Moon: La Verdad de la Inconmovible - El Legado de Mewni Vol. 2

Capítulo 1 "Un Cumpleaños Especial"

Era una mañana radiante en Mewni, el sol brillaba con alegría y la luz tocaba todo a su paso, aquellos rayos amarillos entraron por una gran ventana, la cual pertenecía a una enorme habitación elegante, esa luz de día daba a una gran cama con sábanas de seda azules y almohadas blancas, esponjosas y bordadas.

No había nadie en la cama puesto que quien descansaba ahí ya se había levantado, estaba en su tocador cepillando su largo y hermoso cabello azulado, movía su peine de piedras preciosas con cierta elegancia mirando al espejo el reflejo de su joven rostro pálido, lo que más resaltaba en su cara eran sus diamantes morados en cada una de sus mejillas, una característica propia de la familia Butterfly.

La princesa tarareaba una bella melodía mientras arreglaba su gran cantidad de pelo, pero fue interrumpida por unos golpes en la puerta —Princesa Moon, su madre está esperándola en el campo de batalla, ¿está lista? — le preguntó una voz femenina desde fuera de su habitación.

—¡Sí! Salgo en un minuto— dijo Moon dejando el cepillo y tomando su corona para después colocarla sobre su cabeza, fue entonces que salió a encontrándose con una mewmana esperando por ella en el pasillo.

—Buenos días princesa— le saludó la chica haciendo una reverencia. 

—Buenos días, Angela ¿qué te he dicho sobre decirme princesa? — Moon le hizo una seña a Angela para que se levantara. 

—Pero el protocolo dice...— Angela fue interrumpida por el dedo de Moon. 

—Ese protocolo es viejo, mi madre apenas lo sigue, ¿cómo vas a llamarme?

—Buenos días, Moon... feliz cumpleaños— corrigió Angela haciendo que Moon soltara una sonrisa. 

—Así me gusta— finalizó Moon y ambas empezaron a caminar por los largos pasillos del castillo hasta llegar a la salida donde las esperaba un carruaje.

Ambas subieron y el chófer echó a andar al corcel, pasaron un par de minutos atravesando el pueblo hasta que llegaron al campamento mewmano, Comet estaba en la entrada entusiasmada por ver a su hija en este día especial, estaba acompañada de un par de guardias custodiándola.

Moon y su dama de compañía bajaron del carruaje, Angela hizo una reverencia al ver a la reina —buenos días majestad— pronunció con respeto. 

—Buenos días, Angela, puedes retirarte querida— replicó Comet cariñosamente a la asistente de su hija.

Angela se despidió de Moon con la mirada, subió al carruaje y este se fue, la princesa quedó con su madre y el guardia. 

—Hola mamá— Moon se acercó a Comet y le dio un abrazo, hace tiempo que no convivían mucho, Moon anhelaba demasiado ese tiempo con su madre y al fin lo tenía. 

—Hola hija, me da mucho gusto verte en este día tan importante, hoy cumples catorce años— Comet guio a su hija hasta una parte libre del campo. 

—No es para tanto, sólo son catorce años, nada especial— dijo Moon caminando al lado de su madre y detrás de ellas caminaba el guardia. 

—Créeme Moon, los catorce años son muy importantes en nuestra familia.

Llegaron a una carpa donde les esperaba una pequeña mesa con comida. Mientras los guardias las custodiaban a cierta distancia, madre e hija desayunaban galletas con carne mientras conversaban de cómo a Moon le estaba yendo bastante bien con sus clases y cómo Comet trabajaba con sus soldados, fue un tiempo de calidad entre ambas que la joven princesa extrañaba demasiado.

La malo de ese último año es que Comet estuvo muy ocupada con el tema de los monstruos e intentar un pacto de paz con ellos y con los rebeldes que seguían negándose, por lo que ya no estuvo tan seguido en el castillo y mucho menos tuvo la oportunidad de cocinar para su hija pero al fin Moon volvió a probar algo hecho por su progenitora, la comida del castillo era buena pero lo que Comet creaba estaba a otro nivel, Comet podía hacer que hasta la comida enlatada fuera lo mejor del mundo.