Asexual Boy [TCF]

Capítulo veintiuno

Bud estaba sentado como una estatua, sin mirar a otro lado que no fuera la mesa, sintiendo un enorme terror hacia el mayordomo que se encontraba sirviendo su desayuno. Cale los observaba, tomando nuevamente aquella horrorosa limonada que le había servido Ron cuando trajo el desayuno de Bud.

Una vez que Ron abandonó el lugar, Bud largó una fuerte bocanada de aire.

--Dios, hombre --Su voz estaba exaltada mientras miraba a la puerta-- Tu mayordomo es jodidamente aterrador, ni siquiera se le escucha cuando se va --Comentó mientras sentía escalofríos.

--Ron es alguien realmente vicioso --Concordó, satisfecho en cierta manera de encontrar a alguien lo notara, ni sus hijos, Choi Han y los empleados lo veían de esa manera, lo tomaban como algo natural y cotidiano, pero para él era jodidamente aterrador.

--Eso es jodidamente cierto --Bud suspiró antes de comenzar a desayunar-- Por cierto --Cale dirigió su mirada nuevamente a él-- ¿Pasó algo con Choi Han? 

--¿Qué? 

--Si --Bud asintió antes de tomar un poco de su café-- Cuando me vio en la sala de espera se veía realmente molesto de verme, ¿le hice algo o ustedes se pelearon? --Cale suspiró.

--No tengo idea de eso, no se veía realmente molesto cuando me informó de tu visita --Confesó intentando terminar la desagradable limonada, sintiendo fuertes deseos de llorar con cada pequeño sorbo que daba.

Algo que Bud se dio cuenta.

--¿No te gusta la limonada? --Se animó a preguntar, era una persona tanto curiosa como chismosa, por lo que su curiosidad pudo con él.

--Aborrezco las cosas agrias --Confesó con cansancio-- Prefiero las cosas dulces --Agregó como si fuera algo menor, pero Bud asintió simplemente.

--Yo soy más de lo amargo, por eso amo la cerveza y el licor --Comentó distraídamente mientras continuaba comiendo su desayuno-- Espera, entonces ¿Por qué tomas la limonada si la odias? --Bud frunció el ceño, él no podría comer o tomar algo que le desagrada. No importa cuanto lo intentara.

--¿Le dirías que "no" a algo que Ron te dé? --Preguntó levantando una de sus cejas. Bud tragó en seco ante lo dicho, entiendo completamente su punto.

--No, tienes razón --Cedió, incómodo al recordar al mayordomo. 

Su instinto le decía que era alguien extremadamente vicioso, no tenía dudas de eso tampoco. Por lo que le era fácil entender el porqué Cale tomaba esa limonada a pesar de odiarla.

--Mis condolencias, hombre --Murmuró antes de terminar por completo su café.

--Si.

El sonido de una notificación interrumpió en la habitación, naturalmente, ambos sacaron sus celulares para comprobar de cual provenía, siendo del de Cale.

--¿Qué te llegó? --Bud no pudo ocultar su curiosidad, pero al ver como Cale suspiraba se imaginaba que podía ser algo molesto, siempre suspira cuando está molesto.

"Algo referente a sus hijos no puede ser" Pensó por sus adentros, estaba seguro que la única cosa que no le molestaba en lo absoluto a Cale eran sus hijos.

--Información inútil --Respondió con fastidio. 

--¿Comprendo? --Bud no podía entender a que se refería con eso, pero no tenía de otra que aceptarlo.

Cale se levantó de su lugar, confundiendo a Bud de su actitud.

--¿A dónde vas mi amigo? --Preguntó levantándose él también, listo para seguirlo. 

--A mi oficina --Respondió, más tranquilo que hace unos momentos. Bud asintió, siguiéndolo de cerca.

No se iba a alejar de Cale por nada del mundo, Choi Han parecía molesto con su presencia y el mayordomo era demasiado tenebroso para él, su único refugio eran los niños y Cale, por lo que se iba a aferrar a sus salvavidas a como diera lugar hasta que abandonara la casa de Cale.

--Voy contigo --Anunció rápidamente.

--Haz lo que quieras --Le respondió sin importarle tanto. Bud sonrió ante eso.

Cale comenzó a caminar, yendo directo a su oficina para ordenar unas cosas que necesitaba entregar a Alberu, con Bud caminando mientras comentaba constantemente cosas sobre el estilo de su hogar, así como del estilo de vida tan relajado que llevaba.

"Es demasiado hablador" Pensó por sus adentros, conteniendo el suspiro que ansiaba salir de sus labios.

--¿Por qué vamos a tu oficina? --Preguntó mirándolo ahora, caminando a su par.

--Necesito ordenar unos informes --Respondió con desinterés mientras ingresaba a su oficina, agradecía de tener esa habitación tan cerca del comedor, o se volvería loco escuchando a Bud parlotear más tiempo.

--Wooo --Bud no pudo ocultar su sorpresa de ver una oficina tan pulcra y ordenada, su oficina era un desastre al derecho y al revés, con papeles por todos lados y basura por el otro y dos sillas que servían para colocar libros y carpetas. 

"Debo empezar a ser más organizado" Se recrimina por dentro, en verdad podía cambiar mucho un lugar si estaba bien organizado.

Mientras Bud observaba el orden que tenía la habitación, Cale se sentó en su escritorio y comenzó a sacar las pequeñas pilas de informes que debía entregar, estaban un poco mal organizados.

Naturalmente, mientras Cale dividía los informes por fechas, Bud se colocó detrás de él para verlo.

--Son muchos informes --Comentó al ver las dos pequeñas pilas que debía organizar el contrario.

--Sí --Respondió sin prestarle atención, dividiendo las  cosas como si fuera una actividad automática.

--Haber, te ayudo --Dijo importándole poco invadir su espacio personal y comenzar a ayudarlo mientras Cale sólo suspiraba.

--Haz lo que quieras --Respondió, continuando con su pila, Bud se sentó en uno de los pequeños sillones de la habitación y empezó a organizarlos sobre la pequeña mesa.

Ambos estaban en silencio trabajando, algo que Cale agradeció profundamente, adoraba el silencio, a menos que se tratara de sus hijos quienes hablaran claramente.

"Es tolerable cuando se comporta así" Pensó Cale por su parte, observando brevemente como Bud trabajaba de manera tan diligente, sino lo conociera, lo volvería su secretario, era extrovertido, muy perspicaz y eficiente.

Lastima que lo conoce, y precisamente no lo tolera a menos que se mantuviera callado.

Suspiró nuevamente, ya había perdido la cuenta de cuantas veces había suspirado con este chico cerca suyo, y continuó organizando sus informes, al parecer eran todos ensayos de fin de mes del último año de cada departamento. 

"Demasiado molesto".