego de unos segundos los cerré.

La lluvia me despertó otra vez. No podía creer que me había dormido y que mi mamá tenía razón. Ella ya no estaba en el cuarto, sí que bajé las escaleras y escuchaba ruido en la cocina.

-Por fin despertaste- Dice Jacob cerrando la heladera con una bote de leche en la mano, el fué primero en verme

-Viste que te dije que podías dormir un poco mas- Dice mi mamá mostrando que tenía razón

-Era un poco nomás- El tono sarcástico de Jacob me hizo confundir un poco

-¿Que hora es?- Pregunté con la voz ronca, aún seguía un poco dormida

-Faltan cinco para las tres- Dice Laurie mirando hacia el reloj de la cocina

-¿Las tres de la tarde? ¿Por qué no me despertaron?

-Fuí a levantarte varias veces.. me pedías 5 minutos mas- Dice mamá volviendo su vista a mi libro, Jacob rió y se acercó a mí con un vaso de café con leche

-Gracias- El solo asintió y se dirigió hacia su habitación. Sabía mis gustos, me vió preparando café un millón de veces- Laurie, ¿puedo tomar una ducha? quiero sacarme este olor de prisión

-Claro, el de su habitación tiene un baño

-Gracias- Sonreí un poco y volví a la habitación

No tardé mucho en la ducha, máximo habrán sido unos diez minutos. Generalmente me tomaba mas de eso.
Volví a la habitación envuelta con una toalla y empecé a buscar ropa que había traído mi mamá en una de las mochilas. Todos eran pijamas, a excepción de un conjunto formal para el dia tan esperado. Me coloqué un pantalón rojo a cuadros y una camiseta blanca, no volvería a ponerme el de estrellas dentro de esta casa. Por curiosidad, abrí la otra mochila y me encontré con unos libros, le agradecí mentalmente a mi mamá ya que como no tenía celular, estaría muy aburrida. En el fondo había algo muy suave, traté de sacarlo sin tirar todos los libros y la nostalgia se asomó junto al mono de peluche que Jacob me había regalado el día mi cumpleaños, también el día que nos habíamos vuelto novios.
¿Todo era fingido?
¿Alguna vez tuvo sentimientos hacia mi?
Sentada en la cama, empecé a debatir estas preguntas en mi mente.
Ese mismo día, cuando le había dicho que no éramos nada, realmente ví tristeza en sus ojos, al punto que el evitaba mi mirada para ocultarla, y no creo que haya sido por el dólar. Yo lo había decepcionado, humillado al decir que no sentía lo mismo.
Pero cuando lo abracé, ese pequeño momento, lo hizo feliz, yo lo hice feliz, y nunca antes lo había visto de esa manera.
Al terminar de alistarme, salí de la habitación para dirigirme a la suya, dudé varios segundos antes de tocar la puerta.

-¡Adelante!- Se escucha desde adentro

-Soy yo- Me asomé un poco tímida por la puerta. Al verme, se enderezó sobre la puff por la sorpresa.

-Hola dormilona- Reí agachando la cabeza- ¿Pasó algo?

-No, amm..- Dudaba bastante, por lo que el levantó una ceja divertido- ¿Quieres.. ver una película?- El sonrió con sorpresa.

-¿Lo dices en serio?

-Pero si quieres seguir jugando videojuegos está bien..

-Estaré abajo en unos minutos- Dijo sin parar de sonreír, lo cual a mi me generó un poco de emoción su reacción

-Está bien- Sonreí unos segundos y cerré la puerta. Me quedé allí estática, el había dejado los videojuegos para mirar una película conmigo.

-¿Quieres que prepare palomitas?- Llega luego de unos minutos

-Yo quiero palomitas dulces- Andy entra a la sala

-¿Te quedarás a ver la película?- Dice Jacob confundido

-Un día así de tormenta se merece una buena maratón de Harry Potter. ¿Qué opinas, T/n?- Reí por el tono divertido en el que lo dijo- Hay que olvidarse de los problemas del exterior por un rato

-Estoy de acuerdo- Digo riendo

-Está bien- Jacob se ve desanimado y hacemos contacto visual por unos segundos, claramente no quería que su papá se quede en el medio de los dos- Dulces y para Hailey, salados- Sonreí al ver que sí prestaba atención a mis gustos, el me devolvió la misma sonrisa retrocediendo un poco para después darse la vuela e ir a la cocina

-Por cierto, ¿donde está mamá y Laurie?

-Están en nuestra habitación, querían hablar un rato, ya estarán por bajar

-Está bien.. ¿puedo preguntar sobre el allanamiento de Patz?

-Hay que olvidarse de los problemas del exterior dije

-Si, perdón- Ese tema volvió a mi cabeza, no me dejó tranquila hasta que Jacob volvió con dos platos llenos de palomitas

-Yo quiero saladas- Dice dándome el plato con palomitas saladas

-Siéntate en el medio entonces- Dice Andy haciendo un lugar en el sillón

-¿Si o si hay que ver Harry Potter?- Se quejó un poco

-El día lo pide- Respondí