★ 5 ; idiota

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—¿Le vas a hablar?—Preguntó Sunghoon robandole una papa a Jay quien le dio un manotazo para que dejara de hacerlo.

—Sí.

—¿Que le dirás?—Hablo con la boca llena.

—Solo quiero preguntarle porque me vio la cara de idiota.

—Es que la tienes.—Rió codeándole ganándose un codazo por parte de Jay.-Un idiota prepotente.

—Cállate y sigue comiendo.—Rodó lo ojos bebiendo de su gaseosa.

Se mordió el labio nervioso, no sabía exactamente qué le iba a a decir a Jungwon, quería saber porque le había mentido, pero no quería ser brusco algo imposible para Jay, siempre era algo venenoso con sus palabras-y en realidad eso le mantenía aún más aturdido y nervioso. ¿Por qué le preocupaba si quiera ser brusco con Yang? no quería saber la respuesta ya que le pondría los nervios más de punta.

Le dio una mordida a su hamburguesa y dándole un último manotazo a Sunghoon posó su atención a la puerta del comedor, que era abierta por Jungwon y su grupo de amigos, aquel grupo que genuinamente brillaba por la sonrisa de Jungwon quien ahora le sonreía y ondeaba su mano en su dirección, devolvió el gesto con la misma sonrisa, viendo desde la distancia a Jungwon e inconsistentemente siguiendo sus pasos.

—¿Te gusta Jungwon?—Sunghoon rompió su atmósfera de tranquilidad hablando casi a su oído.

—No, claro que no.—Lo miró indignado, aquello sonaba tan descabellado en su cabeza que no pudo evitar reírse.

—Parece que si, lo sigues con la mirada a todos lados.—Codeó moviendo sus cejas molestándolo.
—Serían un bonito contraste, tú todo malote y él todo un pastelito de vainilla.

—Ajá.—Rió nuevamente rodando los ojos y dándole otra mordida a su hamburguesa.

—Los polos opuestos se atraen.

—En la ciencia, en magnetos, nosotros somos personas.

—Por leerte un par de conceptos ya te crees un gran físico ¿ah?—Rió.—No te hace daño admitir que por lo menos Jungwon te atrae.

En realidad le hacía daño a su orgullo, no era una mentira que Jungwon fuese una persona completamente bella que podría tenerte a sus pies cuando quisiera, pero todo en Jungwon era lo que siempre Jay había rechazado.

Ya que todo ese brillo, amabilidad y dulzura siempre le daban mala espina, las personas muy buenas siempre solían usar una máscara, claro que no sabía si era el caso de Jungwon, pero había logrado desconfiar de cierta forma de él por el secreto de su primo y en cómo lo había estado ayudando para que se acercara a él.

—Acaba tu hamburguesa que necesitamos ir al salón para el examen de física.

—Sí apruebas ese examen te compro el almuerzo todo el año.

—Lo aprobaré, estuve estudiando todos los días. —Se jactó dándole una última mordida a su hamburguesa.

A veces las cosas no salen como uno quiere, Jay lo sabe bien, quería gritar a los cuatro vientos por toda la frustración acumulada en su cuerpo, estaba que explotaba de la ira.

El examen para el que había estudiado como un maniaco se lo habían suspendido y todo por una tontería, una estupidez enorme. Le habían suspendido el examen solo por haberle prestado una goma a Sunghoon ¡solo por eso!, en definitiva el maestro la tenía contra él.

Había recorrido todo el instituto buscando al profesor para pedirle alguna oportunidad de repetir el examen, ni siquiera había podido poner la fecha, es por eso que ahora estaba afuera de un salón desconocido para él esperando al profesor para pedirle una oportunidad que obviamente se merecía.

Mordía su labio inferior arrancando las pieles secas de este mientras magullaba más su labio calmando sus ganas de explotar, el salón abrió sus puertas y buscando en la multitud pudo dar con el profesor, también con Jungwon.

—¡Profesor Choi!—Llamó la atención de este.

—JayJay, ¿que haces por aquí?—Hablo Jungwon a su lado.

Jay ignoró a Jungwon y camino hasta el profesor para poder hablar con él, el hombre se detuvo ante su llamado y mirándolo de pies a cabeza se puso delante suyo.

—¿Ahora con que saldrás?—Preguntó acomodándose los lentes.

—Yo en verdad no hacía trampa, solo le prestaba una goma a Sunghoon.

—¿Cómo aquella vez que te atrapé con un papel en la goma?

—Puedo hacer los ejercicios frente a usted, si así lo quiere.—Rogó.—Pero, por favor, deme otra oportunidad, yo—

—Él ha estado estudiando todos los días en la biblioteca, señor Choi, yo siempre lo veía estudiar ahí, él sabe de lo que iba su examen.-Hablo Jungwon al lado de Jay.

—¿Ahora necesitas que alguien más hable por ti y te defienda?—Negó con la cabeza.—El examen lo tienes suspendido, punto. Nos vemos en verano.

Y dicho eso el profesor le dio la espalda para seguir caminando, ignorando los ruegos de Jay.

Lo único que se le vino a la cabeza fue las horas perdidas en la biblioteca, todo para ser castigado injustamente.

—Trataré de hablar con él.—Dijo Jungwon a su lado.—Se que te dará una oportunidad si le demuestras que en verdad te interesa

—Una oportunidad.—Murmuró interrumpiéndole. —¿Así como tú primo con un novio?

—¿Qué?

—Oh, vamos Jungwon, tú primo, con quien me has estado "ayudando" tiene un novio.—Rió.

—¿De que hablas?

—Basta.—Frotó su ceño mientras se alejaba de Jungwon.

—Jay, ¿de que hablas?—Jungwon camino a su lado.

—Te dije que basta.—Lo miró con un ceño fruncido deteniéndose.—No necesito tu ayuda, Jungwon, no necesito tu acto de buen samaritano para que luego te estés burlando de mi.

—Yo no sabía que Sunoo tenía un novio.

—Si, ajá.—Rodó los ojos.—Mira que lo que ahora más me jode es que te hayas metido cuando estaba hablando con Choi, no tenías porqué hacerlo, me jodiste la oportunidad para dar un nuevo examen.

—Quería ayudarte.—Susurró.

—Pues lo único que hiciste fue joderme la oportunidad. No necesito tu ayuda, Jungwon, no la necesito para que después me veas la cara de idiota.

No debería de estar desfogando su enojo con Jungwon, estaba actuando como un idiota, bueno, Jay era un idiota.

Jungwon frunció el ceño, él solo hacía las cosas de buen corazón, nunca tuvo la intención de engañar o dañar de alguna forma a Jay, solo le ofrecía su ayuda por ser una buena persona.

—No tienes porque hablarme así.—Se defendió.—Yo solo quería ayudar, porque en primera fuiste tú quien vino a pedir mi ayuda para estar con Sunoo, como te dije yo no sabía nada de Sunoo y algún novio, él es reservado con sus cosas. Y también quise ayudarte con el profesor Choi porque se que tú estuviste todas las tardes en la biblioteca estudiando.

—Y como dije yo, no necesito tu ayuda, Jungwon.

—Bien, entonces vete al diablo.—Aún con el ceño fruncido se alejo de Jay.—Idiota.

He ahí otra amistad arruinada por el mal carácter de Jay y su actitud explosiva por el mínimo error, en el trayecto de su vida había arruinado unas cuantas amistades pero ninguna le había dolido como esa.

Porque nunca le había importado que alguien le llamase idiota con tanto rencor hasta que Jungwon lo había hecho y se sentía estupido, por dos razones.

La primera porque no debía de haberse portado de esa manera con Jungwon, él no tenía nada de culpa con su infortunio.

Y en segunda porque quería ir corriendo hacia Jungwon para pedirle perdón.

Pero no lo hizo, su actitud de idiota orgulloso pesaba más que sus pensamientos impulsivos de dejar todo por alguien que ahora era poco probable de ser una constante en sus días.

𝐂𝐈𝐆𝐀𝐑𝐑𝐎 𝐀𝐂𝐀𝐑𝐀𝐌𝐄𝐋𝐀𝐃𝐎 ꩜ 𝐉𝐀𝐘𝐖𝐎𝐍 ᰔᩚ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora